Capítulo 41 - Consecuencias

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"¿Alguien grabó eso?"

Escupiendo la bebida que tenía en las manos, muchos se levantaron y se llevaron las manos a la cabeza al ver cómo las cosas se habían descontrolado hasta este punto.

Nunca antes había sucedido algo similar, lo más cercano a eso eran golpes ilegales que se realizaban para lastimar a rivales, pero lo que acababan de ver era algo mucho más lejano a lo ilegal, eso era un acto homicida.

"Dame los datos de ese chico, quiero saber por qué hizo eso antes de que desate mi enojo contra todos sus seres queridos." Frederick, con una serena expresión en sus ojos, estaba por levantarse e ir a revisar a su hijo cuando de repente vio como este mismo le reventaba la cabeza al chico que lo había golpeado.

"Parece que nuestro hijo no entrenó en vano, al menos respondió correctamente..." Elena se levantó del asiento y después de ver que los árbitros habían interferido en la pelea, ella caminó hacia la enfermería.

Las expresiones de ambos eran tranquilas, solo ellos podían percatarse que tan enojados estaban y lo peor de todo es como lo ocultan ante las demás personas.

"Por Dios, espero que Dash se encuentre bien..." Zac y Zoé inmediatamente siguieron a Elena para saber que tan grave era la herida en su frente, por la sangre no se podía sacar un juicio más allá de que le abrieron la frente, ya que cualquier herida en la cabeza tiende a sangrar mucho.

Después de ser testigos de esto, mucha gente en la multitud estaba ligeramente alarmada. Nunca hubieran esperado que alguien violara las reglas de esta manera tan brutal y lo más impactante es que el chico que había sido golpeado por sorpresa respondiera de una forma más violenta.

Todos aún podían sentir como los golpes que Dash le daba a Silva se escucharon en todo el lugar y como este seguía golpeando pese a la sangre que salía de forma descontrolada de la cabeza de ese chico.

"Ese chico, realmente se adapta a mis gustos... En algún momento puede que necesite buscar verdaderas peleas, así que sería bueno ponerme en contacto con él de alguna manera." El Sensei Santiago se emocionó al ver el carácter de Dash, por lo que una vaga idea se formó en su mente.

"Parece como si no le temiera a nada, ¿por qué llegar a estos extremos?" Murmuró Marcus a un lado de Santiago, quien miraba como Dash era retirado a la enfermería.

"Él no le teme a nada debido a que la pasión que siente al usar su cuerpo para ganar es más grande que la vida o la muerte, eso solo lo puedes obtener cuando no tienes miedo a perder cualquier cosa con tal de cumplir tus objetivos."

"A una edad corta es increíblemente habilidoso, mucho más que cualquiera que hayamos conocido."

"Sí, nada mal..."

Marcus miró a Santiago y le preguntó: "¿Él continuará peleando?"

"Obviamente, lo hará, nada podrá detenerlo luego de habernos culpado por lo que hizo Silva..." Santiago sonrió ligeramente al decir esto y se dio la vuelta.

"¡Descalifiquen a ese delincuente!"

"Dash Hale debe ser el ganador!"

"¡¿Qué diablos es lo que consideran tanto?!"

Daniel se había acercado al comité luego de ver lo que sucedió y dijo: "Debemos de descalificar a Silva, pero la gente no estará de acuerdo en ver que se descalifique a Dash luego de haberse defendido simplemente."

"¿Viste como dejó el rostro de ese chico?" Preguntó una mujer con el rostro ligeramente consternado.

Daniel movió las manos hacia un lado y dijo: "Se estaba defendiendo, si no detenía a Silva probablemente hubiera perdido un ojo, ¿qué más podemos considerar?"

"Daniel tiene razón, incluso si no descalificamos a Dash es probable que no pueda continuar con el combate, así que claramente no sería mala idea para nosotros dar esa opción."

"Sí, pero debemos de dejar la final masculina hasta que terminen las semifinales, falta un combate, así que veremos si podemos dejar la final masculina y hacer que la división femenina luche por el momento."

