DOCE

2 1 0
                                    

DOCE

Andrea logra conseguir la dirección de Carter y mi corazón está emocionado por encontrar su otra mitad. Estoy nervioso, tengo ansiedad y mi impaciencia no me deja dormir en el vuelo. No se como voy a reaccionar al momento que la vea, no puedo inventar alguna excusa porque es ridiculous y ella sabrá que estoy mintiendo. Es mejor ser sincero, decirle las cosas y listo. No le temo al rechazo, porque se que ella tiene miedo por su hermana y no es para menos, pero casualmente ya Vanessa aceptó divorciarse y es un acontecimiento histórico que debe celebrarse como se debe. Aún así ella es capaz de hacer muchas cosas malas y necesito tener cuidado en ciertos detalles.

Bajarse del avión es sentir más presión y felicidad en mi interior. Tengo demasiadas expectativas de lo que pueda ocurrir, pero me voy a arriesgar sin importar lo que pueda suceder conmigo más adelante. Zes, Max y Alan están allí esperándonos, los tres me abrazan y sonríen.

—Increíble —dice Alan—. Jamás pensé que volvería a verte, Chester. Parece imposible que regresarás después de tanto tiempo. ¡Vamos!

—Bienvenido, Chester —me estrecha la mano, Zes sonriente.

—Ella no lo sabe, ocultarlo fue muy difícil. ¡Vamos! —comenta Max.

De verdad que jamás he sentido tantos nervios como ahora, todo mi cuerpo suda, no soy capaz de inhalar y exhalar, simplemente quiero verla, abrazarla, saber que aún no la olvido y que la extraño como a nadie en este mundo. Llegamos a la casa donde nos recuerdos invaden mi mente y me hacen sonreír, nos abre su padre y su esposo. El señor Jim no ha cambiado en nada y Tom sigue sus pasos.

—Siéntense.

Se oyen pasos provenientes de la escalera.

—Claro, mañana nos vemos y coordinamos —esa voz tan linda, tierna, es del amor de mi vida—. Si, hoy estaré con mi familia, así que no podré hoy. ¡Gracias! Si, le aviso. Hasta luego.

—Papá, cálmate. Jamás te vi así, pareces un niño —susurra Anastasia—. Por cierto, soy la hija de Chester Was.

—Supongo que eres mi nieta, ¿no?

—¡Si!

—Huele rico, ya quiero comer —aparece Carter demasiado hermosa, y sonriente como siempre—. ¿Por qué están en la sala? —Ella está impactado al verme y no puede creerlo, ve a Anastasia y se sorprende aún más.

—Bien, vamos a comer antes que se enfríe todo —dice su padre rompiendo el silencio tan incómodo.

—Soy Andrea y él es Frank, somos hermanos de Chester —mi hermana siempre tan entrometida se presenta—. Lamentamos venir de improvisto, espero no te molestes.

—No me molesta, ¿y tú eres? —se dirige a mi hija.

—Anastasia Was, hija de Chester.

—Un placer.

—¿Hablaste con Asha? ¿Qué te dijo? —pregunta Zes.

—Si, me dijo que le gustaría que asistiéramos a su boda el mes próximo. Además, quiere ampliar su patrocinio el resto del año.

—¿Podemos comer sin que preguntes del trabajo? ¡Son molestos sinceramente! —se queja Alan.

—Eres demasiado dramático, necesitas una pareja urgente. Siempre te quejas de todo —refuta Max.

—Vas a cumplir treinta y te comportas como un bebé. Ya relájate, hermano. Disfrutemos el momento, que nadie te quiera no quiere decir que no seas importante para nosotros. No nos interesa tu orientación, si eso es lo que te preocupa —dice Zes riéndose a carcajadas de mi amigo.

Terminamos de comer y deseo hablar con Carter, decirle tantas cosas que han pasado por mi mente en estos años. Ayudo a recoger todo y los demás se van retirando lentamente sin decirme nada, solo me guiñan el ojo y hacen gestos graciosos.

—¿Qué haces aquí, Chester? —me pregunta ella frunciendo el ceño.

—Quería verte —respondo—. Lamento si interrumpí tu día, y la promesa que nos hicimos, es solo que...la idea...

About Winter © (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora