1

21.5K 594 237
                                    


੭୧

El pelinegro corría detrás de su pequeño de tres años, tratando de detenerlo pues corría completamente desnudo por su casa.

— ¡Ni-ki! Detente — Una risa traviesa se hizo presente, al pequeño patito le encantaba hacer enojar a su papi. — ¡Jay dile algo! Ayúdame

— Ni-ki, obedece a papi. — Fue todo lo que obtuvo por su parte provocando un bufido de su pareja.

— ¿Es enserio Park? — Al notar que su esposo lo miraba con mala cara fue detrás de su pequeño hijo, el cual rápidamente pidió ser cargado.

— ¿Por qué no le haces caso a papi? — le tomo en brazos caminando de vuelta a la habitación donde lo esperaba su esposo para cambiar al menor.

— Papi~ — Jungwon frunció su ceño.

— Papi nada, papi está enojado contigo y con tu padre, ninguno pone de su parte. — lo tomo en brazos sentando le en la cama para después comenzar a vestirlo.

— Omega no te enojes — suspiro cuando fue tomado por la cintura. — Tal vez nos hace falta jugar un poco — dejo un pequeño beso en su linda marca provocandole un escalofrío al menor.

— ¿Jugar? Me hace falta que me ayudes en casa Jongseong, estoy cansado, no puedo tener una salida con mis amigos a solas, no puedo tener tiempo para mí, todo se trata de atenderlos a ambos y mantener la casa en perfectas condiciones — el mayor suspiro suavemente, volvían siempre al mismo tema.

— Okey está bien, tu ganas...contrataremos personal y una niñera para ni-ki para cuando quieras salir — recibió una linda sonrisa de su Omega.

— Gracias...

— Ahora ya me voy, tengo que ir al trabajo y ayudar a Sunghoon con su propuesta. — el menor se dió la vuelta dejando a su pequeño remolino en la cama, tomo las mejillas de su esposo y planto un lindo beso en sus labios.

— Te amo, ve con cuidado.

El mayor asintio saliendo de la habitación.

— ¡Adiós Ni-ki!

— ¡Adiós papá!

Un pequeño silencio reino en la habitación durante unos segundos.

— Ven a peinarte

Una risa escapó del pequeño y salió corriendo, oh no, aquí vamos otra vez.

੭୧

El Omega australiano esperaba a sus amigos en compañía de un vaso de agua, revisaba cada tanto su celular, por favor ¿Que esperaba? Bien sabía que sus amigos eran unos impuntuales.

— ¡Ni-ki! — El australiano reconoció aquella voz y no pudo evitar carcajear al ver a su menor corriendo detrás de su pequeño hijo.

— Lo siento, ni-ki cada vez es más... imperativo — Hablo el menor tratando de regular su respiración mientras cargaba a su hijo.

— Si, se nota, se nota — ambos rieron mientras tomaba asiento, solo faltaba Sunoo.

Finalmente quince minutos después, los tres omegas y el pequeño niño se encontraban reunidos.

 𝅙ふ𝅙𝅙𝅙¿Sexo?𝅙𝅙𝅙𝅙៹𝅙𝅙Enhypen.𝅙𝅙𝅙ᰭ𝅙𝅙  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora