SIETE

2 1 0
                                    

SIETE

Es tan jodidamente complicado tener que ver a Chester en los ensayos de la coreografía, pues mi hermana ahora se la da que es muy buena y nos ha permitido un espacio donde le pertenece a ella y a su novio. Intento con todas mis fuerzas contenerme y respirar profundo varias veces seguidas para no cagarla y cumplir mis promesas.

Quisiera decirle que lo amo, que me hace un montón de falta y necesito de sus abrazos, besos, caricias. Quiero estar a su lado y apoyarlo, que me cuente chistes malos, me diga que le sucede y así pueda ayudarlo siempre.

En mi mente suena una canción que escuche hace poco de una serie tailandesa, y mis lágrimas se hacen presentes. Es inevitable no llorar, me siento muy mal y aunque se estoy rodeada de personas, igual puedo dar una excusa, porque igual extraño a mi madre y ambas cosas se me juntan.

—¿Todo bien? —pregunta Zes—. Podemos parar, novia falsa amiga.

—Si, paremos.

—¿Novia falsa amiga? —pregunta mi hermana.

—Desde pequeños nos decimos así, era una excusa para que las chicas no se me acercaran y como le tenían miedo a Carter fue perfecto.

—Y yo estoy de acuerdo con eso —replica Max.

—No entiendo.

—No hace falta. ¡Bien, ya terminamos!

**

Se acerca mi cumpleaños y no tengo ánimos para hacer algo divertido. Pido mi día libre para hacer lo que quiera y mi padre es el primero que no quiere dejarme sola por motivos obvios. Sigo insistiendo hasta que al fin logró convencerlo, pues Tom me ayuda en esa parte tranquilizando a mi papá.

—Bien, de vainilla y toques de snickers por favor.

—Yo quiero de nutella con chocolate y de fresa, por favor.

—Pido lo mismo que mamá.

Anoto los pedidos y los hago llegar a la caja. Siento el perfume de Chester y me contengo, pido a Elizabeth que se encargue de esa mesa y ella asiente con la cabeza.

—Si vino a molestarte, la mataré —dice Alan.

—Yo también, no la soporto.

—Carter, ella quiere que la atiendas tú porque debe decirte algo importante.

Alan y Max me acompañan, saben que si Vanessa dice algo que me hiera se las verá con ellos. Lo mas triste del asunto es que ninguno sabe el detrás de cámara, y mi hermana tampoco.

—Haznos el helado de bodas, por favor —pide Chester y entro en pánico.

—Siéntate, tus amigos se encargan, mientras te vamos contando —¡hija de puta! Mis amigos contienen la molestia y se van para luego regresar rápidamente con los respectivos helados—. Chester y yo vamos a casarnos, ¿no es genial?

Zes me hace una seña que vaya un momento a la barra y es perfecto para no decir algo estúpido. Me acerco y mi amigo me observa como si ya supiera mi secreto. Pide que vayamos a la nevera para buscar algunos sabores y tener variedad para los clientes.

—Hay algo que necesito saber que no me has contado.

—Yo también quiero saberlo.

—Y yo.

—Bien, tarde o temprano tenían que saberlo. Chester y yo...fue inesperado, nos besamos una sola vez, nos veíamos todos los días durante estas últimas semanas y le dije que dejáramos de vernos porque no quería tener problemas con mi hermana y aceptamos fingir que nada paso entre nosotros.

—¿QUÉ? ¡OH POR DIOS!

—No veo el problema, esa hijísima de la gran puta sabe y por eso lo convenció. Ya sabía que Chester no era ningún imbécil.

—¿Estás bien? ¿Tu padre sabe?

—No lo sabe.

—¡MALDITA LOCA!

—Yo fui la que acepte besarlo.

—No nos interesa si tienen mil años juntos, con razón lo veía tan feliz y ahora parece que se hubiese transformado en alguien diferente.

—Carter, no puedes seguir sufriendo.

—Yo me enamoré sin planificarlo, no debí hacerlo, fue estúpido.

