INFRUNAMI || En un mundo donde las sombras del pasado aún susurran, la historia de Cassiopeia Lestrange emerge como un faro de esperanza y redención. Hija de mortífagos, encontró su luz en medio de la oscuridad, desafiando el legado de sus padres pa...
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✝︎ CHAPTER TWELVE ✝︎ ❝ Miss Nott ❞
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¿Sabes ese sentimiento donde sientes que pasará algo malo? No sabes cómo, solo sabes que pasará. Hoy, 2 de mayo de 1998, el aire en Hogwarts estaba cargado de una tensión palpable, como si el mismo castillo estuviera conteniendo la respiración ante la inminente tormenta que se avecinaba. El eco de pasos apresurados resonaba en los pasillos, mientras estudiantes y profesores se preparaban para lo que sea que estuviera pasando.
Los rostros de los alumnos, pálidos y serios, reflejaban el miedo y la determinación mientras se agrupaban en la Gran Sala. Los profesores, con expresiones tensas, daban instrucciones finales y organizaban defensas. Las paredes de piedra parecían vibrar con la energía contenida, y los murmullos se entrelazaban con el sonido distante de la preparación para la batalla.
Cassie, de pie entre sus compañeros, sentía el corazón latir con fuerza. Sus ojos buscaban a sus amigos en medio del caos. La incertidumbre y el miedo se reflejaban en cada mirada, mientras el tiempo parecía ralentizarse, marcando el preludio de la inevitable confrontación.
Snape había anunciado una reunión de emergencia en el Gran Comedor, que ahora estaba despojado de mesas y sumido en una oscuridad sombría. Los pasillos estaban abarrotados de estudiantes de todos los cursos, convirtiendo el simple acto de caminar en una tarea ardua. Cassie, apretando con fuerza la mano de Theodore, intentaba abrirse paso entre la multitud. Luchando y empujando a varios de tercero o primer año.
La tensión en el aire era casi tangible, y cada paso que daba parecía intensificar la sensación de opresión en su pecho. Le costaba respirar, como si el mismo aire se hubiera vuelto denso y pesado. Nunca había sido buena en adivinación, pero en ese momento, Cassie sentía una certeza escalofriante: algo terrible iba a suceder hoy.
— ¿Lo sientes también, Theo? —murmuró, con su voz apenas un susurro en el caos que los rodeaba.
Theodore asintió, su expresión se mostraba seria y preocupada—. Sí, Cassie. Algo está muy mal. Debemos estar alerta. No quiero que te pase algo.
