𝑭𝒐𝒓𝒃𝒊𝒅𝒅𝒆𝒏 𝑭𝒓𝒆𝒔𝒉𝒎𝒂𝒏 || ✧ ᴊᴀʏᴡᴏɴ ✧

Capítulo 5

-Vas a mirarlo todo el día o vendrás a comer algo -Riki preguntó a media mañana.

Jay miró de la cara dormida de Jungwon a la de Riki.

-Es bastante penoso, pero creo que podría mirarlo todo el día sin sentir a mi estómago.

Él lo miró echándose hacia atrás y suspiró. Dios, sólo mirar esas pestañas... Incapaz de controlarse más, Jay se inclinó y besó los dulces labios de Jungwon separados. Despertando, Jungwon comenzó a besarlo mientras abría despacio sus ojos. El sabor de la pasión de Jungwon puso a su polla dura debajo de sus vaqueros. Jay rápidamente echó un vistazo alrededor del cuarto.

Varios de sus amigos sonreían abiertamente mientras el resto fingió no estar implicado en el espectáculo de media mañana.

Con un gemido suave, él rompió el beso y se retiró.

-¿Listo para conseguir algo para comer?

Los ojos de Jungwon lo miraron traviesos mientras lamió sus labios. Jay oyó un gemido desde más allá del cuarto y giró justo a tiempo para ver a Jake darle un codazo a Sunghoon en el estómago, cogido con la guardia baja, Sunghoon soltó un "uuuf" antes de girarse y besar a su hombre.

Jay estrechó sus ojos sobre Sunghoon. Conocía a su amigo y ni siquiera sabía si había sido él quien había gemido, pero de sólo pensar en él en contacto con la lengua de Jungwon...

-¿Estás listo? -preguntó Jungwon, interrumpiendo sus pensamientos.

-Sí -le dijo, decidiendo dejar vivo a Sunghoon por otro día.

Jungwon se elevó del regazo de Jay y lo tiró del sofá.

-No puedo creer que me hayan dejado dormir así - le decía Jungwon mientras se dirigían hacia la cocina.

Jay pasó su mano sobre la espalda baja de Jungwon.

-Creo que, si alguien pudo dormir con tantas ovaciones que hubieron, debe haberlo necesitado. Además, disfruté mirándote.

Después de hacerse él mismo dos emparedados y un tazón grande de Nachos, Jay agarró una cerveza del refrigerador.

-¿Quieres una coca?

-Si, por favor -contestó Jungwon.

Jay miró el plato de Jungwon y sacudió su cabeza.

-Creí que dijiste que tenías hambre. No tienes suficiente alimento ahí para llenar a un niño.

El plato de Jungwon consistió en unas zanahorias con un apio y un medio emparedado.

Encogiéndose de hombros, Jungwon recogió su plato.

-Esto es lo que generalmente como. Sólo piensa en todo el dinero de supermercado que vas a ahorrarte.

-Estoy más preocupado por gastar un poco más en el maldito supermercado. ¿Cuándo fue la última vez que te hiciste estudios físicos médicos?

-Directamente antes de que me matriculara, papá... -Jungwon paró y cerró sus ojos brevemente-. Papá me obligó a ir.

-¿Y el doctor no dijo nada sobre tu peso?

Jay miró como la espalda de Jungwon se enderezaba. Su barbilla se levantó mientras sus ojos encontraban a Jay.

-Mi padre hizo que el doctor tomara cada prueba de sangre imaginable. Claramente él también pensaba que debía haber una razón por la que soy tan pequeño y débil. Creo que en realidad se decepcionó cuando averiguamos que estoy perfectamente sano, sólo soy pequeño.