Jennie jaló una vez más a lisa del brazo mientras que la arrastraba de una tienda a otra. Se detuvo al frente de una tienda colegial, en donde entraron y se dirigieron a la sección de ropa escolar femenina.
- ¿La puedo ayudar en algo, señorita? - le preguntó amablemente una vendedora, aunque en vez de estar mirándola a ella, se comía a lisa con la mirada. Le dedico una mirada glacial.
- No gracias.- dijo irritada, tratando de que se fuera pero ella no entendió.
- Bueno, cualquier cosa no duden en Ilamarme. - y dedicándole una última mirada ardiente a Lisa, se giró y caminó con un movimiento exagerado de caderas. Pareciera como si no tuviera otra cosa que hacer.
Jennie se aclaró la garganta, y solo entonces Lisa le quitó los ojos de encima a la vendedora para verla a ella con la boca abierta.
- Cierra la boca, que se te cae la baba.
- gruñó, cogió unas cuantas faldas y camisetas de su talla y caminó hacia el probador. Lisa la siguió por detrás.- Vamos, no te enojes pequeña. Sabes que la muñequita de mis ojos eres tú.- dijo y trató de tocarle el hombro, pero antes de que pudiera hacerlo Jennie volteó y lo espetó con la mirada.
- Eres una cabrona, yo no le miro el culo a los hombres o mujeres cuando pasan al lado mío.
- ¿Ah, no? - dijo alzando una ceја у cruzándose de brazos. - bien sabes que eso es mentira. Te quedas pegada mirándoles.
Jennie se sonrojó.
- Es diferente.
- No lo es. - la tomo de los hombros y la giró quedando de espaldas a ella. Apoyó su barbilla en su hombro y susurro muy cerca de su oído.- ahora ve, pruébate el uniforme y enséñame como te quedo.- y dándole una fuerte cachetada en el culo, la adelantó a entrar al probador.
La chica cerró las cortinas y Lisa se sentó en uno de los sillones que estaban ahí a esperarla. Miró a su alrededor, habían unos cuantos sillones más esparcidos y mujeres sentadas esperando a sus hijas, tal vez. Las miradas y comentarios que hacían las mujeres entre sí respecto a ella era algo imposible de evitar escuchar.
Pero los pensamientos de la mayor estaban solo puestos en Centró sus ojos en la cortina, y vio a su sobrina sacarse las zapatillas por debajo. Sonrío cuando vio sus lindos calcetines rosados adornados de pequeñas flores. Pero toda su mente se tornó en blanco cuando sus shorts cayeron al piso, seguido de su camiseta. Lisa se tensó, y tejió en su mente una bonita imagen de ella en ropa interior. Y joder, tuvo que hacer un gran esfuerzo por no entrar y follarla ahí mismo. Era demasiada la tentación por la cual estaba pasando.
De repente, Jennie giró sobre sus talones y Lisa desvió su mirada hacia el techo. Las cortinas se abrieron y jennie apareció vestida con su bonito uniforme colegial.
- Lis.- lo llamó ella.
- ¿Ah?- dijo y solo entonces la miró.
- ¿Qué crees tú? ¿Cómo me queda?- preguntó y salió del probador para que ella la pudiera ver por completo.
Lucía estupenda con aquella falda, ceñida a las caderas, estrecha, dejando ver sus piernas. Y con la camiseta puesta, algo transparente, que dejaba ver su sostén y algo más a la imaginación, mmh... perfecta.
- Gírate.- le ordenó.
Y lo hizo. ella fijó sus ojos en su trasero, al mismo tiempo que se relamía los labios.
- Te queda perfecto. Venga, quítatelo y lo vamos a comprar.
Jennie sonrío y se giró para adentrarse nuevamente al probador. Se desvistió y se colocó su ropa, para luego salir con la falda y la camiseta en las manos. Caminó junto a Lisa al cajero, y al hacerlo, se encontró con la misma vendedora hace minutos atrás. La menor la fulminó con la mirada.
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Mi tía | jenlisa adaptación
FanfictionJennie era extremadamente joven, a penas entrando a la adolescencia y lisa una cretina por posar sus ojos en ella. Luego de que el padre de Jennie Kim, junto con su madrastra hayan decidido tomar unas vacaciones y que la dejarán a cargo de su tía, L...