Squonge

No eres un fracaso

Era un nuevo día en el crustáceo cascarudo. Calamardo estaba en la caja registradora, amargado como todos los días, y Bob estaba limpiando las mesas feliz... como siempre, aunque no había tantos clientes.

-Mmm oye calamardo-

-¿Qué quieres Bob Esponja?-

-¿No te parece extraño que no vengan tantos cliente un lunes por la mañana?-

-No-

Ambos escucharon una gran multitud afuera del crustáceo.

-Oh, no...-

-Wow, una multitud, algo genial debe haber pasado-

Bob emocionado fue a ver qué pasaba mientras Calamarodo intentaba esconderse con una de sus revistas.
Calamarino entró al lugar con una gran multitud a su alrededor.

-Gracias, gracias amigos- Calamarino vio a Calamardo que intentaba esconderse y fue directo hacia él -Oh vaya, que sorpresa que sigas aquí Calamardito-

Calamardo dio un gran suspiro y dejó su revista a un lado para mirar a Calamarino.

-¿Qué es lo que quieres?-

-Oh nada, solo quería comer algo antes de mi gran exposición de arte-

Calamardo empezó a enfadarse e intentó mantener la calma.

-En ese caso no entiendo por qué viene aquí alguien que se supone que tiene éxito-

Ambos comenzaron con una pequeña pelea, siempre tratando de humillar al otro de manera indirecta hasta que Calamarino dijo algo más delicado.

-¡Al menos mi familia no me considera un fracaso!-

Ese comentario afectó demasiado a Calamardo, no sólo haciéndolo enojar sino también llevándolo al borde del llanto.

-Bueno yo... al menos yo...-

Calamardo simplemente no supo qué decir hasta que Bob se metio a la dicucion.

-¡Él no es un fracaso!-

Todos se giraron para mirarlo, incluido Calamarino.

-Te recuerdo eras ese camarero torpe del supuesto restaurante cinco estrellas-

-Sí lo soy y de todos modos Calamardo no es un fracaso, logró todo eso en menos de un día-

Bob molesto se paró entre los dos dándole más espacio a Calamardo.

-Pero no supo mantener el éxito, ese es otro de sus fracasos-

-Sí, bueno... al menos tiene talento, no como tú que solo presumes y nunca te he visto hacer nada-

Esto enfureció a Calamarino y comenzó a meterse en cosas más personales acerca de Calamardo comenzando una discusión con Bob Esponja en un momento, Calamardo corrió a la cocina porque no podía soportarlo más preocupándo a Bob.

-¡Calamardo espera!-

-Jajaja creo que Calamardito no puede aguantar nada-

Calamarino se echó a reír, molestando a Bob quien le arrojó su espátula.

-¡Ay, oye!-

-Cállate, sólo cállate-

Bob corrió a la cocina para buscar a Calamardo. Al entrar, vio a Calamardo en una de las esquinas e inmediatamente bloqueó como pudo la ventana donde entrega las cangreburgers.

-Calamardo-

-¡¿Qué quieres Bob!?-

-Solo quería ver como estabas-

-¡Estoy bien, déjame en paz!-

Bob lo ignoró y fue hacia él, sentándose a su lado.

-Calamardo cálmate estoy aquí para ti-

Calamardo lo abrazó y comenzó a llorar por primera vez sintió que podía llorar sin ser juzgado.

-Tranquilo Calamardo, todo está bien, ese tonto no sabe de lo que habla, eres genial-

-No lo soy, el tiene razón, soy un fracaso-

-¡No lo eres!- Bob miró a Calamardo y lo tomó de los hombros -Eres alguien genial y eres mi mejor amigo y como amigo no me gusta que pienses así de ti mismo-

-Bob pero...-

-Nada de peros, se que bromeo mucho y me encanta jugar, pero lo digo en serio-

-Bob... eres un chico extraño-

-Lo se-

Bob volvió a abrazarlo para luego levantarse.

-Iré con Don Cangrejo, tu tomate tu tiempo-

Bob se fue y no pasó mucho tiempo para que Calamardo escuchara algunos quejidos y reclamos de afuera y que Bob regresara.

-Calamarino ya se fue y Don Cangrejo dijo que podías tomarte un tiempo pero que te quitaría el descanso-

-No puedo dejarte con todo el trabajo y perder mi descanso-

Calamardo se levantó e intentó irse pero Bob lo detuvo.

-No no, quédate aquí, yo puedo manejar esto-

Calamardo estuvo a punto de renegar pero bueno, este era prácticamente un día semi libre y al final no se quejó.