Melancolía

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Jetziel regresó a la casa de Angie, La peli azul lo había llamado para que fuera, y esperaba que fuera importante, porque había tenido que dejar a su hermana para lo que sea que la chica quería.

-La joven Velasco salió un momento - Le dijo el mayordomo cuando entró a la casa.

Jetziel rodó los ojos con fastidio, ahora aquella niña lo hacía esperar.

-¿Desea esperarlo en la sala? - Ofreció el hombre.

-Si no tengo otra opción... - Masculló.

Caminó por sí mismo hasta la sala de estar, con intención de sentarse en el que se había convertido en su sillón favorito, individual pero amplio, y con una agradable vista al patio trasero.

Pero alzó las cejas cuando notó una cabellera pelinegra sobre el respaldo.

Alzó las cejas, ofendido, rodeó el sillón para ver el rostro de una chica joven y de rasgos muy atractivos, que alzó su mirada de ojos claros de su celular hacia el rostro de Jetziel.

El de rulos hizo una mueca con los labios al sentir el olor de aquella tipa.

-¿Pasa algo?- Preguntó Brisa, en tono normal, casi desafiante.

Jetziel chasqueo su lengua, más que ofendido.

-¿Cómo te llamas, niña?

-Soy Brisa Domínguez - Respondió con desinterés.- ¿Debería conocerte?

-En realidad no, pero ya que estamos - Se llevó una mano al pecho -, Jetziel López.

-Oh, sí, el que dio el discurso motivador con Angie hace unos días.

-El mismo.

Brisa asintió una vez, y volvió a mirar su celular.

Jetziel permaneció de pie unos segundos, al notar que la otra no tenía intención de levantarse, suspiró, sentándose el el sillón más amplio, acomodando los pies sobre el mismo.

Entre la peli azul que lo había llamado para luego irse, y aquella pelinegra en su lugar favorito, ya habían logrado ponerlo de mal humor.

Pasaron más de diez minutos hasta que Angie llegó, pero apenas un minuto antes de que el auto entrara a la propiedad, la beta se levantó y salió de la sala, ganándose una mirada extraña por parte de Jetziel.

Cuando la alfa apareció en el umbral notó el humor del azabache al haberlo hecho esperar, y tragó duro.

-¿Qué querías?

Angie se apresuró a sentarse cerca de él, recordándole lo que le había dicho de comentar el estado de la omega y el de su hermana, con lo que Jetziel pareció relajarse un poco.

Ambas coincidían con la fiebre, el cuerpo frío, dolor muscular, y un estado somnoliento, letárgico, constante.

Y el fuerte olor a tristeza, que hacía sentir bastante mal a los demás.

Aunque parecía que Rai estaba más afectada, porque no tenía apetito, y pasaba todo el día en cama, caminando poco y con dificultad, a diferencia de Alondra, que parecía más activa.

Jetziel hizo una mueca al escuchar que la omega estaba tan mal, y por un momento se sintió agradecida por el estado de Alondra.

Angie le comentó que un médico estaba revisando a la pelirroja, con lo que Jetziel finalizó con que había dejado a Alondra a cargo de unas raritas.

Antes de seguir hablando, el mayordomo de Angie le aviso que el doctor debía hablar con ella acerca de Rainelis Rosario.

Y de nuevo, Jetziel fue dejado solo en la sala, aunque al cabo de un minuto, la chica de cabello negro volvió a aparecer, sentándose de nuevo donde estaba antes, mirando su celular al caminar.

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⏰ Última actualización: Jun 04 ⏰

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