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Billy y Stu, ambos chicos sentados en en sillón de la casa Macher con "El silencio de los inocentes" en la caja televisiva distrayendolos a momentos de su muy importante charla; cómo sacar a Randy del juego, y su plan era muy facil:

Stu caminaba nervioso a la casa de Randy, el tipo era agradable hasta cierto punto, pero era presa fácil, ¿por qué no acabar con él?, llegaba a un punto en que era molesto e irritante, al final de cuentas, ésto lo hacían mera por diversión, ¿no?.

"TAP, TAP, TAP" se escuchó en la casa, proveniente de la puerta delantera, Stu estaba nervioso a más no poder, siempre se ponía así al momento de cometer un asesinato, y Billy era quien siempre estaba ahí para calmarlo, pero hoy no, "sólo hoy será la escepción" se repetía con voz calmada en un intento infructuoso de tranquilizar su ansiedad.

-¿Hola?- la confusión en el rostro de Randy era más que obvia y notoria, "demasiadas sorpresas por un día" pensó.

-¡Hey!, ¿qué tal, viejo?- habló tomando al más bajo por los hombros en un abrazo juguetón.

-Bien, bien, todo bien, iba a--

-¿qué te parece si hacemos algo?, quizá tomar unas cervezas, es un día caluroso.

-sí, justo eso i--

-Mira, llamaré a Billy, podríamos pasarla muy bien juntos.

-Como te decía;- intentó continuar- estaba a punto de tomar con--

-¡Genial, entonces me quedo!.

Algo provocó la curiosidad por voltear hacia atrás en ambos chicos, podía ser el pesado ambiente a sus espaldas o aquel par de miradas fijas en los muchachos.

-Hey, buddy, no me dijiste nada de tener compañía.- continuó alegre adentrándose en la casa sin siquiera pedir permiso.

Randy llevo sus manos a su cabeza con frustración, quería arrancarse su cabello de su propio cráneo. Para Stu ni uno de sus movimientos pasó por desapercibido, tener a Sid y a Tatum ahí era o algo muy bueno o algo que podía terminar de forma catastrófica, no hay puntos medios, y eso lo alertaba, lo orillaba a prestar más que poca atención a su alrededor.

-Tatum, linda, ¿qué tienes?- con su máscara de preocupación habló, ayudándose a mantener ese rostro falso al recordar a su pobre chico sentado en las escaleras de su casa en esa fria noche.

-No, no tengo nada, estaba cortando unas cosas y casi me revano el dedo con el cuchillo, sólo me asustó, nada más.- la mentira en su voz cortada era obvia, Stu no era tan tonto.

-Stu, ya nos ibamos a ir y--

-No...- en el ambiente se sintió la desesperación de Stu dispararse, él tenía que mantenerlas ahí a toda costa hasta ponerse de acuerdo con su chico- aún es muy temprano, Randy me dijo que iba a tomar, por eso me iba a quedar, supongo ustedes estaban incluidas... quisiera que se quedaran.

-Stu, tenemos cosas que hacer, podríamos quedarnos sólo un par de horas, no más.- Tatum explicó con paciencia.

Un par de horas era más que suficiente para acabar con sus vidas. Stu esbozó una sonrisa pícara y continuo:

-Genial, llamaré a Billy, en un momento va a estár aquí.

Sidney y Tatum se miraron con preocupación "¿qué tal si él es el disfrazado?", justo en ese momento Tatum había logrado divisar un moreton cerca del cuello del alto, sin rodeos razonó; quiza fue resultado de la paliza que le dio con su bate, y quizá haber visitado a Randy fue una muy mala idea.

Profunda necesidad [Stuilly]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora