Mr. Loverman [yoonmin]

parte 42

Jimin cerró los ojos, mientras todo a su alrededor se volvía negro y la escena estaba suspendida en el tiempo. Las máquinas empezaron a sonar, llenando la habitación con sus agudos pitidos. En medio de esa confusión, Yoongi abrió lentamente los ojos, todavía confuso por la cirugía a la que había sido sometido y los efectos de los medicamentos que le administraron. Miró alrededor, intentando entender lo que pasaba pero todo lo que podía entender era que Jimin yacía inconsciente en la silla junto a su cama
Las enfermeras entraron apresuradamente a la habitación en respuesta a la llamada de Yoongi y encontraron a Jimin inconsciente. Lo sacaron rápidamente de la silla mientras una de las enfermeras tomaba su pulso y lo revisaba para determinar su estado actual.

Luego llamaron a los médicos para solicitar ayuda y realizar una evaluación médica de urgencia mientras Yoongi observaba todo con preocupación creciente en su rostro. A medida que las enfermeras revisaban a Jimin, Yoongi estaba ansioso por saber qué pasaba, sus dudas y temores aumentando con cada minuto que pasaba
Las enfermeras llevaron rápidamente a Jimin a una habitación y lo internaron, mientras Yoongi esperaba en su camilla con preocupación creciendo dentro de él. Pasó unos minutos sentado, intentando calmarse y controlar su estrés, pero cada segundo que pasaba lo angustiaba más

Las enfermeras luego de un rato entraron a la habitación de Yoongi y le informaron que se quede tranquilo que su pareja esta internado en el cuarto de al lado
*Yoongi escuchó las palabras de las enfermeras y suspiró con cierto alivio, aunque todavía estaba preocupado por la condición de Jimin. Agradeció el reporte de las enfermeras y decidió quedarse en su habitación por ahora, sabiendo que Jimin estaba cerca y recibiendo la atención médica que necesitaba
Luego ellas se fueron, dejando a Yoongi nuevamente solo en su habitación. Cerró los ojos y trató de relajarse, pero su preocupación por Jimin lo mantenía despierto. Pasó buena parte de la noche mirando fijamente el techo, ansioso mientras esperaba la mañana y noticias sobre el progreso de su novio

Finalmente, el amanecer llegó y las enfermeras temprano entraron a la habitación de Yoongi y le explicaron que Jimin se estaba recuperando lentamente pero que aún no había despertado.
La enfermera tambien le avisó que Jimin estaba en coma y que los médicos habian detectado sustancias en su sangre. Lo instaron a seguir manteniendo la calma y le dijeron que harían todo lo posible para ayudar a su esposo a despertar. Al escuchar las palabras de la enfermera, Yoongi se quedó impactado y sintió una profunda preocupación crecer dentro de él

El tiempo pasó y finalmente llegó la noche. Yoongi estaba agotado pero no podía dormir, pensando en Jimin y su estado actual. Pasó la noche en vela, manteniendo sus ojos abiertos y tratando de no desesperarse por la situación. Por mas que lo intentaba, las preocupaciones se acumulaban en su mente y se mantenían alerta, esperando noticias de su amado

Pasó otro día entero sin que hubiera progreso en el estado de Jimin. Los médicos estaban perplejos por la situación y buscaban desesperadamente respuestas, pero no lograban dar con una. Yoongi, a pesar de sus esfuerzos por mantenerse tranquilo, estaba cada vez más angustiado, su mente llena de preocupaciones y preguntas sin respuesta

Otro día pasó, y luego otro más, sin ningún progreso en el estado de Jimin. Las semanas pasaban lentamente, cada una más desesperante que la anterior. Yoongi pasaba las horas en vela, esperando y esperando, la preocupación y el estrés creciendo cada día. Los médicos estaban desconcertados y los tratamientos no parecían tener efecto, dejandolo impotente y desesperado
Luego de un mes sin ninguna mejoría, el corazón de Yoongi se volvió cada vez más pesado. Las constantes visitas y pruebas médicas le estaban recordando constantemente su incapacidad para ayudar a Jimin a despertar. Se sentía desesperado y frustrado, viendo a su esposo inerte en la cama y sin poder hacer nada más que esperar y orar por un milagro

Yoongi se sentó junto al lecho de Jimin, tomando su mano entre las suyas y mirando al amor de su vida con preocupación. Observó cómo Jimin respiraba suavemente a través del tubo conectado a su boca y sintió el latido tenue de su pulso bajo sus dedos
Pasó horas sentado junto a Jimin, acariciando su rostro con cuidado y manteniendo un suave contacto entre ellos. Cerró los ojos y oró en silencio, pidiendo desesperadamente a cualquier entidad superior que escuchara, que ayudara en la recuperación de Jimin y permitiera que despertara pronto de su estado actual
El tiempo pasaba lentamente, pero ni siquiera un suspiro salía de la boca de Jimin. Las enfermeras y médicos entraban y salían de la habitación, revisando el progreso de Yoongi y monitoreando la condición de Jimin, pero no había ningún cambio visible en su estado. Yoongi pasaba horas junto a Jimin, en silencio, manteniendo la esperanza y la fé que en algún momento Jimin despertaría

En las semanas que siguieron, las constantes pruebas médicas y tratamientos continuaron sin mostrar ningún signo de mejora en el estado de Jimin. A pesar de los esfuerzos y las pruebas desesperadas, Jimin seguía en estado de coma y sin respuesta a ningún estímulo externo. Yoongi se mantuvo a su lado y observó cómo pasaba el tiempo, con la esperanza disminuyendo cada día que pasaba...
A medida que el tiempo pasaba lentamente, Yoongi no podía evitar sentirse cada vez más desesperanzado. La angustia y el dolor eran más fuertes a medida que las esperanzas de un despertar de Jimin disminuían con cada nueva prueba sin resultado. A pesar de eso, él seguía fielmente junto a su esposo, manteniendo la mano entre las suyas y esperando un milagro que nunca llegaba...

La frustración y desesperanza llenaban el corazón de Yoongi, a pesar de que sabía que debía mantener la calma. Cada prueba fallida y cada tratamiento inútil le recordaban lo impotente que era frente a la condición de Jimin. A pesar de que trataba de mantenerse positivo, no podía evitar pensar en las posibilidades de que Jimin nunca despertara...