Daniel pensó que esto era comprensible, así que asintió y aprobó esa decisión para así mantener a todos bajo control. Era obvio que la forma en la que respondió Dash a la agresividad de Silva no estaba justificada, dejaron pasar eso, ya que era obvio que fue en defensa propia.

"Papá, ¿él podrá continuar luchando?" Sam al ver a su padre acercarse le pregunto con una ligera preocupación en su rostro al ver que muy probablemente todo el trabajo duro de una persona se viera afectada por otra.

Daniel acarició la cabeza de su hija y dijo: "Yo cuando luché de joven fui herido de forma similar, muchos creían que no podía continuar, pero aun así me levanté y gané el torneo. Sin embargo, una herida abierta en la frente es mucho más delicada que una herida en la pierna. En este caso, creo que sería mejor que Dash no continúe peleando."

"Qué lástima..."

...

En la enfermería Dash había recibido tratamiento médico, su abertura en la frente no necesitaba de puntada para cerrarla, lo que le pusieron eran pequeñas curitas de cinta médica y después de algunas cuantas dejó de sangrar.

"No se ve tan mal como parecía, pero aun así debes considerar si vale la pena." Devon quería decir más, pero no quería ser quien detuviera la elección de Dash sobre si continuar o no luchando.

En ese momento, Frederick y Elena entraron a la enfermería seguida de los padres de Devon quienes también estaban muy preocupados por este desastroso suceso.

"¿Cómo te sientes hijo?"

Dash observó a la multitud y luego de mirar su hijo rojo, ligeramente hinchado y con cinta Medina sobre la apertura, dijo: "Estoy bien, fue una pequeña apertura, así que no hay nada de que preocuparse."

"Mmm, tienes razón en eso, pero considero mejor que no continúes compitiendo." Elena no quería ver más sangrar a su hijo, no quería volver a ver esa escena una vez más.

Pero Frederick a su lado no tenía la misma idea, él miró a su hijo y le preguntó: "¿Quieres seguir compitiendo?"

"¡Frederick!"

Al ignorar a su esposa, Frederick miró la expresión de su hijo, que no parecía a la de un niño que tuviera miedo o de que se hubiera rendido, y dijo: "Toma la decisión por tu cuenta, nosotros te apoyaremos. Solo recuerda, si peleas no debes mostrarle una vez más al enemigo la espalda."

"Estaremos en la multitud esperando tu decisión, recuerda que no hay nadie quien pueda detener lo que quieras hacer."

Los padres de Devon conocían a la familia Hale por palabras de su hija y como estos, más allá de la protección a su hijo, lo que hacían era prepararlo, no eran nadie para criticar la educación de alguien más, pero si fueran ellos se habrían negado rotundamente a que su hija continuará peleando.

Al salir de la habitación, Elena miró a su esposo y dijo: "¿No estaba furioso?"

"¿Viste esa expresión de nuestro hijo? Puede que nuestra educación haya afectado mucho la forma en la que afronta los problemas, pero la manera en la que se despierta su hambre de ganar es peleando y si lo detengo ahora puede que eso lo marque para siempre, ¿no fue lo mismo que sucedió contigo de joven?"

Elena frunció el ceño, odiaba admitirlo, pero Frederick tenía razón, así que dijo: "Pero supongo que eso no será algo que nos detenga para llegar al fondo de la verdad, ¿cierto?"

"Oh, por supuesto que no, si es necesario le romperé los huesos a ese Sensei quien parece tener hambre de ganar... Pero es una lástima que haya ignorado la forma y por quien tuvo que pasar para lograrlo." La expresión de Frederick era similar a la de Dash cuando estaba golpeando a Silva con intención de hacer daño.

Como padre, no permitirá que su hijo sufra a manos de idiotas que quieran detenerlo. Si los enemigos no los puede resolver, él solo, como padre, es su trabajo hacerlo.

"Vamos a visitar a ese joven."

Cobra Kai: El guerrero DragonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora