Capítulo 6

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Alo

Provocar a Rai para luego huir no fue lo mejor que he hecho, pero gracias a Dios, Rai decidió dejarlo pasar y no presionarme, cosa que agradecí infinitamente.

Durante el día no pasó nada más y todo transcurrió muy tranquilo. Estábamos descansando en la piscina del hotel cuando me entró una llamada.

—¡Hola, nena! —me gritó Alex con su saludo habitual.

—Hola, Alex —lo saludé—. ¿Qué pasa?

—Las quería invitar a una fiesta —me dijo emocionado—. Un ligue mío es dueño de un antro que se pone con un ambiente rico.

—¡Acho, Alex! Cada semana un nuevo ligue —le dije riendo.

—Obvio, nena, sabes que me aburro —me dijo riendo también—. Entonces, ¿qué, vienen o no? —me preguntó.

—Déjame les pregunto.

Me paré de la tumbona y me dirigí a la piscina donde estaban Angie y Rai sentadas en la orilla.

—Oigan, chicas —les dije para llamar su atención—. Alex nos está invitando a una fiesta en un antro, que según él se pone muy bueno el ambiente.

—¡Sí, vamos de una! —me dijo Angie emocionada—. Es una de las cosas que quería hacer aquí.

—Pues yo también quiero —dijo Rai, secundando a la argentina de cabello azul.

Estaba decidido, así que le avisé a Alex.

—No me gusta ese ambiente, pero hay que cumplirle los caprichos a Pitufina —le respondí por fin a Alex.

—Yo sabía, bueno, te envío la dirección y nos vemos a las 8.

—Allá nos vemos.

Colgué la llamada y nos quedamos un rato más en la piscina hasta que se dieron las 6 y Rai empezó a insistir con irnos a arreglar.

Terminé aceptando y regresamos a la habitación. Tomé una ducha rápida y decidí ponerme un pantalón y una chaqueta a juego de mezclilla, y por debajo un bralette de encaje negro muy lindo. Complementé con mis lentes oscuros y accesorios.

Terminé bastante rápido de arreglarme pues no le sabía a eso de maquillarme, así que me acosté en la cama a esperar a las chicas.

Ellas no tardaron tanto. Angie iba vestida muy linda; llevaba unos shorts anchos en negro y un top del mismo color. Al contrario de nosotras dos, Rai iba súper femenina; llevaba una falda rosa y un top blanco con accesorios que combinaban a la perfección.

Me encanta, no sé cómo explicarlo. Ella es tan hermosa y no tan solo su físico, es una hermosa persona que se preocupa por los demás. Ella se preocupa por mí.

—Límpiate las babas —me dijo Angie—, ya no disimulas.

—¿De qué hablas? —le dije mientras pude ver la sonrisa en la boca de Rai—. Mejor ya vámonos.

Tomé mis cosas y salí de la habitación con Angie y Rai detrás de mí. Como era su deporte favorito, empezaron a reírse de mí.

Tomamos un taxi y le di la dirección del famoso antro. Quince minutos después llegamos a un sitio muy concurrido. Pagué y nos bajamos.

No sé quién era el famoso ligue de Alex, pero esta vez se lució. Era un lugar súper grande, hasta reventar de gente, y por la fachada podría jurar que era un bar privado.

Nos acercamos a la entrada donde estaba el guardia, y sin preguntarnos nada, nos abrieron el pase VIP.

Todo por dentro era mucho más lindo y lujoso. Había de todo allí dentro, hasta habitaciones privadas.

No tardamos en dar con Alex.

—¡Hola, nenas! —nos dijo abrazándonos—. Qué bueno que quisieron venir.

—Yo no quería —respondí rápido.

—Tú te callas y disfrutas —me dijo Rai—. Hace mucho que no íbamos a un lugar así.

—Sí, Alo, qué ambiente más chévere.

Nos fuimos a sentar a una mesa que estaba sola. Yo estaba bastante amargada pues no era mi ambiente favorito.

—¿Y saben qué? —nos dijo Alex—. Thiago les reservó una habitación VIP, por si después de unos tragitos no pueden regresar al hotel —dijo entregándonos una tarjeta dorada.

Dábamos por hecho que Thiago sería su ligue temporal dueño de la discoteca. Como yo era la más responsable, tomé la tarjeta guardándola en el bolsillo.

—Toma, Alo —me dijo Angie entregándome una bebida—. Para que entres en ambiente.

—Yo no tomo —le dije a Angie dudando si regresarle el vaso—, pero hoy podría hacerlo —dije mientras le daba un largo trago que me quemó la garganta.

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Varios tragos después, la estaba pasando cabrón, bailando con mis acompañantes de esta noche. Lo estábamos dando todo en medio de la pista de baile, todos nos hacían bulla y yo, siendo medio tiesita, me soltaba gracias al alcohol.

Otras personas pasaron al centro, pero nosotras seguimos bailando. Llegó un punto donde quedamos bailando solamente Rai y yo. Ella se puso de espaldas y tomó mis manos para guiarme a lo largo de su cuerpo mientras subía y bajaba moviendo las caderas al ritmo de la música.

Tragué grueso, no sé en qué momento habíamos llegado a esto, pero no me quejaba en lo absoluto. Una sensación poco conocida se instaló en mi bajo vientre mientras bailaba con la pelirroja.

Ella se giró quedando de frente, tomó mi cara entre sus manos y luego juntó nuestros labios en un beso para nada inocente.

La tensión que había entre nosotras ya era demasiada y Rai se separó de mí para mirarme a los ojos.

Sin decir una palabra, tomé su mano guiándola fuera de la pista y subimos juntas al ascensor.

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Hola a todos, nuevo cap, como siempre espero que les guste ya que es mi primera vez escribiendo.

Disculpen fallas en mi historia y si me tardo en actualizar, me agarra un bloqueo y no tengo creatividad.

¿Que creen que pasara en el siguiente capitulo?

Me hace muy feliz leerles y saber que les gusta, pues me inspira a seguir escribiendo.

Si tienen recomendaciones para siguientes capítulos, déjenlos por aquí.

Muchas gracias

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Besos

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