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- Además, aún fuera el fin del mundo o me pagaran millones de wones —suspiré con pesadez— sería el último idiota a quien amaría.
Wosport: Ya veo cuánto lo odias.
- Su carácter es una mierda —dije antes de empezar la partida—.
Casi una hora estuve hablando mal del pelinegro pues hablar con Wosport era agradable y podía desahogarme, ya que no me juzgaría mucho menos sabe quién soy realmente.
- Basta de hablar de él —hice una mueca—.
Wosport: ¿Y cuál es su apellido? —preguntó—.
- Jeon —dije sin tomarle importancia—.
Wosport: Ah —emitió un sonido para ya no volver a hablar—.
- A todo esto —hice una ligera pausa— ¿de qué parte de Corea eres?
Wosport: Cuanto interés —rio— ¿será que ya te enamoraste?
- ¿Qué dices? —reí— atrás de ti Wosport, ¿tan mal te tengo que no puedes concentrarte?
Wosport: Sueñas mucho, Queen of game. Seúl, vivo en Seúl.
- ¿En serio? —respondí asombrada— también vivo en Seúl.
Wosport: ¿Será el destino? —bromeó— deberíamos salir un día y así conocer a la chica loca con quién juego día y noche.
- ¿Quién me garantiza que no eres un asesino o algo por el estilo? —respondí riendo—.
Wosport: Ya no me dieron ganas de conocerte. Concéntrate mejor.
-Claro —reí—.
...
Intak: Y un café frío, por favor.
Keeho: Esta niña ya nos dejó por su amiguito virtual —rodó sus ojos—.
Minghao: Día y noche se la vive pegada a su computadora y celular por si aquel chico le manda mensaje.
Dino: ¿No que morías por Mingyu y Jeonghan? —cuestionó—.
- ¿Qué dices, Dino? —dije nerviosa—.
Minghao: Eso quedó en el pasado, ahora sólo vive y muere por ese chico que ni conoce.
- Eso no es cierto, Ghao —golpeé su hombro—.
Minghao: ¿Ah, no? —enarcó una ceja y negué— entonces, ¿has hablado con Mingyu?.
- No, ¿para qué?
Mnghao: ¿Has pensado qué estará haciendo Jeonghan? ¿Se estará viendo con otra chica en este instante? —sonrió de lado—.
