Invasión Z (Sección 1)

LA TORMENTA

Ya todo despejado, los zombies han sido exterminados en el centro comercial, ya fueron expulsados del lugar. Todo está listo para poder vivir allí adentro, solo falta hacer unas cuantas trampas, en eso está Daniel, fue difícil, pero consiguió algunos troncos y madera.

3:00 p.m. Daniel les colocó a los troncos unos tipos de estacas alrededor con el fin de que cuando un zombie se acerque quede inmóvil entre esas estacas haciendo que sea fácil de matar. Isabel selló las entradas y salidas con madera, quizás no sea tan útil, pero de algo sirve.

La única entrada es la principal y una de emergencia en el parqueadero. La entrada principal está hecha con un sistema de poleas, es un tipo de muro lleno de estacas, el muro es algo grueso, resistente. Con el sistema de poleas hace que esta suba y baje. Solo puede ser abierta por dentro.

Después de eso se dieron un merecido descanso, en la parte de un supermercado grandísimo, donde hay varios productos. Comiendo lo mismo que llevan comiendo desde hace rato.

-Maravilloso trabajo -Daniel dijo con orgullo de haber hecho tanta cosa en apenas un día.

-Sí, todo quedo genial -Isabel también estaba orgullosa.

-Este será un muy buen sitio para vivir.

-Desde que no nos descubran o no pase nada malo estaremos bien.

-Nada pasará. de eso estoy seguro -aseguró.

De repente todo tornó color oscuro, la tormenta está a punto de empezar. tocó encender las luces del centro comercial. Toda la ciudad se puso como si ya se hubiera anochecido y apenas son las 4.

Aunque aún la lluvia no caía, los relámpagos se escuchaban durante demasiado tiempo. -se avecina una gran tormenta -Daniel se estiró un poco de la pereza que tenía, el clima era perfecto para echarse una buena siesta-. ¿Sera malo si duermo un rato?

-NO. No, no, aun está temprano, ¿Qué pasa si viene alguien malo y yo quedo aquí solita? -Dice Isabel con cara tierna.

Daniel ya iba camino a acostarse. -Ah, verdad -Se detuvo-. Pues será quedarme despierto -Todo era oscuro, al parecer la tormenta va hacer algo dura.

Pasaron las horas y aún con todo cerrado había demasiado frio, seguía relampagueando, pero no había ni una gota de agua. Isabel estaba algo asustada, tenía el presentimiento de que algo malo sucedería.

Cayó un rayo que sonó demasiado duro, inmediatamente todo el centro comercial quedó sin luz e Isabel lanzó un grito de susto. -AAAAAAH, Isa, pero ¿POR QUÉ GRITAS? -Daniel también saltó del susto, no por el rayo sino por Isabel.

-Perdón -Se disculpó mirando por todos los lado.

-Iré por una linterna, quédate ahí.

-Espera que... -Isabel se asustó un poco-. ¿ya te fuiste? -Daniel ya se había ido por la linterna-. ¿Daniel? -No se miraba nada de nada.

Todo estaba extremadamente oscuro y hasta ahora eran las 6 de la tarde, Daniel andaba tranquilo yendo por la linterna, aunque no mirara absolutamente nada. -mmm, no sé cómo voy a encontrar una linterna sin linterna, todo está oscuro, no veo nada -Estaba algo cansado, quería dormir ya, pero no podía dejar a Isabel sola. Un sonido raro se escuchó.

Daniel se detuvo, eran pasos de personas, Daniel cerró los ojos quedándose parado, escuchando atentamente todo lo de su alrededor. De repente alguien empezó a correr hacia el lado donde estaba Isabel. -¡ISABEL SACA TUS ARMAS Y TEN CUIDADO! -gritó mientras corría, ya tenía el arco en su mano con una flecha lista para ser lanzada.

Fue al punto de encuentro, no había nadie ni rastros de Isabel, aun así, se escuchaban nuevamente que alguien caminaba. -Isabel -Daniel dijo el nombre de su compañera, pero no había rastros de ella, se preocupó un poco.