O.S | CieLois

The Bottle.

AU. Moderno.

Sieglinde Sullivan entra nuevamente al salón, que luce bastante desorganizado.

—El director dice que no podemos irnos hasta que alguien confiese o sepan quién fue.

Anuncia en voz alta para que los pocos presentes puedan escuchar y se acerca a la silla donde su novia Elizabeth está sentada y agradece cuando esta deja que ella se siente.

—No entiendo por qué tanto escándalo por una simple botella.

Se queja Alois, quien está recargado sobre su novio Ciel.

Todos están sentados en el suelo en una de las esquinas del salón, a excepción de Sully, quién por sus problemas para caminar tiene que permanecer en una silla.

—Es porque es una botella de bebida alcohólica, bobo.

Responde Soma, quién está haciendo garabatos en su cuaderno por aburrimiento.
El rubio rueda los ojos por el insulto.

—Yo opino que fue Alois.

Exclama Doll, quién para pesar del rubio, está al lado suyo.

—Hablas por hablar, cállate un rato mejor.

Ordenó, apenas llevan ahí media hora pero jura que si tiene que pasar tan solo diez malditos minutos más con ella, le va a arrancar los "pocos" pelos que tiene.

Definitivamente no se llevaban nada bien.

—Eres Alois Trancy, eres rebelde y siempre buscas llamar la atención, eres un vago, tienes de todo para ser tú.

Ignora la orden y suelta sin tacto ni intenciones de esconder que él también le cae mal.

—Mucha insistencia en echarme la culpa. ¿Por qué?, ¿acaso fuiste tú?

—Idiota, claro que no, no soy una vaga como tú.

—Hazte, pero sabemos que adoras romper las reglas. Ahora que lo pienso, las bolas también.

Y antes de que puedan seguir discutiendo Ciel se lavanta y se pone en medio de los dos.

—Ya, basta. Que el culpable simplemente admita, no lo van a expulsar, cómo mucho tendrán un reporte y llamada a sus padres. — Vió a todos los presentes, solo eran seis, pero hacía falta alguien en la habitación.