Only One | Larry Stylinson

Capítulo 6

ONLY ONE

Louis no tuvo que esperar mucho para poder ver el rostro confundido de su amado esposo.

El pelinegro iba saliendo por la puerta de la habitación cuando Louis le encontró de frente. Le tomó apenas dos segundos decidir de qué forma iba enfrentar aquello, y cuando lo hizo, arremetió contra Zayn, empujándolo por el pecho con todas sus fuerzas sintiendo el nudo en su garganta doler.

—¡¿Cómo permites esto?! —gritó el joven con furia dejando que un par de lágrimas rodaran por sus mejillas ya que simplemente no podía evitarlo porque su corazón estaba demasiado roto para tratar de aparentar alguna nimia fortaleza—. ¡Cómo siquiera pudiste pensar en traerlo aquí! ¡A mí hogar, el lugar donde duermo, donde vivo! ¡Mi casa, Zayn! ¡Esta es mi jodida casa!

Quiso empujar a Zayn de nuevo, pero la situación se convirtió en forcejeos y jadeos ahogados. Louis dando manotones en el aire siendo revoltoso por el alcohol que le daba valentía corriendo en sus venas y con Zayn medio confundido queriendo evitarlos.

—¡¿Quieres calmarte y explicarme qué demonios ocurre?! —Zayn le tomó por los antebrazos poniendo fuerza brusca a su agarre haciendo que Louis soltase un ahogado sollozo.

Dejó de manotear, sin embargo. Su mirada llena de tristeza, decepción y lágrimas fue a parar encima de los ojos avellana de Zayn, que lucían con un poco de angustia al ver las mejillas mojadas del joven.

—¿Que te explique? —Louis murmuró recobrando por segundos aquel coraje que hacía hervir su sangre—. ¡¿Qué mierda quieres que te diga?! ¡Tú mismo dejaste que él viniera! Ese perro asqueroso, traidor y poco hombre... —se quejó, perdiendo un poco la fuerza bajando su mirada.

Zayn se quedó unos instantes en blanco, mirándole de pronto con ojos grandes y postura tensa—. ¿L-Liam? ¿Él está aquí?

Louis volvió a levantar su mirada con lentitud, encontrando aquel perfecto rostro del que alguna vez estuvo tan perdidamente enamorado. Encontrando al hombre al que le había entregado todo de él, quizás ese fue su problema, que entregó todo, esperando un pago igual... Lo obtuvo, pero apenas pudo disfrutarlo un poco cuando le fue inesperadamente arrebatado. Fue su culpa, por confiar en que era suficiente, fue su culpa por creer que el amor era para siempre, fue estúpido por creerse todas aquellas promesas. Por creer que iba a salirse con la suya, por hacer algo tan malo y después esperar algo tan bueno. Fue estúpido por creer que el cariño de Zayn sería eternamente suyo.

Se rió como un tonto despechado cuando se dio cuenta de que Zayn no lo observaba a él, sino a la puerta abierta detrás.

Negó, encontrándole la gracia a su maldita desgracia.

Pudo ver la preocupación en aquellos ojos marrones, la duda en aquel gesto.

Ladeó la cabeza sintiendo cada vez menos la fuerza con la que sostenía Zayn sus delgados brazos—. ¿Por qué no corres a ver cómo está? —le dijo todavía sonriendo—. Quizás fui muy rudo con él. Quizás está necesitando un abrazo tuyo.

La mirada de Zayn volvió a la suya, Louis asintió... Con nuevas lágrimas resbalando por sus mejillas.

—Después de todo él es lo único que te importa ¿no es así? —le dijo—. Es lo suficientemente bueno como para que hayas decidido arruinar nuestro matrimonio, para que hayas decidido arruinar mi vida, todo esto...

Zayn no se movió—. No digas tonterías.

—¿Entonces qué? —el joven sollozó—. ¿Debo olvidar que esto sucedió? ¿Debo aparentar que nada de esto pasó?

Louis lo observó durante algunos segundos pero el pelinegro seguía en silencio. Siendo incapaz de decir palabra alguna.

—¡Dime! ¡¿Qué demonios tengo que hacer Zayn?! —se soltó bruscamente del agarre de su esposo dando algunos pasos evitando trastabillar hacia atrás.