Maniobra [Regulus x James]

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—Recuérdame, ¿qué estamos haciendo aquí?

Regulus desvió su mirada de Potter solo un segundo y observó a su capitana. Levantó las cejas e hizo un sutil gesto hacia la cancha de Quidditch.

—Estamos espiando a la competencia.

Obviamente.

Era una razón sólida para que Regulus se encontrara en el graderío, con la atención fija en Potter. Todas las Casas hacían eso, ¿verdad? Espiaban a los otros equipos y preparaban sus tácticas para futuros partidos. Era absolutamente normal mirar. Era normal que él estuviese tan atento. Nadie podía juzgarlo.

En ese momento, Potter volaba alrededor de la cancha, esquivando obstáculos imaginarios, avanzando cada vez más rápido.

—Oh... eso estamos haciendo, —susurró Emma en tono conspiratorio, apoyándose contra su hombro.

—Sí, eso estamos haciendo.

Potter hizo un círculo en el aire, quedando suspendido de cabeza por más de un segundo antes de que la gravedad lo hiciera descender. Regulus sintió la comisura de sus labios elevarse ligeramente. Era un ridículo, un exhibicionista. ¿Y para quién estaba haciendo Potter todo ese teatro? No había nadie ahí que pudiese admirarlo.

—Porque yo pensaba que estábamos espiando a tu crush, —continuó Emma.

—Vanity, —advirtió él, fulminándola con la mirada.

—Black, —replicó ella, dejando ver su mirada astuta y sonrisa traviesa—. Porque, en realidad, parece que yo soy tu coartada mientras espías a James Potter.

Regulus giró su cabeza hacia la práctica de los Gryffindor y elevó su mentón.

—No me digas que tú no estás memorizando sus técnicas, —respondió, esforzándose por sonar indiferente—. Es algo que todos los capitanes hacen, yo solo estoy aquí para apoyarte.

Como respuesta, Emma contuvo una risa diabólica contra su brazo, arruinando completamente la apariencia de serios analistas que debían inspirar al equipo contrario.

—Reggy... Si estuviésemos haciendo eso, tú deberías estar mirando al Buscador y yo, como Cazadora, a Potter.

—No necesariamente, estoy teniendo un análisis holístico.

Holístico.

Él ignoró el tono sarcástico. Sus ojos captaron otra pirueta de Potter, volando de cabeza en dirección al graderío. Regulus apenas notó cómo su capitana lo soltaba... o tal vez él se había levantado porque, de repente, el Cazador se elevó en vertical, subiendo cada vez más alto en el aire. Sus propios compañeros de Gryffindor comenzaron a gritar su nombre y Regulus sintió la mano de Emma cerrarse en su túnica para que no diera un paso hacia el frente, directo al vacío de la siguiente grada.

—¿Qué...?

A una considerable altura Potter se detuvo abruptamente y su escoba se movió en espiral antes de caer en picada hacia el graderío.

—Está lloviendo hombres, —susurró Emma.

No, solo Potter.

Regulus sintió su corazón acelerarse y sus labios se estiraron en una sonrisa.

Maldito James Potter.

Desde su posición, podía ver al Cazador sonreír con astucia, sabiendo exactamente lo que hacía al caer en picada sobre Regulus, pero James no se movió. Regulus no se movió.

¿James creía que iba a asustarlo? ¿Creía que iba a hacer que Regulus se moviera?

Porque no lo haría.

Sin importar lo evidente que fuera la colisión.

Sin importar que Emma estuviese tirando de su túnica para que se apartara.

Porque en el último segundo, James jaló el mango hasta detener completamente su escoba y se dejó caer de esta, colgando de cabeza sobre el rostro de Regulus.

El cabello oscuro y desordenado le hizo cosquillas en el mentón y la respiración agitada de James acarició sus labios entreabiertos.

Si tan solo descendía un poco.

Solo un poco.

James podría besarlo en frente de todo el equipo de Gryffindor.

—¿Te gustó el show?

—Tus amigos te están llamando, Potter, —le recordó, arqueando una ceja.

—Eso no es un no, Reggie, —respondió James y escaló de nuevo en su escoba, mirándolos—. ¿Analizando a la competencia, Vanity?

—Así me han dicho, —respondió ella sin ocultar su diversión.

Regulus le lanzó una mirada de advertencia y oyó a James volar de regreso con su equipo, riendo entretenido.

—Mira tú, si fui buena excusa.

Una terrible excusa.

—Vi suficiente, vámonos, —susurró Regulus, girando sobre sus pies y alejándose de ahí.

—Oh, tus mejillas rojas y tú has visto todo lo que necesitabas, —canturreó Emma a sus espaldas.

Lo que Regulus había presenciado sería una de las legendarias e infames maniobras de James Potter.

Y por Merlín, había sido emocionante.

¡Saludos espectadores! Un pequeño pedido desde mi kf haciendo referencia a un viejo tiktok que hice. 

¿Quién notó la referencia a un capítulo previo?

Y si sus deseos pudiesen ser una orden y si sus caprichosos pudiesen hacerse realidad: En una futura historia ¿A quiénes les gustaría leer? [Ship, polyship y/o universo alterno. Todo es válido en este espectáculo]

¿Qué les pareció?

¡Nos leemos!

Nocturna IV

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