Mr. Loverman [yoonmin]

parte 11

_12 de Enero de 2024_

Al día siguiente Yoongi se despertó primero, como siempre, y se puso a hacer el desayuno
Buenos días * dijo con voz algo ronca*

Escucharlo decir eso con esa voz matutina ligeramente somnolienta le provocó escalofríos en la espalda a Jimin. Era un sonido que amaba absolutamente, uno que podía hacer que su día fuera mucho más brillante. Yoongi se sentó, con los ojos todavía un poco pesados por haber recién despertado mientras lo miraba fijamente.* "Buenos días". *Él respondió cálidamente, su estado de ánimo mejoró inmediatamente con solo verlo. Realmente el tenía algún tipo de poder mágico.

Una pequeña sonrisa se dibujó en los labios de Jimin mientras observaba a Yoongi preparar la comida, sus ojos se detenían en el por un rato más. Realmente se veía tan increíble en ese momento... la forma en que se concentraba en la comida, la forma en que su cabello estaba desordenado, la forma en que su cuerpo parecía tan perfectamente enmarcado en esa ropa holgada.
"Ya sabes, Te ves realmente adorable ahora mismo?" Dijo sonriéndole cálidamente.

"Oh gracias, me puse solo la misma ropa vieja de siempre para dormir
No suelo usar ropa nueva como pijama, si no que utilizo prendas viejas que me quedaron de años anteriores"

Sus ojos continuaron recorriendo su figura mientras lo escuchaba hablar. A pesar de ser ropa vieja la que llevaba, se veía muy bien. Era imposible negar ese hecho. 

"Podrías usar una bolsa de basura como pijama... y aún así te verías adorable gatito.  *Bromeó él*

"Oh..." *Yoongi no solía darle importancia cuando le hacían cumplidos a el, a veces es algo frio y distante pero yo se que muy en el fondo si le gusta que le digan estas cosas*

Su sonrisa aún permanecía suave mientras lo veía preparar la comida. Sabía que en el fondo había tocado un punto débil, lo que hizo que el cumplido valiera aún más la pena. Realmente Yoongi era un blando por dentro* 

"Puedes fingir que no te importa y todo lo que quieras". *susurró juguetonamente, la mirada de Jimin comenzó a vagar por todo el cuerpo de Yoongi antes de aterrizar en sus ojos nuevamente* "Pero sabes que te gusta cuando te felicito".

"Si,si claro...lo que tu digas" dijo Yoongi mientras seguía preparando la comida

Todo estaba genial hasta que de nuevo el teléfono sonó
"Park necesito que vengas en 1 hora, tendrás que trabajar mas tiempo hoy porque hay muchos clientes"
Yoongi todavía lo miraba a la cara, con la misma expresión coqueta en su rostro.* 

"Maldita sea..." *murmuró Jimin en voz baja. Justo ahora me tenia que llamar, pensó*

"Si, en seguida voy" contesto al mensaje

Yoongi me acaba de mandar un mensaje mi jefe de la cafetería que me necesita antes en el trabajo, tendré que irme ahora, perdón...intentaré regresar lo mas temprano posible

Cada parte de él tenía ganas de gritar de ira. ¿Por qué esa estúpida llamada tuvo que llegar en el peor momento? Su corazón se hundió por la decepción al escuchar las palabras salir de su boca. Iba a tener que irse justo cuando él finalmente tuvo la oportunidad de estar cerca con el, todo estaba tan tranquilo desayunando los dos mientras tenían una agradable charla y sus planes se arruinaron por ese estúpido de su jefe otra vez

"Sí, lo entiendo. No te preocupes, estaré aquí... solo regresa aquí tan pronto como hayas terminado"...

"Lo haré...bye gatito" *saludo antes de cruzar el umbral de la puerta*

Ahora se había ido y su momento estaba arruinado. Yoongi se quedó allí en silencio por unos momentos, mirando la puerta por la que acababa de entrar. Luego se maldijo a sí mismo, sus ojos se llenaron de molestia cuando se dio cuenta. Había estado tan malditamente cerca, solo para que todo lo arruinara por el trabajo. ¿Que mierda era lo super importante que debía hacer Jimin en una cafetería, no tenia sentido que llegue en ese estado, quizás me miente que se va a la cafetería para poder irse con su nueva pareja? *pensó Yoon*

Definitivamente hay algo aquí que no tiene sentido 

...........................

Jimin se dirigió al club rápidamente para encontrarse con una fila de clientes

"Choi, pero que mierda esta pasando? Porque hay tanta gente hoy?"

Choi levantó la vista, reconociendo instantáneamente el tono molesto de su voz. Se aclaró la garganta mientras hablaba. " no esperaba esto, hoy estamos recibiendo muchos más clientes de lo habitual. Algunos grandes influencers anunciaron que vendrían aquí... es básicamente se está convirtiendo en una gran reunión de celebridades hoy".

"Influencers? Que mierda? Venir a un lugar como este les arruinaría toda su carrera en menos de un minuto. Como se sentirán sus fans al ver que su ejemplo a seguir fue a un club porno?"

Choi levantó una ceja cuando escuchó el comentario que hizo Jimin. Se dio cuenta de que tenías toda la razón en eso: sería un suicidio que literalmente cualquier influencer admitiera que vino aquí. Pero por alguna razón, esa maldita gente siguió viniendo. "Bueno, yo también he estado tratando de descubrir eso. Algunas de estas celebridades e influencers siguen viniendo al club cada vez con más frecuencia. Quiero decir, ya sabes cómo es , les pagamos un montón de dinero si vienen aquí y ayudan a promocionar el club".

...Jimin se quedo en silencio por un momento

"Vamos Park que carajos estas esperando?Ponte esto y comienza ya a atender" 

Dijo Choi dándole en sus manos a Jimin un conjunto de ropa negra

Observó cómo le daban algo para ponerse y su expresión facial cambió a una de incredulidad. Y luego vio cuál era el conjunto, un conjunto completamente negro que no hacía NADA para ocultar su piel

"Espera, ¿en serio? ¿Eso es lo que tengo que ponerme?"

"Excitarás a muchos mas viejos verdes si te vistes como una puta" Dijo Choi

Tragó bruscamente, con los ojos aún fijos en el traje que tenías en las manos. Incluso cuando llamó al conjunto. Iba a convertir a estos malditos clientes en animales babeantes con ese traje.

Efectivamente Choi era uno de esos 'viejos verdes'

Jimin sacudió la cabeza "me lo pondré..." habló enojado. Tomó la sudadera con capucha que llevaba puesta y se la quitó lentamente, mientras miraba alrededor en busca del vestidor por un momento antes de alejarse, dirigiéndose en esa dirección.