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–¿Cómo un hijo? –preguntó consternado– pe-pero

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–¿Cómo un hijo? –preguntó consternado– pe-pero... Tú dijiste que yo le gustaba –dijo en un hilo de voz.

–Tus sentimientos por alguien van desapareciendo cuando pierdes contacto con cierta persona –el híbrido sintió un pinchazo en el corazón– es como con una amistad, pueden reír y hablar por horas, pero cuando se dejan de ver por un largo tiempo y pierden comunicación... Ambos conviven con otras personas que estén cerca y –se humedeció los labios– te olvidas de esa persona, a veces.. No siempre.

–¿Y por qué está vez si pasó así? –dijo con lágrimas amenazando con brotar de sus ojos.

–Porque... No puedes ignorar a Luzu y que él se enamoré de ese rechazo tuyo... No es posible, Quackity –dejó caer su peso sobre el respaldo de la silla.

–Entonces... ¿Debo sentirme culpable por no haberme dado cuenta de mis sentimientos por Luzu antes? –preguntó sintiendo una lagrima recorrer su mejilla derecha.

–No, Quackity –sacudió su cabello y luego soltó un suspiro, estaba cansado– No eliges de quien y mucho menos cuando enamorarte de alguien, solo pasa... En ese entonces, Luzu tenía un flechazo por ti pero tu estabas fechado por Rubius... Ahora es al revés, tú estás flechado por Luzu pero él estaba flechado por Willy... Pero Willy le corresponde –escuchó un sollozo del híbrido– no hiciste nada malo, Quackity, los sentimientos no duran para siempre, quizás no estas flechado por Luzu, solo... Quieres volver a tener su atención, es todo –intentó consolar pero no estaba sirviendo de nada.

–Fui hechizado... –declaró entre lagrimas.

–No, Quackity...–soltó una pequeña risita– No estamos en un cuento de hadas donde el amor parece un hechizo muy poderoso –sonrió enternecido por "la comparación" del azabache.

–Hace dos semanas... Estaba en el bosque, ataqué a una bruja pensando que era cualquier otro arbol y quería desquitarme porque Rubius no se tomaba en serio lo nuestro –sorbio su nariz– y me hechizó, todos los putos días me he convertido en un pato que solo dice "Cuack Cuack" y las noches... Me convierto en lo que realmente soy, un humano mitad pato con dos piernas y dos brazos, y unas alas pequeñas pero muy bonitas –agitó sus alas cuando las mencionó– Y el beso de una persona que yo ame y que me ame, romperá el hechizo –sollozó.

El ojiazul se quedó callado, era sorprendente lo que el azabache le había confesado, jamás había escuchado algo similar, realmente... No sabía que decir.

–Es muy egoísta de tu parte, Quackity –soltó derrepente el azabache.

El híbrido miró a su amigo y arqueó una ceja– ¿Egoísta? ¿Por qué egoísta? –preguntó extrañado.

–Solo quieres romper tu hechizo, es todo... No amas a Luzu, y como Rubius seguramente ya te rechazó, estas intentando recuperar la atención de ese hijo de los dioses e intentar romper el hechizo –frunció el ceño– Eso está mal, Quackity, Luzu ya tiene un compromiso con Willy y te agrade o no... Ambos se ven muy felices.

𝑸𝒖𝒂𝒄𝒌  ✿︎ℒ𝓊𝒸𝓀𝒾𝓉𝓎ت︎✿︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora