Detrás de cámara, las sonrisas se borraban, solo quedaba el amargo sabor de la soledad, de la agresividad y la pasión.
Quien diría que detrás de esos rostros de ensueño habían monstruos escondidos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tu sonrisa de ángel escondía mil demonios
Utahime siempre fue una chica fuerte y llena de confianza, pero ese día se sentía insegura, consideró y replanteó si verdaderamente está hecha para el medio artístico. Aún estaba a unas cuadras para llegar al set de filmación, ese día se filmaría en el exterior, y al parecer los fans de los actores y actrices habían averiguado el lugar en el que grabarían.
El lugar estaba repleto de personas, y ella no sabía cómo ir hacia aquella multitud, pedir permiso y atravesar para poder ingresar al área restringida donde había una larga fila de guardias de seguridad impidiendo el paso.
Había visto pasar por la calle autos extremadamentes caros, y sabía que era probablemente sus compañeros del cast que contaban con fama y dinero, cosa que ella aún no tenía y tuvo que tomar el tren para llegar hasta ahí, y ya no sabía que más hacer.
—¿Señorita Utahime Iori?— La delicada voz la trajo a su realidad y giró su rostro encontrando una limusina color negro con vidrios oscuros —Parece que necesitas ayuda, ven— Le dijo el joven actor de cabello blanco, para esto un hombre al servicio del actor había bajado y abierto la puerta sosteniéndola, mientras se inclinaba en saludo.
Gojo Satoru.
Utahime solo pudo recordar las incontables veces que lo había visto en noticas de farándula, en películas, portadas de revista y redes sociales, era toda una celebridad, y ahí estaba brindándole su ayuda.
Ella parpadeó un par de veces, y el joven de ojos hermosos le hizo una seña sonriendo de forma coqueta para que entrara, su corazón se aceleró con nerviosismo y entró, se sentó y sus manos fueron de forma tímida a sus rodillas. Sus ojos se abrieron al ver aquella pareja y niñas que también estaban ahí dentro.
—Oh, lo siento mucho, ¡Buenos días!— Dijo torpemente intentando levantarse pero se golpeó su cabeza, hizo un gesto y se volvió a sentar.
Escucho la leve risa de Gojo y también la de la actriz Shoko, ambos la miraban con diversión, mientras que el tercero, el productor Geto ni siquiera la miró, observaba algo en su iPad y bebía algo de la gran colección de licores que habían ahí dentro.
—Mamá es la chica que tiró mi helado— Añadió una pequeña castaña recostándose en su madre, Shoko le sonrió a su hija asintiendo.
—Entonces Utahime, ¿Estas lista para la grabación de hoy?, escuché que este podría ser tu debut como actriz— Murmuro Gojo tomando un vaso, con una pinza colocó hielo y luego añadió el licor, sirviéndoselo.
Ella lo tomó nerviosa agradeciendo en voz baja, Satoru se divertía de ver a esa dulce muñequita temblar frente a él.
—S-Si, es la primera vez que me dan un papel en una serie, he actuado antes, pero en teatro— Dijo sonriendo con pena, dio un trago pequeño a la bebida y está quemó su garganta.
