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Capítulo Veinte
Vainilla

Los jardines de la Academia Shinhwa se pintaron de un color verde brillante; las sombras, proyectadas en la fachada del edificio principal y en el adoquín, eran un refugio perfecto para todo aquel que buscara refrescarse o resguardarse del sol de verano.

Las flores de cerezo se habían despedido hacía pocos días, dejando tras de sí un agradable perfume y una suave caricia que dieron lugar a la melodía de las cigarras y al tan esperado periodo vacacional. Los pasillos, los laboratorios, las aulas de clase, cada rincón de Shinhwa parecía guardar una última conversación, algo que no se volvería a ver hasta finales del verano, poco antes de que las hojas se vistan con los colores del otoño y el aroma dulzón del chocolate caliente inunde la cafetería de la escuela.

Sin embargo, hay un lugar en la Academia que aún no se despide, un lugar cuyas elegantes paredes y libreros aún presencian algo que bien podría formar parte de una novela romántica (aunque no sería la primera, mucho menos la última vez, que sus pasillos son testigos de ello). HyungWon se había ofrecido a ayudarle a la señora Choi, la bibliotecaria, a terminar de organizar los últimos ejemplares para que todo estuviera en orden antes de poder disfrutar del verano. Por supuesto que no era el único, naturalmente el nieto de la señora Choi, SooBin, también la ayudaba como de costumbre; los ojos de la mujer brillaron al ver que su nieto venía acompañado de otro jovencito que HyungWon desconocía. Se presentó como Choi YeonJun, y HyungWon se preguntó si los ojos de la señora Choi habrían brillado porque ahora tenía a más personas ayudándole o por el hecho de que las mejillas de su nieto se teñían cada que YeonJun lo miraba.

HyungWon acomodaba algunos libros en la sección de física cuando escuchó como la señora Choi conversaba con alguien en el vestíbulo. Curioso, HyungWon apenas se asomó para ver de quién se trataba, y cuando aquella mirada se cruzó con la suya HyungWon pudo sentir cómo el corazón le daba un brinco. ¿Qué hacía HoSeok ahí? ¿No debió de haberse ido a casa al terminar las clases? Por lo que HyungWon sabía, HoSeok no formaba parte de algún club de manera oficial (algo poco común para alguien de segundo año), entonces, ¿por qué seguía en la Academia?

Boo —HyungWon se giró para verlo, con su sonrisa tan linda y el cabello ligeramente despeinado, el timbre de su voz era tan reconfortante—, te encontré, Wonnie.

—HoSeok —dijo en un suspiro—, ¿qué estás haciendo aquí? Creí que ya te habrías ido a casa. N-no es porque no me guste que estés aquí, a-al contrario, me-me gusta mucho cuando estás cerca, e-es lindo tenerte cerca y...

HoSeok lo miró con ternura y, con cuidado, levantó la barbilla de HyungWon para frotar su nariz en un adorable beso esquimal que encendió las mejillas del menor. HyungWon bajó la mirada, intentando ocultar su repentina sonrisa.

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⏰ Última actualización: May 29 ⏰

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