NOSOTRAS [MilkCiize]

Capítulo 8

-Ford!...
-Es que Panly, sus manos estuvieron juntas y tú no sentiste absolutamente nada, pero la pobre Pattranite ¿Se puso como tomate?
- Pues, sí, eso fue lo que pasó - Dijo recordando la escena.

Estaban en el comedor de la Universidad y Milk ponía al día con las noticias de lo sucedido el día anterior con Love.

-Patt es muy atractiva y está clavadísima de tí, no entiendo cómo es que ella no te gusta - Milk rodó los ojos - oh, sí que lo entiendo, es porque tú no tienes los ojos puestos en ella sino en su mejor amiga y esa amiga tiene novio. Traaaaagedia. - Ford se estaba burlando.

Ahí estaba nuevamente ese dolor visceral. Milk decidió seguir concentrada en su libro de Anatomía.

BIIIIIM

Dió un salto ante el sonido de sus notificaciones.
Revisó y efectivamente era la desaparecida Alpha. Pero está vez era algo nuevo. Una foto. Ingresó al chat y la foto era de uno de los dulces de pan de naranja y limón que ella amaba.

-Alpha: Uno de tus favoritos, según lo que me contaste. -////- ñami.
-Vosbein: Tú disfrutando y uno aquí muriendo de hambre :'C
-Alpha: Vosbein, ¿No desayunaste?
-Vosbein: tengo la mala costumbre de olvidarlo
-Alpha: eso no es mala costumbre, eso es descuido -.- tenemos que solucionar esto.
-Vosbein: ¿Qué tienes en mente?

Esperaba una respuesta…

-Pequeña Panly, te veo muy concentrada en ese teléfono estos días - preguntó un muy chismoso Ford - ¿Algún amor virtual pequeña diablilla? ¡CUÉNTAME! - trató de ver la pantalla del teléfono de su amiga, pero esta fue más rápida y bloqueó la pantalla evitando que su entrometido amigo pueda ver.

-Ustedes a pesar de ser mayores que nosotras, son los más infantiles - Esa era Ciize riendo de la actitud de sus amigos.
Ambas amigas habían llegado hasta la mesa que compartían Milk y Ford en el comedor.

-P'Milk, esto es para tí - Una feliz Love le daba el paquete de lo que Milk identificó como su dulce favorito. - ¡Pancito de naranja y Limón! -  Sus ojos se abrieron de par en par y su estómago estaba más que emocionado. - !Esperen! ¿Acaso Love era?... - Deseo lo disfrutes. - Ambas chicas se despidieron.
Milk miro a ambas desaparecer por el pasillo.

-Cierra la boca que una pobre mosca terminará estrellándose ahí - Milk lanzó su borrador en dirección de su amigo, pero este lo esquivó con agilidad.

El timbre de la facultad sonó. Por ese día las clases habían culminado. Lo recordó, ese día iría a su casa acompañada de Ciize. Eso la ponía nerviosa. Demasiado.
Milk no había tenido otra oportunidad de estar tan cerca de la pequeña, no después del incidente de las duchas.
Caminó acompañada de Ford hasta la salida de la facultad. Se despidieron ya que su amigo iría a casa con su novio, tal y como lo hacía todos los días.
Y Milk, tal y como se lo pidió Ciize, estaba en la puerta de la facultad esperándola ya que la pequeña había ido a buscar algo en su casillero.

Miro su teléfono celular.
Alpha no había respondido.
One Last Kiss de Hikaru Utada sonaba en sus auriculares, la canción pertenecía a el OST de uno de sus animes favoritos.
Cerró los ojos e inhaló profundamente el aire, sus pulmones quedaron llenos, exhaló despacio.
Abrió los ojos lentamente. Ahí estaba ella, caminando en cámara lenta en su dirección.
-Dios, gracias por crear esta criatura tan perfecta- Dijo para sus adentros. Una sonrisa boba se dibujó en sus labios.
Su cabello estaba suelto, el aire jugaba con él, ella deseaba ser ese aire y poder pasar a través de cada uno y sentir el aroma a vainilla que recordaba. Ese día y como todos los demás llevaba un lazo en el cabello. El de ese día era rojo.
Sus ojos estaban perfectamente maquillados lo cual lograban realzar las belleza de estos.
Su delineado la hacía ver aún más sexy. Ella era la combinación perfecta entre lo tiernos y lo sensual.
Sus pestañas, sus labios, sus manos sosteniendo las asas de su mochila.
Sus piernas estaban al descubierto ya que la pequeña llevaba puesta una falda, ambas estaban perfectamente tonificadas. Sus zapatos altos le daban unos centímetros más a su favor, pero no dejaba de ser más pequeña que la pelinegra.
¿Cómo es que Ciize podía ponerla en ese estado?. La pequeña le sonrió al darse cuenta que los ojos de Milk estaban puestos en ella.