LA ENTREVISTA [HYUNLIX]

CAPITULO 5

Felix se levantó de la mesa recogiendo su plato. —Te irá bien. Yo conozco lo talentoso que es mi querido esposo—Se inclinó colocando sus labios sobre los de Hyunjin y separándolos al instante.

Los labios de Hyunjin quedaron húmedos y brillantes a causa del bálsamo labial hidratante que llevaba Felix. Este respondió al instante dándole un beso y esparciendo todo el bálsamo por sus labios.

—Fresa— dijo Hyunjin con plena seguridad, inclinando su cabeza y mordiendo su labio inferior.

Han se levantó de golpe, recogiendo su plato y el de su padre para llevarlos al lavavajillas. El chico volteó a ver al pecoso con una gran sonrisa en el rostro, él cual aún estaba ubicado al lado del fregadero.

Felix sólo suspiró al ver la sonrisa del castaño. —Yo fui el que apoyó a tu padre para darte el permiso, así que no debes pedírmelo, pero si llamo a casa de tus amigos y ellos me dicen que no están ahí, llamo de inmediato a tu padre, ¿me entendiste?—

Han levantó sus brazos dejándolos caer sobre los hombros de Felix y le dio un beso en la mejilla con gran entusiasmo. —Gracias papá, eres el mejor— Se volteó y tocó el hombro de Hyunjin—Te va a ir bien, ¡eres el mejor periodista papá!— Se inclinó recogiendo la mochila del suelo y colocándola en sus hombros.

—Gracias, espero no tener quejas de tu padre, ¿entendiste Jisung Walker?— respondió Hyunjin mientras sus ojos observaban a Jisung.

Éste sólo salió corriendo tomando unas llaves que se encontraban en una canasta sobre un estante al lado de la puerta y sacando una bufanda del armario.—¡Vale, vale!—, dijo con emoción notoria en su voz.

—Que te vaya bien hijo— dijo Felix con voz dulce inclinándose un poco para mirar cómo la puerta se cerraba.

—Sigue siendo un niño mimado aunque ya tenga 15 años, ¿verdad?—comentó Hyunjin.

—Ha transcurrido el tiempo tan rápido—, respondió Felix inclinando un poco su cabeza.

—Es verdad, lo hemos criado bien— Hyunjin recorrió la silla. —Yo también me tengo que ir, debo ir primero a la oficina a terminar unos asuntos y después viajaré a Washington DC— Habló mientras se dirigía a la puerta. Tomó unas llaves que se encontraban sobre la mesa del comedor y la lonchera que Felix había empacado temprano.

Felix caminó detrás de él. —Bueno, ponte la gabardina negra, combina mejor con el traje que llevas—

Hyunjin abrió las puertas del armario ubicado junto a la puerta principal. Con su mano derecha movió los ganchos en busca de uno específico, detuvo su mano y sacó una gabardina de color negro como Felix le aconsejó. Deslizó sus brazos por las mangas de la gabardina.

Felix se acercó estirando sus brazos para poder arreglarle el cuello, al terminar estiró su mano colocando en la de Hyunjin las llaves y la manija de la lonchera que había tomado de la mesa. —¿Se te olvidaba algo?— preguntó Felix mirándolo a los ojos con una sonrisa que provocaba que se formaran hoyuelos en sus mejillas.

—¿Qué haría sin ti?— mencionó Hyunjin inclinando su cabeza para darle un pequeño beso a la nariz de Felix, cuyas mejillas se ruborizaron rápidamente.

—¡Ya vete o se te va a hacer tarde! Además tú no eres el único que trabaja en esta casa— dijo Felix con voz acelerada mientras ponía las manos en la espalda ancha de Hyunjin y lo empujaba a la puerta de salida.

—Está bien, ya me voy. ¿Pero si me das un beso?—

—No—

—Pero, ¿por qué no?—, preguntó Hyunjin de manera seria, estirando sus labios y arrugando un poco su nariz.