O.S | CieLois

Drowned in tears.

Spoilers de los últimos arcos del manga.

Sentía que la respiración estaba faltándole, caminaba de un lado a otro desesperado, ya no tenía el control y detestaba eso con su alma.

Pero su corazón terminó de romperse cuando volteó hacia su amado rubio de ojos celestes y vió como sus lágrimas corrían por sus mejillas sin parar.

Todo había sido en vano.
No valió la pena verlo llorar tan preocupado por él todas las noches, no valió la pena traerlo a vivir a un sótano que apestaba a opio, tampoco enviarlo a investigar, arriesgando su vida.

Todo estaba perdido.
El verdadero Ciel Phantomhive había encontrado su escondite y no podían salir de ahí, morirían instantáneamente. Pero saber que el lugar se estaba incendiando provocó que se consumiera en el pánico. No era fuego normal, era fuego creado por un Shinigami.

—Ahora no hay...no hay donde correr. —Confesó a los sirvientes de la casa Phantomhive y Trancy, que también estaban ahí.

Intentó casi rogar ayuda a Sebastián, pero incluso el demonio estaba pálido.
No había forma de escapar de la muerte esta vez.

Todo termina, este es final.

El demonio azabache se llevaría su alma y Claude la de su novio sin haber podido cumplir sus deseos de venganza a quienes los humillaron.

La vida de Meyrin, Bard, Finny, Snake, los trillizos y Hannah terminaría. Los primeros por su naturaleza humana y los últimos por ser demonios de muy bajo rango que si eran afectados por el particular fuego.

Los únicos que saldrían con vida serían los dos mayordomos.

—Lo siento...Es culpa mía, lo siento mucho. Todos tienen mis disculpas.

Sollozó, nunca habían presenciado tal derrumbe emocional en su joven amo, pero simplemente esta vez la situación se le salió de las manos. No siempre contarían con suerte.

Rápidamente su Alois fue a abrazarlo y a arrastrarlo al más profundo rincón de esa habitación de la que ya no podían salir, las llamas verdosas ya estaban muchísimo más cerca.

La mansión Phantomhive lloraba a sabiendas de que su vida terminaría y agradecieron al joven amo por otorgarles un hogar, una identidad y hacerlos pertenecer.

Las palabras conmovieron a los dos condes que se abrazaban con desespero, morirían todos juntos.

—Espero encontrarlos a casi todos en nuestra próxima vida. —Deseó el de ojos celestes, comenzando a sentir su cuerpo demasiado caliente.
Aún si sabía que su alma sería devorada al igual que la de su amado, le gustaría imaginar que tendría una alma nueva que si encontrara a las buenas personas que conoció en esta vida.

Aunque eso sería algo imposible.

—Supongo que este es un adiós. Sepan que morirán con orgullo de haber sido leales y sumamente serviciales. —Habló para sus sirvientes, luego dirigió su mirada a su novio, a su amado. —Y tú...te amo, Alois, no me arrepiento de haberte conocido.

—También te amo, Phantomhive, con todo mi corazón. Y quiero que sepas que no me arrepiento de haberte seguido hasta hoy.

Tú y yo solo somos personas, más no somos libres.

—Que la muerte nos separe. —Exclamaron al unisono.

Todos, ¿necesitan un lugar para escapar?
Veámonos en el próximo ecosistema.

Finalmente, el fuego consumió sus sonrisas y los demonios se llevaron las almas de sus contratistas antes de que también se consumieran por el fuego.

Todo termina. Es un adiós, es el final, eso supongo.

Nos encontraremos mañana, ya verás.

Yo intentando negar las acusaciones de niña rara pero me inspiré en universe cat drowning KSJSKSJS.

Sé que quedó muy corto.
Pero más corta la tiene tu ex.

Gracias por leer, perdón por ausentarme por exactamente 21 días.
Gracias por votar y comentar también.
Cuidense mucho.

MEL.