En un mundo de dragones y traiciones, Aelys Targaryen, la hija de un rey lejano y de Rhaenyra Targaryen, se enfrenta a un destino incierto. Sus sueños proféticos la guían hacia Desembarco del Rey, donde deberá luchar por su familia y el Trono de Hie...
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La fiesta de celebración estaba relativamente en calma, el viejo rey a pesar de sus dolores sonreía a su nieta mayor, la felicidad de ver a su familia unida le hacía sentir en paz.
Y aquel momento era el justo para dar el anuncio, todos los invitados comían y bebían con alegría y los más jóvenes bailaban en busca de pareja.
—Quisiera anunciar algo - sir Erryk le ordenó a los músicos parar, el rey tomó su bastón y se acomodo bien en el asiento, todos estaban expectantes de su anuncio. —Como sabrán, mi buen amigo Otto ha estado durante el reinado de mi abuelo y mi reinado, ha sido la mano más fiel y honesta, pero todos llegamos a la edad en la que preferimos descansar.
Otto bajo su copa y le miró sin entender, Aelys estaba al lado de Aemond sonriendo en grande, su primera fase del plan estaba a nada de suceder.
—Hoy no solo celebramos la boda de mi amada nieta Aelys y de mi hijo Aemond, también celebramos la jubilación de Otto Hightower, la fiel mano del rey.
Todos miraron a Otto y aplaudieron de inmediato, Alicent y Otto se vieron entre sí tratando de conectar lo que acababa de pasar.
Lo había despedido sin avisarle.
Inaudito, pensó Alicent.
—Pero esposo - El rey la ignoro.
—Mi buen amigo merece una celebración también, decreto dos días más de fiesta - todos aplaudieron nuevamente.
