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Rubius se encontraba frente a su pizarra, mientras analizaba la libreta de Quackity, había escrito muchas cosas, aún le sorprendía que tuviera tan bonita letra, quizás el ser alcalde te daba poderes, el pequeño animalito llamó su atención con un p...

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Rubius se encontraba frente a su pizarra, mientras analizaba la libreta de Quackity, había escrito muchas cosas, aún le sorprendía que tuviera tan bonita letra, quizás el ser alcalde te daba poderes, el pequeño animalito llamó su atención con un pequeño estornudo, segundos después, sumergió su cabeza en el plato para poder seguir desayunando, el híbrido de oso arqueó una de sus cejas.

»Pero no te quita lo imbecil, lástima...«

Soltó un suspiro y continúo analizando los detalles anotados en la libreta, la cual, dejó sobre la pequeña mesa de cristal que había en el centro de la sala, tomó el borrador y eliminó los garabatos que el mexicano había realizado la noche anterior, escribió todos los materiales que necesitaría para decorar la plaza central de Karmaland, el festival duraba dos días, por lo tanto, el baile que Quackity había planeado, se llevaría a cabo para cerrar el festival. El timbre de su casa se escuchó y el pequeño pato fue el primero en dirigirse a la puerta principal, emocionado de poder encontrarse con Luzu, pero los fuertes graznidos del animalito extrañaron al híbrido de oso, quién dejó su marcador a un lado y caminó a la entrada de su casa, visualizando a un chico de mechón rubio.

Abrió la puerta y sonrió de manera automática– Pero que milagro, chaval –soltó una pequeña risita– No esperaba verte tan pronto –miro a todos los lados posibles– ¿Y tus invitados? –cuestionó curioso.

¿Podemos hablar? –preguntó serio.

El híbrido de oso ladeó un poco la cabeza y se encogió de hombros, abriendo un poco más la puerta, así dejandolo pasar.

Cuidado con el pato, no le gustan los extranjeros –cerró la puerta con una sonrisa.

El pequeño animal comenzó a soltar fuertes graznidos, logrando asustar al de mechón rubio, Rubius soltó una carcajada y decidió tomar al pato entre sus brazos para intentar controlar sus impulsos, aunque sabía perfectamente que no duraría por mucho, cuando de comportarse como un animal salvaje o de hacer alguna travesura, Quackity se las ingeniaba para salirse con la suya.

–¿Por qué Quackity y Luzu no están juntos? –preguntó serio.

¿Y por qué me lo preguntas? ¿Ya hablaste con Luzu? ¿Con Quackity? Ellos son los protagonistas, yo soy uno más en su historia –se encogió de hombros y tomó asiento en su sofá– No tengo nada que ver.

–Es mentira, tú eres el segundo al mando en ausencia de ese niño –se humedeció los labios con la punta de su lengua– En el pueblo te conocen como la "primera dama" –hizo comillas con sus dedos.

El híbrido de oso acarició el suave plumaje de su mejor amigo, y soltó una risita.

Es conveniencia ¿No lo recuerdas? –sonrió de forma arrogante– No te hagas el inocente, Auroncito –le guiñó un ojo– Es por ti que Luzu no ganó las elecciones hace seis años.

𝑸𝒖𝒂𝒄𝒌  ✿︎ℒ𝓊𝒸𝓀𝒾𝓉𝓎ت︎✿︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora