Solo Di Que Me Amas

Capítulo 1

*Ethan

Me desplazo entre la entrada del restaurante ignorando la fila de personas que hay afuera, mi llegada en el auto llamo la atención de los transeúntes y toda esta gente refinada. No me tarde mucho tiempo en llegar al restaurante, solo me costó 45 minutos, y justo ahora son 3 para las 7:00 p.m.

El chico que se encarga de hacer que los clientes pasen según sus reservaciones parece ser nuevo, claramente lo es, si ese no fuera el caso me dejaría pasar si supiera quien soy. No me interesa describir su apariencia, luce como un tipo cualquiera, común y corriente.

Solo diré que es un veinteañero.

Pero este tipo se interpone entre mi camino para entrar al restaurante, cuando lo hace desvió mis ojos para mirarlo.

—¿Algún problema? – pregunto levantando una ceja.

—Tiene que decirme su nombre para saber si hizo una reservación- me dice eso como si no lo supiera.

—Por supuesto que hice una reservación- arrugo la frente-. ¿Parezco un vagabundo para no hacerla?

—Si hizo su reservación entonces espere en la fila su turno- extiende su mano para mostrarme a las personas en la fila, mas no volteo.

<< ¿Quién pretende que soy? >> pienso indignado.

—Señor Ethan mucho tiempo en verlo- escucho mi nombre así que volteo a ver a el hombre de traje blanco que viene hacia mí con los brazos abiertos.

El dueño del restaurante.

—Es un honor que nos visite de nuevo- me dice estrechando su mano con la mía.

—Parece que tiene nuevo personal- digo mirando al hombre que no me dejo pasar.

—Me disculpo si uno de mis trabajadores le falto al respeto- me dice mirando al empleado de hace rato-. Desde aquí yo lo acompañare hasta su mesa.

—Pero que considerado eres Albert- sonrió.

—Todo por usted Sr. Hussain- me dice comenzando a dirigirme.

Pasamos por el vestíbulo llegando hasta las mesas, la mesa que usualmente tomo es la que se encuentra al fondo, está en una superficie elevada con una baranda que separa la zona VIP y un adorno floral en la parte de atrás y justo al lado de la ventana.

Hay otras dos mesas más en esta plataforma, pero están separadas la una de la otra, eso la convierte en una buena zona VIP. Me siento en mi silla donde puedo tener vista completa a las dos zonas, también tengo vista afuera del edificio desde la enorme ventana de vidrio.

—¿Le gustaría ordenar lo de siempre? – pregunta Albert.

—Quisiera el mismo vino, por el momento no deseo nada- no me la pienso dos veces.

—Le traeré su vino enseguida, si necesita algo mas no dude en pedirlo- dice inclinando su base para después marcharse.

<<un verdadero lamebotas>>

El ambiente es un poco ruidoso, a pesar de estar un poco apartado de los demás. Los comensales comienzan a degustar su comida, hablar con sus acompañantes, etc. Etc.

Pero mi mirada se pierde en una mujer que sale de una de las zonas del restaurante, lleva puesto un vestido de la colección La Vacanza de VERSACE 2023 color negro, le llega hasta arriba de su muslo y tiene una abertura en la espalda. Lleva tacones negros Saint Laurent con suela dorada, un bolso de mano negro Versace, el cabello suelto acomodado hacia los lados y si no me equivoco lleva unos pendientes largos de una camelia dorada con un cristal café en el centro y con una perla en forma de lagrima de la nueva colección de Chanel.

Sus ojos son azules y su cabello le llega hasta la espalda, sus labios están pintados con un gloss color café. Además, su silueta es un taco de ojo perfecto, tan solo ver sus curvas y sus largas piernas hacen que no despegue mis ojos de esa mujer.

Es el centro de atención de todo el restaurante, no solo su belleza si no también la ropa y accesorios que lleva puesto dan mucho de qué hablar.

Me sorprendo aún más cuando noto que la mujer se dirige hacia mi sin despegarme la mirada.

—Si me permite señor- dice Isaac detrás mío para detener a la mujer que se acerca.

Extiendo mi mano para detenerlo, no quiero espantar a tal mujer frente a mis ojos. La mujer llega hasta mi mesa muy imponente.

—¿Usted es el señor Reggie Ward? – me pregunta con una voz un poco grave y calmada.

<<seductora si me lo preguntan>>

—Por supuesto- miento sonriendo sin saber muy bien el contexto.

La mujer al escuchar esto toma asiento en el otro extremo de la mesa, frente a mí.

—Cuando llegué al restaurante no había mucha gente así que fui a retocarme un poco el maquillaje- comenta recogiéndose un mechón de cabello detrás de su oreja-. No pensé que usted estaría esperándome en la mesa.

—Planeaba llegar más temprano sin embargo surgieron algunos contratiempos en la empresa- realizo ademanes interpretando muy bien mi farsa.

—Lo entiendo- asiente mirándome.

Desvió la vista a Albert quien trae una bandeja con una botella de vino tinto.

—¿Le gustaría un poco de vino? – pregunto a la mujer señalando a Albert quien se aproxima a la mesa.

—Por supuesto - dice-. Me encantaría saber cuáles son los gustos de vino del señor Ward.

La mujer desvía la vista esperando a que Albert llegue a nosotros.

—No sabía que esperaba a otra persona señor- dice Albert dejando el vino y las copas en la mesa.

—Puedes retirarte Albert, y tú también Isaac - digo sin mirarlos.

—Está bien- me dicen ambos retirándose.

La mujer observa con la pupila del ojo como Albert e Isaac se retiran.

—Entonces señorita...

—Isabelle- contesta-. Parece que el señor Ward tiene mala memoria.

—Es solo que el trabajo me tiene un poco cansado- digo-. ¿Vino?

Levanto la botella de vino ofreciéndole vino a la mujer.

—Si es tan amable de servirme- extiende su mano.

Tomo la botella de vino y procedo a servir un poco del líquido en la copa de la mujer.

<<Reggie Ward>>

Es el segundo hijo de Harriet Ward, ceo de Showmix una empresa de entretenimiento de Inglaterra, su familia es rica e influyente. Pero solo es un perdedor que se la pasa jugando juegos de azar y apuestas, si mal no recuerdo el año pasado fue acusado de abuso sexual contra su ex pareja.

La mujer frente a mi toma su copa de vino después de habérsela servido, su etiqueta es muy buena y sus modales también lo son.

—¿Puedo hacerle una pregunta? – cuestiona mientras oxigena su vino.

—Por supuesto- respondo-. Pregúnteme lo que quiera.

—¿Quién es usted?

Pregunta de una manera que me sobresalto junto con Isaac a mi espalda.