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Clase de biología, primera hora. El salón esta lleno de alegría debido a que el profesor aun no ha llegado a clase, todos hablan con sus amigos y no esperan nada especial para hoy. El coordinador de primaria entra al salón con un niño nuevo, su entrada fue elegante y cómica, seguramente atraería a muchas chicas, lastimosamente una de ellas seria yo durante el resto del año. Cabello castaño y un rostro definido, tez pálida y una gran sonrisa. Para terminar su presentación lanzo un beso con mucha seguridad a toda la clase, automáticamente todos me miraron a mi. Sus miradas penetrantes ya me decían que algo pasaría entre este inusual joven y yo.
Me hice su amiga con el paso de las semanas, y finalmente me confesé. - Ewww, realmente creías que me gustabas? Todo este tiempo gustaste de mi? Vaya asco, jamas me fijaría en alguien tan feo como tu - dijo el con cara de asco, es la primera vez que alguien me rechaza, y que haya sido de esta manera genero un sentimiento extraño en mi. Me obsesione con la idea de que el me diera su atención, pero el se junto con mala compañía y comenzaron a hacerme bullying en la escuela. (A pesar de todo, este joven me busco años mas tarde buscando tener sexo conmigo.)
Este fue mi primer intento se suicidio. Me coloque una correa alrededor del cuello y debido a mi pequeño tamaño me las apañe para colgarme de la manija de la puerta. Ahí, colgando, a minutos de morir...o eso fue lo que pensé, llorando, viendo que era tan inútil que ni el peso de mi cuerpo era suficiente para matarme, decidí quitarme la correa y mejor irme a dormir. (A partir de este momento, por ese movimiento, cada vez que tenia un problema me daban ganas de dormir, y ahí comenzó mi depresión)
Mis "amigas" en la escuela se divertían con decirme que el gustaba de mi cuando él realmente no lo hacia, como yo era tan ingenua, les creía y no me rendía por la idea de llamar su atención positivamente y acabar con el bullying.
Los problemas en la escuela y el abuso en casa por mi madre religiosa, la cual me golpeaba si no iba a la iglesia cada domingo (y soportar esas aburridas 4h de prédica bíblica) me llevaron a cometer varios intentos de suicidio y tener una mente suicida que me hacia querer saltar de un puente cada que lo veía, pero "no le di importancia" (y así tampoco lo hizo mi madre, que a pesar de yo ir al psicólogo desde temprana edad, siempre me tomaron a mi como una niña problemática, rebelde y agresiva, pero jamas se fijaron en los tratos de mi madre o el porque yo reaccionaba así).

Sombras de la vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora