Capitulo 1

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Alo

Por favor, Rai, escúchame — le dije con voz suplicante mientras lágrimas escapaban de mis ojos —. Somos amigas hace mucho, las cosas no pueden terminar así — dije con voz entrecortada.

— Vete ya de mi casa, Alo, que no me interesas — me dijo secamente. — No quiero escucharte.

— Yo sé que muchas veces nos peleamos, pero no podemos dejar la amistad por una tontería — seguí insistiendo afuera de su casa. — Sabes que te quiero mucho y no quiero perderte. Vine hasta acá para arreglar las cosas.

No hubo ninguna respuesta de su parte. A ella ya no le importaba. Me alejé de la puerta y comencé a caminar calle abajo, llorando mientras la lluvia empezaba a arreciar.

No podía creer que ya no le importara. Me sentía tan sola, como si me faltara un órgano vital. Sabía que no se debía solo a perder su amistad, sino también a perderla a ella, su linda risa que alegraba mis días. Al solo verla, todos los pensamientos malos se alejaban.

Me había encariñado tanto. Me cuesta aceptarlo, pero me había enamorado de mi mejor amiga.

Pero ahora solo había tristeza y soledad, una vida de la que ella ya no formaba parte.

De pronto, me levanté exaltada y llorando. Menos mal que solo había sido un mal sueño. Rai, a mi lado, se despertó preocupada, tomó mi cara entre sus manos.

— ¿Estás bien, Alo? — me dijo dulcemente, — ¿por qué lloras?

— Solo fue un mal sueño — le dije tratando de tranquilizarme —, pero ya estoy bien.

— Pero puedes contármelo — me dijo acariciando mis mejillas con sus pulgares —, eso tal vez te ayude. No me gusta verte así.

— Soñé que me dejabas — le dije, sonriendo un poco —, que nos peleábamos y tú no querías arreglar las cosas, que no te importaba.

— Pues solo fue eso, un sueño — me dijo sonriendo también —, sabes que te quiero tanto y que jamás dejarías de importarme, porque formas parte de lo que más amo en este mundo.

¿Ella me ama?

Suspiré aliviada y me acosté mientras Rai me imitaba, después me abrazó y comenzó a acariciar mi cabeza. Me sentía tan segura y tranquila que rápidamente quedé rendida.

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Me levanté estirándome en la cama y me di cuenta de que Rai no estaba. Tal vez está preparando el desayuno, a ella le gusta cocinar.

Fui a la cocina y efectivamente ahí estaba ella, preparando un desayuno que olía delicioso. Me acerqué lentamente por detrás y me di cuenta de que estaba chateando.

Con curiosidad, me asomé por un lado de su cabeza y vi el nombre de una chica: Isa ♡.

¿¿La tiene guardada con un corazón?? Además, ¿quién es esa tal Isa? Ella no me ha contado nada sobre ella. Se supone que es mi mejor amiga, no me gusta nada , mientras lo pensaba una sensación extraña se asentó en mi estómago. Me alejé y di la vuelta a la barra de la cocina quedando frente a ella.

— Buenos días, Rai — le dije sin obtener respuesta de ella —, ¡BUENOS DÍAS! — repetí más fuerte y finalmente se despegó del celular para mirarme.

— Buenos días, Alo — me dijo finalmente muy emocionada —, te estoy preparando el desayuno.

— ¿Me estás? — dije indagando — ¿tú no desayunarás conmigo?

— Emmmmm, no — me dijo un poco nerviosa —, una amiga me invitó a desayunar.

— ¿Una amiga? — dije tratando de que no se notara que me molestaba un poco —, ¿y por qué no me habías contado de ella?

— Simplemente no salió el tema — dijo no tan convencida —, bueno, me tengo que ir. Volveré para el stream, no te preocupes — me dio un beso en la mejilla y salió de la casa.

Me quedé pasmada y el sentimiento en mi estómago incrementó más. Empecé a sentir un raro ardor.

No me quedó más que desayunar y pasar tiempo con Koki para calmar lo que sentía.

Rato después escuché la puerta y fui a revisar pensando que era Rai, pero no era ¿Alex?

— ¡Puñeta, ¿y esa cara de felicidad? — me dijo burlándose, — vine más temprano para ayudarte y mira cómo me recibes, entro a mi casa como si nada.

— Perdón, Alex — le dije sinceramente, — es que esperaba a otra persona.

— Sí, ya sé, a Rai — me dijo con cara coqueta —, verdad que se fue con una nueva amiguita — siguió molestando —, pero ¿por qué te pones así?

— No me pongo de ninguna manera — le dije molesta —, ella ya no me cuenta nada. ¿Desde cuándo la conoce?

— Yo solo sé que salieron juntitas y felices — dijo haciendo énfasis en la última palabra —, mejor vamos a seguir con los preparativos para el stream de hoy — dijo haciendo crecer el ardor en mi estómago.

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Horas después dejamos todo listo. Hoy prepararíamos 2 pizzas con ingredientes dulces solamente.

Faltaba 2 hora para prender y volvió a sonar la puerta y supe quién era, así que me quedé sentada en el sillón y Alex fue a abrir.

— Hola, nena — le dijo a Rai, — ¿cómo te fue con tu 'amiga'? — dijo dibujando comillas con los dedos, — tú sí tuviste un buen día — siguió diciendo mientras me volteaba a ver.

Solo le hice una señal obscena mientras Rai no veía.

— Sí, me fue muy bien — dijo emocionada mientras se quitaba su hoodie, que por cierto era mío, — la pasamos súper y la comida estaba riquísima.

— ¿Solo la comida? — le dijo Alex con voz coqueta, definitivamente quería ver el mundo arder, este cabron.

Sentí como mi cara comenzaba a arder, además de mi estómago, y volví para ver la próxima reacción de Rai, cuando de repente se giró hacia Alex dejando su cuello a la vista.

Deseé no haber visto nada. Un maldito chupetón, y no era para nada pequeño. Parece que alguien la pasó genial.

Me levanté encabronadísima y caminando rápidamente hasta encerrarme en el baño, hirviendo de coraje.

Pero yo no tenia derecho a molestarme....¿o si?

Algo contigo - Railo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora