Mr. Loverman [yoonmin]

parte 38

Las horas pasaron lentamente pero finalmente llego a Sicilia.
Una vez que salio del avión, Yoongi se apresuró a recoger su equipaje y salir del aeropuerto. Una vez fuera, cerró los ojos por un momento e inhaló profundamente el aire de aquel pueblo donde vivió tantos años, sintiendo el peso de las circunstancias sobre sus hombros. Con determinación en cada paso, se dirigió a la entrada del aeropuerto y tomó un taxi hacia el club donde trabajaba Jimin
Durante el viaje en taxi, Yoongi se sentó en silencio, con los ojos fijos en el paisaje que pasaba afuera. Su mente estaba llena de preocupaciones, dudas y planes acerca de cómo sacar a Jimin de ahi lo antes posible.
Sabía que tendría que ser cauteloso, notó unos guardias de seguridad patrullando y cámaras de vigilancia instaladas en todos lados.

Yoongi se tranquilizó y simuló que era uno de esos sucios hombres que entraban a ese club, aprovechando que el señor Choi nunca habia visto su cara pudo entrar pasando desapercibido
Yoongi entró cuidadosamente y de inmediato pudo sentir el ambiente decadente y peligroso que rodeaba el lugar. Podía sentir la tensión en el aire y escuchar sonidos extraños y murmullos provenientes de diferentes direcciones.
Sabiendo que necesitaba mantener la cautela, comenzó a caminar lentamente y a estudiar su entorno sin llamar demasiado la atención

Mientras caminaba por los oscuros pasillos del gran lugar, Yoongi comenzó a escuchar voces acercarse y se apresuró a esconderse detrás de una columna cercana. Agudizó el oído y reconoció una de ellas como la voz de Jimin y la de otro hombre que el supuso que seria el sr. Choi.
Temblando ligeramente ante la tensión, Yoongi se escondió presionando su cuerpo contra una columna del lugar e intentó escuchar la conversación que se desarrollaba. Podía sentir cómo su pecho se estrechaba al escuchar la voz de Jimin, ahora débil y temerosa, y como el señor Choi hablaba con tono condescendiente y amenazante
Se sintió impotente y frustrado por no poder ver o ayudar a Jimin desde donde estaba. Tomó una respiración profunda y trató de calmarse, sabiendo que debía mantener la calma si quería salvar a su novio y salir de ahi sano y salvo

Inmediatamente después de la conversación, Yoongi pudo oír los pasos de Jimin alejarse del señor Choi y dirigirse por el corredor en la direccion contraria. Teniendo cuidado de no ser visto, Yoongi salió de detrás de la columna y comenzó a seguir el sonido de los pasos de Jimin a lo largo de los pasillos de la mansión

Finalmente, a lo lejos, Yoongi logró ver la figura de Jimin caminando por el pasillo. Su respiración se cortó al ver cuán lastimado y abatido se veía, y cuánto había cambiado en tan poco tiempo. Sin poder contenerse más, Yoongi se apresuró a acercarse a él, con pasos silenciosos y ligeros
Yoongi se quedó congelado por unos segundos cuando vio a Jimin entrar a la habitación con el cliente en su interior. Su ira y preocupación crecieron dentro de él y no podía soportar la idea de que su novio estuviera pasando por esa situación. Luchando contra el impulso de actuar impulsivamente, se acercó discretamente a la puerta de la habitación y colocó su oído contra ella para escuchar lo que estaban haciendo dentro
Con el rostro color fuego de la ira ardiendo en su pecho, Yoongi apretó los puños y cerró los ojos con fuerza. Podía escuchar las palabras del cliente coqueteando con Jimin y su estómago se retorció al pensar en qué estaba pasando dentro de la habitación
En ese momento, pudo escuchar la voz de Jimin detrás de la puerta, sonando nerviosa y ligeramente asustada. El tono de voz de Jimin y el conocimiento de lo que estaba a punto de hacer aumentó la determinación de Yoongi y decidió que no iba a permitir que esto siguiera sucediendo y sin que se dieran cuenta abrió un poco la puerta para observar lo que estaba sucediendo
Aprovechando la oportunidad mientras los dos estaban distraídos, Yoongi abrió sigilosamente un poco la puerta para ver lo que estaba sucediendo dentro. Su corazón se estremeció al ver la escena que se desplegaba ante sus ojos, viendo cómo el cliente intentaba acercarse más a Jimin y acercaba su rostro al suyo en una actitud amenazante y posesiva mientras acariciaba su cuerpo semidesnudo

