En un mundo de dragones y traiciones, Aelys Targaryen, la hija de un rey lejano y de Rhaenyra Targaryen, se enfrenta a un destino incierto. Sus sueños proféticos la guían hacia Desembarco del Rey, donde deberá luchar por su familia y el Trono de Hie...
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Todos los presentes quedaron anonadados al ver al enorme dragón bajar, de el bajo una hermosa joven con ropas lujosas, todos se sorprendieron aún más al escucharla decir "hermanos" a los bastardos Velaryon.
—¿Hermanos? -la voz de Aemond sonó rasposa.
—Cómo escuchas tío, soy Aelys Long, hija del emperador de Zhulong y la princesa heredera Rhaenyra -todos los presentes aumentaron los chismes, jamás negaría a su padre y menos su linaje, era una bastarda que era respetada en su imperio.
—¿Hermana? ¿Tenemos una hermana? -el menor de los hermanos soltó, Aelys se acercó a él y acaricio su cabeza, suposo que era Lucerys, gracias a su padre había averiguado todo sobre sus hermanos.
—Lo soy - pero no sentía cariño por ellos, sus sueños eran vividos, morían de forma cruel y absurda, jamás dejaría que eso pasara, sobre todo luego de que su tío tomara sus tropas y marchara a Longwei para masacrar a su gente. —Debo ver al rey -se despidió de los tres Targaryen y dio marcha hacia el interior, su séquito se redujo a su doncella personal y tres guardias.
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