•Capitulo XIV• Flor venenosa

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Era el día siguiente de todos aquellos inesperados acontecimientos . La joven Dayana comenzaba a despertar , apenas se asomaba el sol en el reino de Apógevma .La joven Dayana se sentó en la cama , se estiro para después proceder a levantarse y abrir el ventanal que se encontraba en sus aposentos. 

La joven hizo su rutina de siempre , acomodo su cama y decidió comenzar a desempacar su ropa para colocarla en el ropero . Después , decidió cambiarse, arreglarse y peinarse .

Se dirigió a la puerta de su cuarto , y al abrirla , pudo observar en el piso una bandeja de plata con el desayuno hecho , y en uno de los costados de  este mismo , se encontraba un rosa roja con una pequeña carta, lo cual , la saco de la suposición de que haya sido la servidumbre .

La joven princesa tomo la bandeja para después volver a ingresar a sus aposentos , se sentó en la cama y posó la bandeja en la cama , para después , tomar la rosa con delicadeza y leer la pequeña nota que venia con esta.



Princesa Dayana.


Espero que el roce de rencor de ayer haya quedado en el pasado . 

Usted me agrada , fuera del hecho de que nuestros reinos sean enemigos , me gustaría conocerla un poco mejor y que nos toleremos aunque sea , ya que por lo visto , estaremos topándonos seguido un tiempo .

Este desayuno es una pequeña ofrenda de paz y muestra de mi total admiración hacia usted , y esta rosa es un pequeño regalo , me recuerda a usted , tan bella como una rosa .



Principe Eric . 



La joven princesa no obtuvo ninguna reacción positiva de aquella carta , simplemente la termino de leer y la dejo de lado igual que la rosa , dejo el desayuno en la cama y se retiro al salón de tronos.

La joven Dayana estaba bastante indignada por el atrevimiento del príncipe Eric al mandarle una carta de una supuesta tregua , ella sabia perfectamente los problemas políticos , diplomáticos , económicos y sociales que el Rey de Drakon tiene en su reino y era obvio que todo esto pasaría al futuro heredero , quien seria el príncipe Eric . Sin embargo , la joven princesa no sabia el porque el estaba en el reino de Apógevma   , y que pretendía con llevarse bien con ella. 

La joven Dayana decidió ir con la reina Elizabeth para proceder con la información y los datos del reino , que ella estudiaría durante su estancia , antes de la coronación. 

La reina Elizabeth también tenia que realizar unas cuantas preparaciones cuando le entregara el reino a Dayana.

Las dos damas se encontraban en la biblioteca principal del castillo , realizando sus tareas. Ya sabia dado la tarde y la joven princesa Dayana quería ir a comer. 

Dejo lo que estaba haciendo y salió de la biblioteca para dirigirse a la cocina. 

Al llegar , la servidumbre le comento a la princesa que ellos harían la comida , sin embargo , la princesa estaba algo estrellada y necesitaba distracción , así que les dijo que ella deseaba hacer la comida esa tarde . 

La servidumbre la vio con extrañeza , pero no se quejaron. La joven princesa tenia altas habilidades culinarias así que no le seria complicado realizar una buena comida. 


La princesa estaba concentrada en su cocina , sin embargo , una voz la saco de sus pensamientos.

–Es algo extraño ver a una distinguida princesa cocinar– 

La princesa reconoció inmediatamente esa molesta voz , así que ni siquiera se molesto en mirar quién era .

–Y es muy extraño ver a un príncipe holgazanear y meterse en algo que claramente no le incumbe– dijo con tono burlón

–¿Disculpe? , eh estado todo el día trabajando – dice en tono egocentrico 

–¿Ah si ? ¿en que según usted? –

–Es extraño ver a una princesa meterse en algo que claramente no le incumbe –dice arremedandola.

–Bien , usted gana , ya se puede ir –

– Oh mi querida princesa , no es nada sociable , y cabe resaltar , que la socialización con la gente debería ser la cualidad de una futura gobernante –


La joven princesa pensó muy bien en las palabras del joven príncipe , esto podría ser de utilidad para asi saber que estaba tramando el futuro gobernante de Drakón en el reino de Apógevma. La princesa pensaba y pensaba que tal vez entablar una "buena" relación con el príncipe Eric le ayudaría a ella y a su reino . Mientras la joven analizaba su situación , el príncipe Eric solo parloteaba y presumía sobre sus impecables modales y habilidades para socializar, pero la princesa no escucho una sola palabra al estar sumida en sus pensamientos. De repente , de nuevo , fue sacada de sus pensamientos por algo que dijo el joven Eric entre todo su parloteo.

–¿Entonces? ¿Aceptas cenar conmigo mañana en la noche? –

–Eh...yo– no sabia que responder la joven , pero al final decido aceptar.

–Espléndido , en ese caso , te veré mañana en la noche – 

–Puede dejar de tener la osadía de tutearme , si sigue así , lo dejare plantado –

–Disculpe usted , me esforzare para que asista –

El joven Eric se fue , dejando a la joven Dayana en la cocina , sin embargo , mientras estos dos estaban hablando , dos personas  más los estaban escuchando...


Después de que la joven Dayana terminara de comer , se volvió a dirigir a la biblioteca , para asi , darse cuenta de que la reina ya no se encontraba en esta.  La joven termino sus deberes de ese día y se dirigió a sus aposentos ya que se encontraba bastante cansada.

Antes de dormir , escribió unas cuantas cartas , para así , ser enviadas al reino de Dynami con la información recabada del príncipe Eric y la idea y planes de la princesa , ademas de contar su sentir sobre su estadía allí.





Al llegar la madrugada , dos personas se encontraban vagando por el palacio , y una de ellas , fue al establo real mientras la otra persona vigilaba , en cuanto la persona consiguió un caballo , tomo su capucha y se fue hacia las fronteras del reino . Mientras tanto , la persona que se encargó de vigilar el establo , se quedo , mirando el caballo hasta que desapareciera de su vista. 

Con una fuerte preocupación , esa persona , que para ser mas específicos , era una joven dama , fue corriendo a los aposentos de la princesa Dayana con intenciones de tocar la puerta , sin embargo , lo único que pudo hacer fue levantar su puño cerrado ante esta misma , para después , arrepentirse y darse la vuelta ...





El amor es un campo de guerra , guerra la cual puede este mismo , desencadenar también. 


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