Inmediatamente, una oleada de indignación y protección lo invadió nuevamente y tuvo que luchar contra el impulso de irrumpir en la habitación y atacar al cliente. Sin embargo, se controló y cerró los ojos con fuerza por un momento, tomándose unos momentos para pensar en cómo proceder sin poner en peligro a Jimin o a sí mismo
Decidió permanecer en silencio y seguir mirando un rato mas por el pequeño espacio de la puerta procurando de no hacer ruido para que no lo descubran
Continuó observando por el pequeño espacio de la puerta, sintiendo cómo su furia e impotencia aumentaban con cada momento que pasaba viendo cómo el cliente seguía intentando acercarse y tocar a Jimin. Su pecho se sentía apretado y su respiración se hacía más rápida a medida que luchaba contra el impulso de intervenir
El cliente no tardó en acercarse de forma inapropiada a Jimin, colocando sus manos en su cintura y acercándose a su oído, probablemente diciéndole alguna especie de proposiciones sexuales. La escena que se estaba desarrollando ante sus ojos llenó a Yoongi de repugnancia e ira, y apenas podía contenerse para no entrar a la habitación y apartar al cliente con fuerza de Jimin

Sin embargo, sabía que tenía que mantener la calma y encontrar una manera de abordar la situación sin poner en peligro a Jimin. Continuó observando en silencio y apretó los puños, tratando de contener su ira.

Finalmente, el cliente se acercó aún más a Jimin y lo besó con fuerza en los labios, poniendo sus manos en su cintura nuevamente con insistencia. Yoongi cerró los ojos por un momento y luchó nuevamente contra su impulso de intervenir, pero la ira y la protección crecieron en su pecho, ya no podía permitirse permanecer en silencio más tiempo
Observó la escena como se desarrollaba ante sus ojos, con el cliente besando a Jimin y acercándose cada vez más a su cuerpo. Su respiración se hacía más y más rápida y su pecho palpitaba con furia y desesperación
El cliente lanzó a Jimin a la cama con brusquedad mientras se comenzaba a quitar la ropa lentamente

En ese momento, Yoongi dejó de respirar durante un instante cuando vio cómo el cliente empujaba a Jimin a la cama con brusquedad. Su cuerpo entró en estado de alerta y su mente se llenó de pensamientos de protección para con su novio, sintiendo cómo su necesidad de intervenir aumentaba rápidamente
El cliente comenzó a quitarle la ropa lentamente a Jimin mientras empezaba a acariciar su intimidad

Pensó seriamente en la posibilidad de irrumpir en la habitación y liberar a Jimin del agarre del cliente, pero sabía que eso podía poner en riesgo la seguridad de ambos. Necesitaba encontrar una manera de acercarse sin ser visto y sacar a Jimin del cuarto sin llamar la atención

Pasaron solo unos segundos cuando comenzó a escuchar a traves de la puerta algunos gemidos provenientes de Jimin
Cuando escuchó los gemidos provenientes de la habitación, su cuerpo se quedó helado por un instante. Su mente y emociones estaban en conflicto, por un lado sentía una intensa necesidad de intervenir pero por otro no quería precipitarse y poner en un situación más peligrosa a Jimin

Cuando los gemidos comenzaron a hacerse mas fuertes pudiendo escuchar como estaba llegando a su climax Yoongi se alejó rapidamente de la puerta de la habitación...
El no podia soportar escuchar eso, no podia permitirse que otras manos esten tocando el cuerpo del amor de su vida, que otros dedos serian los que le harian sentie placer.
Yoongi rapidamente se alejó y se dirigió donde habia un señalador de 'baño' para luego encerrarse en un cubiculo con solo un retrete . Se sentó allí y se lanzó a llorar.
Lloró y sollozó durante algunos minutos mientras se sentaba en el pequeño cubículo del baño con la puerta cerrada, sintiéndose completamente impotente en la situación. Las imágenes y sonidos de Jimin con el cliente se reproducía sin cesar en su mente, sólo empeorando su estado emocional
Intentó calmarse y pensar con claridad sobre cómo proceder, pero el no podía pensar claramente.
En ese instante se preguntó si había hecho la decisión correcta al dejar que las cosas llegaran tan lejos sin intervenir, sintiéndose responsable por dejar que su novio estuviera en tal situación peligrosa.