el joven doncel, Rodrigo carrera hace todo lo posible para ayudar a su padre, aunque eso implique quedarse en el castillo de una furiosa bestia con ojos intimidantes
*Aclaraciones*
* está historia está creada a fines de diversión y aburrimiento no...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
las siguientes 4 semanas después de volver rodrigo estuvo acostumbrándose al ritmo de ser el nuevo rey consorte y encargarse de muchas cosas del reino, aunque a el lo que mas le encantaba es estar por el pueblo, ayudando a los adultos mayores y leyendo a los niños de la escuela y del orfanato, era una rutina que se acostumbro tanto y que los del pueblo se acostumbraron que les era raro cuando el rey consorte no estaba, aunque eso claro que nunca pasaba ya que rodrigo era de mucha energía. hasta este momento.
rodrigo últimamente se sentía muy cansado cuando caminaba demasiado incluso se acaloraba mucho haciendo que algunos del pueblo tengan que meterlo a sus viviendas para que descansara y tomara agua. rodrigo no sabia que tenia porque según el comía bien y descansaba correctamente, no le tomo mucha importancia cuando volvió al castillo, caminando por los pasillos hasta encontrarse con su pareja hablando con Germán y Josh de unas cosas, iba a irse para descansar y ducharse un poco hasta que sintió un fuerte mareo haciendo que se recargara en un pilar del castillo.
— cariño? - ivan se acerca preocupado hacia su esposo al verlo recargarse en el pilar. — que ocurre? estas bien?
— si solo....me maree, es todo cariño no te preocupes.. - sonríe mirando a su esposo, trata de irse para su habitación hasta que siente nuevamente ese mareo, hubiera caído al suelo si no fuera por su esposo que lo tomo rápidamente de la cintura.
— no estas bien para nada, Josh llama rápidamente al doctor del castillo necesito que revise a rodrigo. - el azabache carga con cuidado a su esposo.
— cariño enserio estoy bien...no es nada solo un mareo. - suspira rodrigo sintiéndose relajado en los brazos de su esposo.
— necesito que te revise...
— descuide alteza llamare al medico rápidamente. - el azabache mas bajo hace una reverencia y se va rápidamente junto con Germán para ir por el medico mientras el rey caminaba hacia su habitación para dejar descansando a su pareja.
— estoy bien, no se que me paso seguro fue el mareo por la deshidratación, no es nada por lo que debemos preocuparnos...
— aun así quiero estar seguro mi amor, quiero saber por mi cuenta que estarás bien. - besa la frente de su esposo mientras caminaba hacia su habitación.
rodrigo suspira sabiendo que no cambiaria la decisión de su esposo así que se recarga en su pecho para esperar. el doctor no tardo mucho para llegar junto con ambos consejeros, ivan dejo que el doctor revisara a su esposo mientras tenia la mano del petiso para no sentirse tan nervioso.
solo fueron unos minutos cuando el doctor soltó un jadeo sorprendido, ivan nervioso vio al hombre frente suyo. — que ocurre doctor? que tiene mi esposo? - el hombre se acomoda los lentes mientras veía al rey.
— bueno alteza esto es algo sorprendente, pero muchas felicidades, el rey consorte esta en cinta, pronto llegara un heredero al trono. - sonríe contento el hombre.