—Y él también se enamoró de ti. Él te ama, Carter. Se nota demasiado que muere por estar contigo.

—Fue estúpido.

—Te apoyamos. Sabes que cuentas con nosotros, no me interesa lo que haya ocurrido, solo nos importas que tú seas feliz.

—La única cosa que necesitamos saber es porque te odia. Necesitamos que te vea con Chester, y ver cómo va a reaccionar.

**

El plan de mis amigos es descabellado, loco y no tiene sentido. Intento tranquilizarme y respirar nuevamente. Mis manos sudan, todo me tiembla y de verdad esto se va a poner feo. Chester llega a mi casa y me trae un pastel, luce muy lindo y su sonrisa me hace sentir bien. Él no sabe nada del plan, y mejor así.

—Feliz cumpleaños, Carter.

—Gracias.

Charlamos de todo, me cuenta varios proyectos, desea apoyarme anónimamente para que pueda realizar mi sueño. Ambos nos acercamos como si fuéramos a besarnos, la química es demasiado poderosa, y yo muero por probar sus labios nuevamente. No han pasado ni veinte minutos cuando entra Vanessa con la furia a flor de piel.

—¿QUÉ HACES AQUÍ CON MI NOVIO? MALDITA IMBÉCIL —ella me empuja hacia el suelo—. ¿POR QUÉ ME QUITAS TODO LO QUE AMO, CARTER? ¿POR QUÉ? TÚ ME QUITASTE A MI MADRE, TÚ FUISTE LA CULPABLE QUE MURIERA. TÚ LA HICISTE CAER.

—¿De qué están hablando?

—¿YO LA HICE CAER?

Mi respiración comienza a entrecortarse, las escenas de mi madre abundan en mi cabeza y caigo al suelo. Zes llega a tiempo para calmarme.

—ERES UNA MALDITA ENFERMA.

—Y QUIÉN ERES TÚ PARA DECIRLE ESO A CARTER, VANESSA. NO SABES TODO LO QUE HA PASADO CARTER. SI, ELLA ESTUVO EN ESE HORRIBLE DÍA, PERO FUE TU MADRE QUIEN TOMÓ LA DECISIÓN. A CARTER LA TUVIERON QUE LLEVAR A UN HOSPITAL, NO RESPONDÍA, NO HABLABA, NO HACÍA NADA. Y LA PASO MAL DURANTE TODO ESTE TIEMPO. DURÓ CUATRO HORAS LLORANDO CUANDO DESPERTÓ Y SUPO QUE LA SEÑORA HILLS SE HABÍA SUICIDADO. TÚ TENÍAS QUE ESTAR CON ELLA Y APOYARLA, PERO ESTABAS MUY FELIZ EN AMÉRICA, ¿NO? QUE NI TE IMPORTÓ LO QUE ESTABA SUCEDIENDO AQUÍ. NUNCA ESTUVISTE PARA TU HERMANA MENOR Y AHORA INTENTAS ECHARLE LA CULPA.

—SE HACE LA VÍCTIMA, SOLO FINGE Y YO SÉ QUE MIENTE.

—¿QUIERES VER EL VIDEO? ¿QUIERES VER EL MALDITO VIDEO DE CUANDO TU MADRE SE LANZO DEL BALCÓN?

—Ya basta... —hablo apenas—. Comamos pastel.

—Y AHORA INTENTAS ROBARME A MI NOVIO. ÉL Y YO NOS VAMOS A CASAR, CARTER.

Suena la canción de Goblin y comienzo a temblar de pies a cabeza. Fue justamente la armonía que mi madre cantó él día en que decidió morirse y dejarme sola en un mundo cruel. Mi llanto no cesa y mi padre le grita a Vanessa que apague su teléfono.

—TODO ES CARTER.

—ESA CANCIÓN FUE LA QUE SU MADRE LE CANTO A CARTER ANTES DE MORIR.

Vanessa se queda en shock sin poder creerlo y sale de la casa, ni siquiera Chester va con ella. Él me observa y está preocupado por mi. 

About Winter © (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora