Just a Man (NTR)

La Paz Antes de la Tormenta

En aquel tiempo, transcurría el mes de mayo. En Tokyo, las temperaturas alcanzaban a veces hasta los 30°, por lo que la mayoría de hogares tenía a su disposición un aire acondicionado.

- Que calor... -

Debido a esto, muchos japoneses deciden abandonar sus hogares o trabajos, también debido a otros factores externos.

- Me duele la cabeza... -

En 1960, la población rural en Okutama era de aproximadamente 13.000 habitantes, sin embargo en la actualidad el número bajo brutalmente a tan sólo unas 5.200 aproximadamente.

- Quiero vomitar... -

Eso dejo varios lugares abandonados en esa zona, uno de ellos era un viejo hangar en donde anteriormente se practicaba la carrera de aviación, sin embargo debido a la falta de población la encargada de mantener ese hangar se quedo sin personal, por lo que recurrieron a venderla al mejor postor, la cual la termino abandonando.

- ¿Estoy...de cabeza? -

Finalmente, la naturaleza se apropio de esta zona, dejando pastizal por todos lados, oxidando las placas de metal que recubrian el hangar.

- ¿O estoy girando?... -

Sin embargo, si echabas un vistazo de cerca, se podía apreciar una escena digna de una película de Jigsaw...un hombre joven de tez oscura, labios carnosos y cuerpo bastante bien construido se encontraba girando en un especie de aro de metal.

El joven abrió los ojos perplejo, ¿cuando fue que se metió ahí?, o más bien, ¿quién lo metió ahí?, lo último que recordaba era como caía del techo de un apartamento por culpa de...

- ¿Despertaste?... - otro joven, este era del mismo tamaño que el de piel oscura, una contextura similar, sin embargo, se notaba más ligero, un cuerpo atlético y no tan robusto - para este punto pensaba que estabas muerto Kokujin -

El joven afroamericano identificado ahora como Kokujin trago saliva, reconocía esa voz.

- Maldito infeliz, ¡¡¡sueltame ahora mismo!!! -

- ¿o que?, ¿vas a pegarme y a pisotearme la cabeza como lo hiciste con mi hermano? -

- ¿Tu eres el hermano de ese mocoso?...tch...debi haberlo sabido, es imposible que una mujer tan deliciosa como ella no haya tenido una buena genética - Kokujin río con sorna pero su risa fue intercambiada con un grito de dolor, el chico lo había golpeado en sus partes nobles con un tubo de metal

- No hables de mi madre así maldito bastardo - El chico se mostró, iluminado por un rayo de luz que se asomaba por uno de los agujeros del hangar

Era un chico de piel clara, cabello castaño largo, amarrado en una cola de caballo, también tenía rasgos finos, como una mandíbula marcada y una nariz mediana. Sus ojos eran negros, grandes pero afilados, su mirada no mostraba nada más que odio hacia el chico de tez oscura.

El castaño siguió golpeando a Kokujin en sus partes hasta que este vomito, y debido a que se encontraba de cabeza en ese momento su vomito le cubrió los ojos y le mojo el pelo, dándole un aspecto terrible.

- ¡¡¡Hijo de puta!!! -

- Oh pero mira ese estado, ¡¡¡pa las historias!!! - el castaño saco su celular y comenzó a tomar fotos frenéticamente desde todos los ángulos posibles

- ¡¿Qué es lo que quieres!? -

- ¿Que qué es lo que quiero?...hmmm....Ah ya se... - el tipo se acerco peligrosamente a Kokujin tocando su nariz con el tubo de metal - matarte por supuesto... -