X

99 3 2
                                    

Pasaron unos días y el pelinegro no dejaba de pensar en Sanemi, todo lo que había pasado en la aldea en esa habitación de renta

Ya habían pasado unos dos días pero aún le seguía doliendo la espalda, quería hablar con el mayor pero recientemente lo volvieron a mandar a una misión lejana y no podría hacerlo hasta que volviera

Estaba hundido en sus pensamientos mientras permanecía sentado en el cuarto semi vacío de su finca, todo el lugar era pacífico y sin ruido

Empezaba a quedarse dormido mientras navegaba en su mente hasta que escucho que le tocaron la puerta

Le daba fatiga abrir, la verdad se sentía muy agusto en su soledad pero no quería ser maleducado y hablo un tono bajo
—Pase...—

La puerta se abrió con lentitud y volteo para ver quien era, la visita no era a quien esperaba —Iguro?.. ¿Qué haces aquí?..— pregunto confundido, nunca espero verlo en su finca

Obanai solo se pasó y cerro la puerta, se acercó a paso lento a Tomioka mientras se sentaba enfrente de el —Solo quería hablar un poco contigo...— finalmente respondió con frialdad

—…¿Y de que exactamente?..— cuestiono mientras lo miraba, se notaba incómodo por la poca distancia que había entre ambos pilares

El de las mechas cortas también lo observo, noto que no le gustaba la cercanía pero fijio demencia—Solo me preguntaba si estabas bien..—

La pregunta asombro a Giyu y sentía que algo no estaba bien, el pilar de la serpiente jamás le había preguntado eso, de echo pensaba que no le importaba ni poquito

—Si, lo estoy.. gracias por preguntar — contesto con un tono serio mientras miraba hacia abajo, no sabía cómo decirle que se alejara un poco

—¿Crees que pueda quedarme contigo un rato?— pidió el heterocromático mientras tomaba las manos del portador del agua

Tomioka sintió un extraño sentimiento cuando lo tocó, ¿Por qué el se estaba comportando así? ¿Era por qué quería algo de el?

Se quedó pensando un rato y asintió sin saber si realmente quería ser acompañado ese día

Iguro puso a kaburamaru sobre el cuello de Giyu mientras estaba concentrado en su propio mundo. El de la coleta se sobresalto cuando sintió la serpiente rodear su cuello, no parecía que iba a lastimarlo pero se sentía raro

Nunca había tenido esa sensación pero no se movía, no supo cómo reaccionar y tener algo en su cuello lo ponía tenso —¿Por qué?...—

El de las mechas cortas se rio un poco y lo miro — Quería que conocieras a mi serpiente, ¿No quieres?—

—No es eso... Pero se siente tan extraño...—
Aclaro mientras Obanai le retiraba a kaburamaru y la volvia a acomodar en su cuello

—No quería incomodarte — comento mientras empezaba a jugar con las manos del contrario, empezó a acariciar sus palmas con sus dedos de una forma

El tacto era suave e hizo estremecer al de ojos azules. Las manos del otro pilar no eran ásperas como las de Shinazuguwa pero aún así sentía nervios

Ninguno decía nada y el Omega solo miraba como jugaban con sus manos sin saber si poner alto a la situación

De pronto, Tomioka sintió como Obanai lo jalo de las manos para levantarlo y por mero instinto se puso de pie mientras lo miraba con gran confusión

El Beta se quedó agarrado solo a una de sus manos y se lo empezó a llevar afuera de la finca. El pilar del agua no sabía cómo decir que no y se dejó guiar por la pena que le daba decirle algo

Fue llevado por Iguro hasta un bosque no muy lejos de la sede, el lugar estaba muy tranquilo y callado pero su ambiente no era incómodo

—¿Por qué me trajiste aquí?— pregunto Giyu mientras miraba todo su alrededor, aún sentía que todo era una trampa

El heterocromático puso sus manos sobre los hombros del contrario y hablo —Queria que estuviéramos en un lugar más tranquilo para hablar contigo— respondió mientras lo masajeaba un poco

El menor no pudo evitar estremecerse cuando tocaba de esa forma sus hombros, iba a decir algo pero sintió como alguien lo jalo lejos de el pilar de la serpiente y lo puso contra un árbol

Levantó la vista para ver a Sanemi, ya había llegado de su misión y se veía molesto —¿¡Qué mierda haces con el!?— reclamo con violencia mientras lo presiono con más fuerza contra el tronco

—¿¡Por qué estabas así con ese imbécil!? ¡Entiende que eres mío y de nadie más!— se quejo mientras apretaba más su cuerpo

El más bajo se llenó de escalofrío y hablo con un poco de miedo —N-No es lo que piensas... El empezó... te lo juro..— se justifico con un poco de temor

Shinazuguwa lo soltó y se dirigío a el portador de la serpiente, quien no tardo en gritar —¡¿QUIEN TE CREES QUE ERES PARA TRATARLO ASI?!— hablaba con rabia mientras tenía el ceño fruncido

—¿¡Más bien tu que te crees para poner tus putas manos en dónde no te pertenece!?








Un Amor Complejo °Saneobagiyu° ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora