Originalmente, esta historia se creó como un 'one shot' para un regalo de Navidad/Reyes para Male; participando en la dinámica de 'Carta de deseos navideños' que se realizó en nuestro grupo SasuKarin.
Sin embargo, por azares del destino y porque lo...
Este tema fue el que me permitió continuar con el fic que empecé a inicio del año, ya que me devolvió la inspiración para seguir con la historia. Corresponde con el día 19 del calendario Sasukarin Month 2024.
Espero sea de su agrado.
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Sasuke aún no sabía a ciencia cierta cómo la había convencido de que le hiciera caso, probablemente fue por el primer paso que él se atrevió a dar con ella; y a pesar de que la pelirroja en un inicio abrió los ojos enormemente con pánico y estuvo a punto de empujarlo con todas sus fuerzas, él siguió profundizando el beso, a lo que ella finalmente se rindió y le correspondió.
Curiosamente, Karin empezaba a sentirse más relajada estando así de cercana al azabache. ¿Sería acaso que él podría sentir algo parecido a lo que ella sentía? ¿Podría ser que había una remota posibilidad de que él la quisiera? La pelirroja reprimió sus pensamientos, no quería hacerse falsas ilusiones, tal vez sólo él estaba con las emociones al tope, al igual que ella, por todo lo acontecido en ese día.
Con pesar se separaron para tomar aire. La Uzumaki estaba a punto de protestar por lo ocurrido, cuando el azabache le ganó la palabra.
- He sido idiota por mucho tiempo...
La pelirroja lo miraba fijamente con asombro y la boca entreabierta.
- ... me he acobardado por más de doce años...
- Sasuke... - estaba nerviosa, no quería escuchar algo que le diera esperanza - ... no...
- Karin, – la miraba fijamente – te quiero.
- ¿Lo dices en serio? – estaba incrédula.
Éste asintió.
Mariposas, fue lo que sintió al escucharlo. Su quijada empezó a temblar e incontables lágrimas empezaron a brotar de sus ojos escarlata. Por primera vez, ella lloraba de felicidad; se abrazó a su cuello.
- Te prometo que todo estará bien – el hombre le susurró. Ella movió su cabeza en forma afirmativa para reafirmar lo que él de decía. – Descansa.
Desde que Karin tuvo sospechas de su estado, hizo los preparativos para huir a la guarida más lejana de Orochimaru; pidiendo permiso a éste con la excusa de ir para hacer una investigación que tenía pendiente, afirmando que en tres meses lograría concluirla.
La serpiente no era estúpida, sabía los 'porqués' de la pelirroja, después de todo él era el que les había tendido una trampa más para poder concluir el plan que llevaba maquilando por casi dos décadas. Sin embargo, el Sennin fingió que todo estaba bien y la dejó ser e irse; al fin de cuentas, tendría nueve largos meses para hacerse de su objetivo. Le sonrió y prácticamente la amenazó con verla pronto. De recordar la sonrisa de su ex-maestro, a la pelirroja se le helaba la piel.
