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"Inhala, exhala, mantente y no caigas"

Caminaban sigilosamente entre los arbustos, esquivando algunas piedras y demás en el suelo para no resbalar, el aire era pesado, había una gran tensión entre todos, puesto que sus respiraciones estaban suspendidas para no levantar sospechas de que ya habían llegado, después de un día entero caminando sin parar, y aunque Louis lucho por mas de seis horas para seguir en esto y Harry lo regaño, apenado subió al tanque para acurrucarse junto a el y dormir las próximas horas antes de llegar al jodido fuerte alemán.

Todo estaba en silencio esa mañana, los supuestos alemanes que los atacarían en el campamento ni luces dieron por el camino, Louis pensó que eran unos enormes cobardes o quizás solo enviaron aquel rumor para que ellos se acercasen y pusieran final a toda la tortura que están viviendo hace años. Fuera cual fuera la excusa ahora estaban ahí, frente al edificio gris viejo con muros altos, y para Louis fue asombroso ver cuan rápido esos infelices se habían instalado en la zona francesa. ¿Qué se creen?, ¿dueños del mundo?, ¿una clase de reyes?, hacerse esas preguntas solo lo irritaban más y miró a Harry que estaba a su lado tumbado en el suelo pastoso para que no los vieran, pendiente de todo, incluso de él. Hank mas allá hizo una señal con sus manos indicando que deben cruzar el rio que tienen frente a ellos, a unos quince pasos, todos asienten obedientes y esperan la señal, que solo era la mano de Hank elevada en un puño.

--Te amo--- Susurró Harry-Mantente a mi lado siempre---

---Si alfa---

Se besaron dulcemente y Hank hizo la señal, se levantaron para caminar con piernas flexionadas, armas frente a sus ojos y semblante concentrado. Louis caminó más adelante y Harry se instaló detrás, escucharon unas risas que provinieron del fuerte y luego un disparo, todos se agacharon esperando a que las luces del faro pequeño los iluminaran, pero no ocurrió nada. Louis agradeció exhalando el aire turbio por su boca.

---Vamos--- Dijo Hank con voz ronca y demandante. Luke no estaba ya que se quedó en el tanque detrás suyo y Louis tuvo que estar en tierra por la enorme rabieta que hizo, reusándose a estar lejos del alfa. Hank no se calentó la cabeza y le dijo que si, pero Harry se enojo con el y le hizo sentir mal, aunque rápidamente esto cambio cuando Louis se mantuvo a su lado, emanando el aroma a hogar que tranquilizaba a Harry de inmediato.

Bajaron hasta el rio y lo cruzaron con las armas sobre su cabeza, Louis rodaba los ojos y gruñía bajito cuando el agua se metía en sus botas, empapándole los malditos calcetines verdes; lo odiaba, aborrecía empapar su ropa porque después se sentía pesada y pegajosa.

---después de esto te hare un té, o enfermaras--- Dijo Harry en el oído de Louis.

---No me gusta mojar mi ropa---

---A mi tampoco---

Louis se rio bajito y Harry lo ayudó a subir a la orilla. Tal como pensó la ropa estaba casi diez kilos más pesada, se estremeció con rapidez por el frio que se calo en su cuerpo y Harry se acercó a él para darle un abrazo.

---Te dije que te quedaras en el tanque Lou, te vas a enfermar ahora---

--No, prefiero estar acá, y punto---

Harry gruño y no dijo nada, solo se dispuso a seguir avanzando con la mano del omega entre la suya, apretándola con fuerza para tranquilizar a ambos.

---Arrastras-Demando Hank a su lado, todos los soldados se recostaron en el suelo lodoso y utilizaron los codos para acercarse a la reja de madera con alambres de púas.

---Sostiene--- Le dijo Louis al alfa, Harry sujetó el alambre con sus manos y Louis sacó su alicate del bolso marrón avejentado, cortó hábilmente y avanzó a rastras, sabiendo que su bebe estaba ahí experimentando todas sus sensaciones de miedo y temblor-Ya bebé, ya acabará, ya estaremos en casa---

Winter Wine (l.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora