Aún en lo profundo, te diré que te amo

Capítulo 6

CAPÍTULO 6

Una semana había pasado del desastre en Delicious. La repostería se había recuperado casi por completo. Las cosas rotas habían sido reemplazadas por objetos nuevos, el piso fue limpiado a profundidad y las paredes vuelto a pintar. Los postres, pasteles y demás bocadillos volvieron a adornar las vitrina; y luego de cinco días de estar cerrado al público, los clientes pudieron regresaron a comprar.

Pero, a pesar de la ayuda de sus nuevas amigas y de varios locatarios que habían sido testigos del ataque a su local, Meena no logró levantar su ánimo. Desde luego agradeció a cada persona por la ayuda brindada y sin duda le emocionó mucho ver el letrero de su local brillar nuevamente, pero la imagen de su madre rompiendo todo y gritándole cosas horribles frente a sus compañeros, la seguía persiguiendo a cada momento. Ella temía que aquel brutal incidente se repitiera porque sabía que si volvía a pasar ya no tendría la fuerza necesaria para levantarse.

— Deberíamos salir a algún lado — propuso Ice de repente.

El grupo de amigas estaba reunido en el área de comida. Era jueves y la estilista tenía ganas de salir de la rutina apática en la que últimamente estaban envueltas.

— Trabajamos todo el día, todos los días ¿A qué hora se supone que salgamos? —preguntó Elsa.

— No creo que pase nada si cerramos dos horas antes —replicó Ice mirando a sus amigas— ¿Qué dicen? ¿Vamos a algún bar a tomar algo?

Las amigas se miraron entre sí animadas. La promesa del alcohol pareció motivarlas. Aoom miró a Meena que seguía revolviendo su arroz frito sin atreverse a darle el primer bocado. Lucía cansada, con ojeras pronunciadas y piel pálida.

— Puede ser mañana —dijo Aoom sin darle importancia —, creo que no tengo citas después de las seis.

Como siempre pasaba, bastaba con que Aoom estuviera de acuerdo en algo para que las demás aceptaran de buena gana.

— Creo que no me molestaría cerrar mi local unas horas antes—añadió Snack—, los viernes en la tarde le doy clases de guitarra a Malai, pero puedo decirle que nos acompañe.

— Se llevan mucho últimamente —sugirió Elsa.

— Solo le doy clases de guitarra

— Aja y que más...

— No nos salgamos del plan —intervino Ice— ¿A dónde vamos a ir? Conozco un bar que queda muy cerca...

Las amigas siguieron discutiendo los planes para salir de fiesta. Meena dejó de ponerles atención porque no le ilusionaba salir a ningún lado, además, ya había gastado mucho dinero en reparar su local.

— ¿Qué dices Meena? —preguntó Aoom dándose cuenta de qué Meena no parecía entusiasmada con los planes — ¿Mañana cerramos dos horas antes y vamos al bar?

La repostera sintió las miradas de sus amigas que habían dejado de discutir los planes y ahora esperaban su respuesta.

— No lo sé, el local ya ha estado muchos días cerrado, no me puedo dar el lujo de cerrar antes y menos los viernes que es el día en que más ventas hay.

El ánimo de todas se desinfló un poco. En esos días habían reforzado su amistad con Meena y ahora la consideraban una más del grupo.

— Sabemos que necesitas recuperar a tus clientes — aseguró Snack—, pero por favor piénsalo, creo que todas necesitamos desestresarnos.

— Si Meena por favor —añadió Ice—, le diré a todas mis clientes que compren uno de tus pasteles, así acabaras rápido la venta.

— Yo haré lo mismo —añadió Elsa.