Pequeño Omega → VKOOK (omegaverse)

Familia

Su dedo tembló como nunca, pensó en un segundo tirar el teléfono lejos de su alcance y que este se rompiese para evitar esa llamada. Oh, porque si algo sabía el alfa, es que su suegra nunca le llamaba a menos que fuese por algo extremadamente importante porque ciertamente, los padres de Jungkook nunca tenían tiempo ni siquiera para su propio hijo. La última vez que le habían llamado había sido hace bastante tiempo y aquella llamada le ponía los pelos de punta. 

Taehyung tragó y miró a Jungkook. 

El menor le abrió los ojos intentando buscar una reacción en su alfa, pero no hizo más que ponerlo nervioso con esa mirada penetrante que a veces le recordaba a su suegra, un poquito.

—Contéstale  —dijo el menor alzando su mentón, no se veía nervioso a comparación del alfa que en cualquier momento se iba a caer al piso con sus piernas flaqueándole al paso—. No me digas que le tienes miedo a mi mamá —dijo, casi burlándose con una media sonrisa. 

—¡Claro que no!—dijo ofendido ante lo dicho—, pero contesta tú, es tu mamá —le tendió el teléfono a Jungkook el cual le miró incrédulo.

—Pero te está llamando a ti.

Taehyung suspiró sintiendo que comenzaba a sudar frío por la nuca.

Vamos, era un alfa, uno hecho y derecho. Mayor de edad, responsable (aunque esa parte era cuestionable), próximamente padre de familia, ¿cómo iba a tenerle miedo a su suegra? Era una llamada. Solo una llamada.

Se armó de valor con ese pensamiento y presionó el botón verde en la pantalla llevando el teléfono a su oído. No quiso poner el altavoz porque estaban en público y no sabía qué esperar de esa llamada. 

—Suegrita ¿Diga? —su voz salió más aguda de lo que le hubiese gustado y casi se quiso golpear a sí mismo por no verse tan varonil ante su omega.

Jungkook le miraba expectante tratando de apegarse a la oreja de Taehyung y así escuchar algo. 

—Kim Taehyung —la voz femenina dijo, tan demandante como conocía y los vellos de su nuca se erizaron. 

—Suegra.

—Cómo es que me entero de que has embarazado a mi único hijo por boca de tu padre y no por la tuya —espetó y oh, se escuchaba enojada. Los músculos de Taehyung se tensaron por completo y miró a Jungkook buscando ayuda. 

¿Su padre? ¿Cómo es que...

Sintió su garganta secarse y su corazón le subió a la boca en dos segundos.

Antes de que dijese algo ya tenía a la mujer volviendo a hablar en la otra línea. 

—He llamado a tu casa porque quería llevarle un obsequio a tu madre por su cumpleaños desde aquí aprovechando que vinimos a Francia de paso antes de volver, pero me ha contestado tu padre y ¡oh! —hizo una pausa—, me entero por casualidad que los tres habían salido. Al principio creí que habían caído en esto de las relaciones abiertas, pero Jungkook no fue educado de esa manera, por lo que le saqué la verdad. Mi hijo está en cinta y no fue capaz de decírmelo. ¡Ni siquiera tú!

—S-señora Jeon, yo...yo le juro que le puedo explicar, no se enfade. Por favor, esto lo-

—¡En cinta! —repitió, esta vez más escandalizada— ¡Embarazaste a mi único hijo, Kim Taehyung!

—Le juro que no era nuestra intención. D-digo, claro que no, nosotros nos cuidábamos....a veces, p-pero fue casualidad. Le juro que no es culpa de Jungkook, esto...

—¡Claro que no es su culpa! ¡Tú pusiste la semilla! Estoy tomando un avión ahora mismo devuelta a Corea junto a su padre, así que más les vale tenerme una explicación razonable para lo que planean hacer en un futuro.