Era un nuevo día en Sutirushiti, y una vuelta a la rutina para mí. Me desperté muy temprano en mi futón, sobresaltándome pensando si en verdad estaba en casa o si solo estaba soñando y seguía en el cuarto de hospital. "¡Auch!" No pude evitar peñiscarme la mejilla solo por curiosidad. Entonces es real, estoy de vuelta en casa, no puedo evitar lagrimear feliz de ver el techo de mi cuarto. Veo la hora, aún es muy temprano, así que me levanto de la cama, me estiro y empujo la puerta corrediza del clóset.
Doraemon seguía dormido, con cariño le acaricio la cabeza agradeciendo todo el tiempo que él estuvo conmigo en esos momentos tan horribles que pasé. Para algunos, solo se veía como cualquier robot mecánico que tenía rasgos distintos por ser del futuro, pero para mí es una de las mejores cosas que me ha pasado, mi mejor amigo. Guardé el futón en la parte de abajo del closet y cierro la puerta. Bajo poco a poco a la parte baja de la casa yendo baño para lavarme, mamá nota mi presencia cuando estaba preparando el desayuno, así que cuando salí del baño, me mira sorprendida.
"Buenos días hijo. Hoy te has levantado muy temprano, generalmente debo gritarte para que te levantes llegando tarde a la escuela." Mamá sonríe aún sin salir del asombro, yo solo me levanté porque se me había quitado el sueño muy temprano. Pero el verla me hizo darme cuenta de algo, extrañé tanto esta rutina, además, les hice pasar días horribles a mamá y papá.
"Buenos días mamá, es que ya no tengo sueño así que mejor aprovecho para no llegar tarde" Y ellos no saben en lo que me he metido, así que, quiero que al menos se lleven un buen recuerdo de mí. Si fallo en esa misión, si la misión llega a cumplirse y yo no lo logro... Me puse a pensar en las posibilidades, Seiya y los demás estaban convencidos que todo saldría bien, pero con lo que viví, solo pensé: ¿Y si esta era mi segunda y última oportunidad?.
Los pensamientos seguían invadiendo mi mente mientras camino a la cocina "Buenos días Nobita, es bueno verte levantado temprano. ¿Acaso has decidido hacer las cosas diferentes?" Papá me sonríe mientras lee el periódico, pero esa inocente pregunta solo abrió más las preguntas en mi cabeza cuando me siento en la mesa. "¿Y Doraemon?"
"Sigue durmiendo, lo dejé dormir un poco más, creo que estaba cansado" Fue lo que dije mientras muerdo el pan tostado que mamá preparó
Mamá se sienta a lado de papá mientras ellos estaban sentados al frente de mí, había una silla vacía que es la de Doraemon pero él está durmiendo. "Es verdad, Doraemon se esforzó por cuidarte durante ese proceso, cuando estabas en coma se la pasaba al pendiente por si te daba alguno de tus ataques. Es el que menos durmió por completo, ya que en las madrugadas se despertaba para saber si estabas bien, incluso cuando estabas en el mes de observación, no se alejó nunca de ti salvo cuando iba a la cafetería" Dice papá a lo que eso me tomó por sorpresa.
"Y también Shizuka fue quien más estuvo al pendiente como Doraemon, ella solía quedarse para cubrirnos mientras tú estabas en coma, incluso reparó tu gorra, y no olvidemos el día de tu cumpleaños" Mamá tiene razón, justo en ese mes fue mi cumpleaños y aunque fue triste el haberlo pasado en el hospital, Shizuka apareció con un pastel casero con fresas junto con Dekisugi, Seiya y Melia quienes improvisaron un pequeño festejo, la verdad, se sintió agradable.
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Doraemon: Nobita y la Ciudad Vapor
Science FictionEn la gran ciudad de Sutirushiti, el estudiante de primaria de 11 años llamado Nobi Nobita junto con su gato robot mecánico de un futuro distante llamado Doraemon viven su vida día a día con sus amigos, rodeados de barcos voladores, vapores y engran...