Sus Labios Y Los Mios

Estoy grande (ahora sí)

Subo al sofa para aventarme contra la chica, se cae y se queda dormida.

-¿Está viva?
-Tom, creo que la mataste- me dicen Mateo y Navill a la vez

Ayudo a Mateo a levantarse, Navil está feliz de la vida en las piernas de la blanca.

-Esperame aqui- le digo a Mateo.

Entro a la cocina y escucho la voz de mi hermano, está dentro del refri.

-Si... Tu descuida vente en la noche- no, estúpido - se ríe y cierra la puerta.

-¡Ah!, renacuajo eres tu- lo miro lo más mal que puedo, con los brazos cruzados y alzada la cabeza, mi hermano es muy alto.

-De- deja de mirarme así niño, ¿Eh? A no, no hablaba de ti... Si, si , escúchame, parliamo più tardi- me acerco a el y retrocede.

-¿Que?

-¿Quienes son esas y porque están en mi casa?- abre lo ojos y rie un poco.

-Son de un amigo...- nos quedamos mirando y él se pone cada vez más nervioso, sonrio.

-¿Quieres?- son fresas, asiento y me acerca el botecito, como lentamente una fresa, disfruto de su rostro, es tierno.

-Te pareces a Mateo.

-¿Que? Ah ¿Tu noviecito?- salto un poco hacia atrás, él sonríe.

-Nose de que hablas. Saca a esas pobres chicas drogadas de aqui y no le diré a nuestra madre.

Voy con Mateo y me pregunto.

-¿Quien mierda eres tu?- un chico que mi madre catagolaria como asesino de perritos tiene cargada como costal de papas a la chica dormida, también toda la atencion de Maty.

-Guau, ¿Que edad tienes niño?

-¡Fran!- mi hermano dice y mira a la chica dormida.

-¿Que le paso?

-Uhm, nose, estaba así cuando llegue- sonríe y Mateo suspira, ruedo los ojos.

-Estoy lo suficientemente grande para decirte que te vallas a la mierda.

-Tomas- Antonio me da un golpe en la cabeza, ¿Porque todos me están golpeando en la cabeza hoy?

-Quitese, y tú también Fran- Fran, sigue sonriendo, aprieto mis puños, quiero golpearlo.

-¿Quien te crio niño?

-¿Quien te crio a ti?- se ríe. -Me agrada tu hermano, ¿Porque no me lo presentaste antes a- Antonio?- Mateo no deja de míralo con la boca abierta, tengo tantos deseos no muy bonitos en este instante.

-Mateo, deja de miralo- me mira rojito, sonriendo un poco.

-Lo siento- me susurra caminado hacia mi. Le sonrio y abrazo dejando un beso en su cachete.

-Te dije, mi hermanito es rarito.

-¿Crees que es raro porque...?

-Callense y llevense a esas pobres chicas.- Fran hace como soldado, Mateo rie de una manera tan bella que se me olvidó que estaba enojado.

-Vamos Antonio, llevaste a la que está con el pervertido y yo esas dos. - mi hermano asiente y pregunta.

-¿A mi cuarto?

-No tienes cuarto- interrumpo.

-Si, si tengo- me saca la lengua y hago lo mismo.

-Pendejo-susurro, recargo mi cabeza en el hombro de Mati.

-Estas diciendo muchas maldiciones últimamente...

-Culpa de los chicos grandes- levanto mi cabeza, sus ojos están chicos, sus manos calientitas en mis mejillas. Suspiro, sonrio acercando nuestras narices.

-Y-yo, Tomás.

-¿Si?- me mira asustado, me preocupa eso.

-¿Estás bien?- niega. -¿Estas ma-mal?- me separo de el.

-¿Te duele algo? ¿Estás enfermo?- niega.

-¿Entonces? Mati, no me asustes.

Escucho que dice algo, sus dedos en su playera amarilla, me mira con lágrimas en los ojos.

-Mati...- se acerca tomando mis mejillas y mis labios a los suyos.

Chan chan chan!! Jajajaj ay :'v wevon está mierda la tenía planeada diferente Pero me encantó el resultado, jsjsjs espero que igual a ustedes quienes lean esto.