Nueva Oportunidad (Snarry) PAUSADA

selección

Severus

El resto del camino fue algo aburrido, nos preparamos y pusimos las túnicas, la profesora McGonagall me mandó una carta diciendo que sería seleccionado junto a los de primer grado, así que me tocaba esperar fuera del comedor, íbamos caminando a Howgarts, pero desvíe mi camino por que tenia que hacer mi entrada en los botes junto con los de primero, camime rumbo a hagrid que nos esperaba, hasta que Potter tomó mi mano.

¿Que? - pregunté fastidiado.

- ¿A donde vas? - dijo serio.

- Con hagrid a los botes- dije confundido por el comportamiento de Potter.

- Oh, olvide ese detalle. - susurró soltando mi mano.

- Nos vemos. - dije.

- Espero y te toque en Gryffindor. - Dijo sonriendo.

- Espero y no. - susurré.

- ¿Que? - dijo

- No, nada nos vemos. -dije

Camine rápido a los botes, el camino fue emocionante, claro no lo admitiría, llegamos y esperamos fuera del gran comedor estaba nervioso, pero no tengo por que estarlo seguiré siendo un orgullo Slytherin, las puertas se abrieron y entramos.

- Llamare uno por uno y pasaran al frente, para ser selecciónados. - Dijo la profesora McGonagall.

- Laila Wondy. - paso una pequeña rubia sonriente.

- Hufflepuff. - grito el sombrero.

Niño por niño iba pasando, cada vez me ponía más nervioso y más con la mirada de Potter encima de mí, maldito Potter.

- Rigel Carrow. - llamó

- Slytherin. -Grito el sombrero.

Mierda, que esto termine pronto, sentía que me desmayaria en cualquier momento.

- Matheo Snape. - llamó McGonagall, todo el comedor exploto en susurrós.

Me acerque y tome asiento.

•••Mente de Severus•••

-Snape es bueno tenerte de nuevo, una nueva oportunidad veamos que haré contigo. - Dijo el sombrero

-Nada, no harás nada, solo ponme en Slytherin. - dije enfadado.

- Creo que esta vez será diferente. - Dijo el sombrero.

- Ponme en Slytherin maldito trapo viejo. - gruñi enojado.

- Una nueva oportunidad, creo que también será una nueva casa. - Dijo seguro el sombrero.

-Maldito tramo de mierda, ponme en Slytherin. - dije

- Suerte Severus. - susurró.

- Jodid... - no pude terminar.

- GRYFFINDOR. - grito al gran comedor el sombrero de mierda.

Todos aplaudieron, con el humor de perro camine a la mesa y me sente a lado de Neville, mire con horror cómo el color rojo se instalaba en mi túnica.

- Es bueno tenerte aquí. - dijo Potter empujando al pobre Neville para sentarse ai mi lado.

- Si, claro. - dije sarcástico.

Empecé a cenar, recorrí el lugar con la mirada hasta que mi vista se encontró con draco malfoy, olvidando que todos el grupo de Potter me miraba le sonreí a Draco y mi sonrisa fue correspondida.

- ¿Que miras? - dijo Potter, di un pequeño salto al olvidar que existía.

- Oh, no nada. - dije desviando la mirada.

Potter miró de draco a mi con cara de enojado, la cena pasó tranquila o algo así porque Potter no me permitía ver a la mesa de Slytherin cada que lo hacía su mirada se enfocaba en mi y me ponía de los nervios, joder hasta mi estúpido cerebro pensó que Potter se ponía celoso de que mirara a alguien más.

- Es bueno tenerte en Gryffindor - Dijo Ginny.

Nos dirigimos a la sala común, practicar con Ginny era cómo platicar con lily, tenian el mismo carácter, creo que podría darle el privilegio de ser mi amiga.

-Esperaba estar en Slytherin. - susurré.

- ¿Cómo tu padre? - pregunto.

- Así es. - dije

Sentí un pequeño roce a mi lado, cuando volte tenía a Potter a mi lado, joder.

- ¿Te gusta el Quidditch? - pregunto la pelirroja.

- La verdad, no. - confesé.

- Oh, que mal. - Dijo desanimada.

Eché un vistazo a Potter que caminaba serio a mi lado, donde dejaría a Weasley y Granger.

-Llegamos. - hablo Potter por fin.

Los tres entramos, me sentía un poco candado a sí que decidí subir.

- Potter, ¿sabes donde esta mi dormitorio? - pregunté olvidando ese detalle.

- Si, sígueme. - Dijo

Subimos en silencio, entramos a una habitación que tenia 4 camas.

- compartirás habitación con ron, Neville y conmigo, tu cama será esta. - Dijo

- Gracias Potter. - dije

- Dime Harry. - Dijo recorriendo mi cuerpo descaradamente.

- Okey Potter. - dije sonriendo arrogante.

- Descansa Matheo. - susurró.

Con una pequeña sonrisa salió de la habitación, joder Potter me ponía de los nervios, decidí darme un baño rápido, me acosté dispuesto a descansar.