Coincidentemente una carta cruza por debajo de las puertas de varios chicos.
Todos son citados para participar en uno de los reality show más conocidos del habla hispana, off cameras.
No importan cuantos seguidores tengan, a que se dediquen o de d...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sabían a que se enfrentarían, el rumor corría por la casa.
Era de madrugada y un ruido despertó a una parte de los participantes, para ser específicos a los de la habitación más grande.
-¡La concha de tu hermana boludo!-.
El Argentino menor despertó de golpe al igual que sus compañeros de habitación.
-Que verga fue eso-. Hablo con voz cansada el único Mexicano en la habitación.
-Nah wey, yo me quedo aquí-. El Estadounidense se acomodo en su cama.
-¿Y si es un ladrón?-. Volvió a hablar el Mexicano.
-Con mayor razón pendeja-. Le respondió el Colombiano.
-Tenemos que ir-. El rubio se bajaba de su cama.
-Yo te acompaño-.
El Mexicano se coloco sus lentes y camino hasta la puerta junto al Argentino.
-Voy con ustedes-. El actor levanto una escoba que estaba a un costado de su litera.
Todos cruzaron la puerta a excepción del Estadounidense quien prefirió quedarse acostado, con tal seguridad que tenía la casa nada peligroso sería, no era buen motivo para interrumpir su sueño.
A la cabeza iba el más bajo, o sea el Mexicano, con la escoba en mano preparado para romperla en la cabeza de quien se cruzara frente a él. Lentamente, uno por uno, bajaron los escalones.
-Son las putas siete de la mañana, ¿Quien vergas esta abajo?-.
Revisaron todo el piso a excepción de la cocina, nada, caminaron hasta la última.
Grande fue su sorpresa al encontrarse a personas del equipo de limpieza reponiendo la comida y ordenando todo para el próximo desafío, el ruido: Un vaso de vidrio roto.
-Boludo y yo que me cague entero-. Dijo el rubio soltando una risa.
-¿De que será el próximo reto?-. El actor intentaba enfocar la vista, sin sus lentes olvidados en la habitación le costaba un poco más de trabajo.
-Toma-. El Mexicano le entrego los suyos mientras se daba la vuelta para volver al cuarto.
-¿Soy yo o están preparando cosas para cocinar?-. Pregunto el rubio.
El Mexicano no le tomo importancia, sea cual sea el reto se las arreglaría para ganar. Se dedico a volver a su cuarto, caminaba a paso somnoliento observando el interior de las habitaciones. A primera vista le pareció todo normal en la habitación de su hermano, sin embargo, cuando volvió a verla pudo observar la cama del susodicho vacía. No lo había visto bajar, "Debe estar en el baño" fue su única idea.
Antes de entrar a su aposento le dio un vistazo, contuvo la respiración y la sorpresa, su hermano junto al "Gringo" plácidamente dormidos, el Estadounidense estaba recostado mientras el otro sentado en el suelo con la cabeza inclinada hacía la cama con una leve sonrisa dibujada en sus labios. No pudo no fijarse en como se posaba la mano del modelo sobre los cabellos oscuros de su hermano.
