Capítulo 13

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Esta historia es completamente ficticia con el único propósito de entretener, no busco ofender a nadie ni nada, la historia es alterna a nuestra realidad por lo que algunos eventos históricos son diferentes, no soy dueño de los respectivos animes/mangas, imágenes o personajes que aparezcan, créditos a sus respectivos autores, si no has leído los capítulos anteriores te recomiendo hacerlo para que entender mejor la trama, si eres menor de 18 años no leas el fic, se recomienda discreción.

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30 de Mayo de 1560, Reino de Gesta, Capital de Oakrose (10:00 PM)

Ya había anochecido y moral estaba por los suelos entre las tropas gestarios, aquel caballero con escudo de oro había sido su luz de esperanza para que lucharan con más ánimos pero al igual que muchos otros cayo victima de aquella explosión y con ello la esperanza de ganar la batalla murió con él, sufrieron tantas bajas que era imposible contarlas, estaban tan aterrorizados que no paraban de temblar, los que lograron sobrevivir estuvieron gimiendo de dolor durante toda la noche, se habían encendido antorchas en todas las paredes ante un posible ataque, los rostros afligidos de los soldados eran iluminados por las llamas.

El General Kedrik se encontraba yendo a una reunión de emergencia junto al resto de oficiales pero una cosa tenía muy clara en su mente, no iban a ganar, los argentinos ya había dejado en claro lo poderosos que eran, atacarlos con la caballería fracaso, usar la infantería pesada fracaso y cuando los soldados se dispersaron en diferentes direcciones para atacar la base enemiga también fracasaron, al entrar en la sala pudo ver que los demás se encontraban muy estresados y con rostros vacíos estando resignados a lo que iba a ocurrir con su reino.

"Por el momento los argentinos no han atacado aún... sin embargo esta espera me esta poniendo de los nervios. Qué pretenden con todo esto?" Dijo Kedrik.

"Es obvio que están usando guerra psicológica para dañar mentalmente a nuestros soldados, hemos tenido que retirarnos atrás de nuestras defensas por temor a un repentino ataque sorpresa de sus dragones de hierro, su poder mágico es tan grande que fácilmente podrían reducir la ciudad a cenizas" Dijo Uzor.

"A lo mejor están esperando a la fuerza principal para iniciar el asalto" Contesto un oficial llamado Verth.

"A qué te refieres?" Dijo otro oficial.

"Piénsenlo! Y si todo este tiempo nos enfrentábamos a la vanguardia de su ejército!? Todo lo que ocurrió fue para debilitarnos lo suficiente para que cuando llegue su ejército principal no encontraran resistencia alguna para tomar la capital!" Exclamo Verth.

"Si eso es cierto entonces que posibilidades tenemos de enfrentar a su fuerza principal si ni siquiera pudimos con la vanguardia de su ejército" Dijo un oficial con resignación en su voz.

"Te rendirás así de fácil Merrell?"

"Tienes alguna idea para vencer a los argentinos!? No!? Entonces no digas nada Seberg!"

"Suficiente! La lucha no es entre nosotros! Si no pueden tener la mente fría entonces retírense de inmediato!" Dijo Kedrik.

Hubo un largo silencio en la sala mientras todos pensaban en alguna forma de acertarle un duro a los argentinos y sin embargo a nadie se le ocurría nada, la táctica más usada en la guerra resulto en un rotundo fracaso y esperaban que el Rey no decidiera enviar a sus esposas, ancianos y los más pequeños a luchar contra los argentinos en un intento desesperado por ganar la batalla, entonces uno de los oficiales decidió tomar la palabra.

"Yo iré"

Todos voltearon a ver al oficial que había hablado, su nombre era Calcio el Comandante del 3° Batallón de Caballería muy conocido por ser ingenioso y sus 2000 jinetes dotados de una respuesta rápida, custodiaban la puerta sur y hasta el momento se han mantenido intactos lo que indica lo habilidosos que son, Kedrik había sido ayudado por Calcio en muchas ocasiones y sus logros ayudaron a convertir al reino de Gesta en el más poderoso de Belerion razón por la que el General no quería muriera en vano.

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