ᗪᗴᗪᑭᑌᗴՏ ᗪᗴᒪ ᑭᗩᖇTIᗪO

Capítulo 4:

Narración normal:

El tiempo paso, tal parece que para el gusto o la comodidad del omega pasaba rápido. Su embarazo cursaba por la décima semana.

Sus dudas y miedos se iban disipando conforme la pequeña curva en su vientre iba creciendo. El no tenía el cuerpo de un omega común y corriente, al contrario de muchos omegas los cuales eran delgados y delicados, el gozaba de unos músculos bien formados y un cuerpo más tosco que el de los demás omegas. Lo único que lo delataba como un omega era su aroma y su fina cintura, no tan delgada pero perfecta para combinar con todo su cuerpo.

El abdomen bien trabajando y firme que había conseguido a lo largo de su carrera ahora era remplazado por el notable crecimiento de su bebé.

-Ya llegué- Un cansado Tobio anuncio al entrar a su hogar

-¡Tobio!- El omega se acercó rápidamente para saludar a su esposo. El pelinegro notaba cada día la actitud más positiva y alegre de Shoyo, haciendo resaltar su seguridad -¿Qué tal tu día?

-Cansado. Pronto habrá un torneo y estamos entrenando sin descanso- caminaron hacía su sala. Acomodados en el sillón siguieron con su conversación -¿Y si yo también me retiro? Solo un pequeño descanso. Ya no tengo la misma energía que a las dieciséis

-Pues tendrás que guardar un poco para cuándo nuestro bebé nazca... ¿Vas a tomar el descanso?- pregunto algo deprimido. Amaba la sensación de tener a su primer hijo, pero extraña estar en los entrenamientos y los partidos

-Es un torneo corto. Máximo dura dos meses y después tomaré mi descanso- Abrazo por los hombros a su esposo -¿Irán a verme?

-¡Obviamente!- Miro directamente a sus ojos y beso tiernamente sus labios -Por cierto. Creo que ya es momento de decirles a nuestras familias y amigos del bebé

Tobio no pudo evitar una enorme sonrisa -¿Estás seguro?

-Si. Estoy seguro que este bebé será nuestro si o si

Los primeros en enterarse obviamente fueron sus familias. La hermana de Shoyo fue la más emocionada al enterarse que tendría un sobrino.

Seguido de ellos reunieron a todos sus amigos en su casa para contarles.

La casa estaba llena de risas y conversaciones animadas. Todos sus amigos cercanos habían llegado, ansiosos por la reunión sorpresa.

-Bueno, gracias a todos por venir -Comenzó Tobio, ganándose la atención de todos.

-Gracias a ustedes por invitarnos- Respondió Tadashi, sobando un poco su vientre hinchado -Pero... ¿A qué se debe?- pregunto curioso.

Shoyo tomó la mano de Tobio, su sonrisa radiante -Tenemos una noticia muy especial que queremos compartir con todos ustedes

-¿Noticia?- Inquirió Tsukishima, con su típico tono desinteresado

-¡Estamos esperando un bebé!- Anunció Shoyo, sin poder contener su emoción

Hubo un breve momento de silencio, seguido de una explosión de felicitaciones y abrazos.

-¡Eso es increíble!- Gritó Yuu, abrazando a Shoyo con fuerza -¡Felicidades!

-Yuu, no lo vayas a lastimar- Lo llamo Asashi cargando a un bebé idéntico al menor

-Tranquilo, están emocionados- Comentó Kageyama, recibiendo un golpe amistoso en el hombro de Daichi

-Van a ser unos padres geniales- Dijo un omega peligris, con lágrimas de alegría en los ojos.

-Muchas gracias "Suga"- Le agradeció Shoyo

-Bueno- Está vez hablo Tsukishima -Ustedes eran los únicos que faltaban por ser padres. Encerio el enano se puede estar quieto, juraría que incluso con una barriga se la pasaría jugando

-Kei no empieces por favor, solo felicitalos- Regaño a su esposo

-Por cierto ¿Y Tanaka?- Pregunto Shoyo, ya había pasado una hora desde que sus amigos llegaron y el nombrado no llegaba

-¡Oh! Dijo que llegaría más Tarde. Tenían que llevar a Haru por una vacuna- Le respondió el omega más bajito antes de oír un llanto proveniente de su bebé

-Oh...- Asashi volteo a ver a su esposo -Ya tiene hambre

-Damelo- Le extendió las manos para poder cargar a su pequeño -¿Me prestan un cuarto?

-¡Claro!- Contesto rápidamente el de cabellos naranjas -¿Te puedo acompañar?

-Por supuesto

Ambos omegas se dirigieron al cuarto del dueño de la casa entre platicas y risas.

-Mamá, Miyu no me quiere dejar jugar con la pelota- Un pequeño rubio llegó acompañado de una niña un poco más pequeña de cabellos verdosos

-¡No es cieto!- Respondió molesta -Kai no sabe jubar

Antes de que Tadashi pudiera contestar, su esposo se adelantó.

-Miyu dale la pelota a tu hermano- Regaño el de lentes -Y tu Kaito, juega bien con tu hermana

-Si papá...- Contestaron los hermanos para salir corriendo al patio

En cuanto los Hermanos Tsukishima salieron el hijo mayor de Asashi junto con las hijas de Daichi entraron.

-Papá tengo hambre- Hablo Ryu acercándose a Asashi

-Nosotras también- La hija mayor del peligris

-Les sirvo un poco de arroz- Ofreció Tobio

-¡Oh! Muchas gracias- le respondió Daichi

Antes de entrar a la cocina el alfa volteo a ver aquella conmovedora escena. Su corazón se llenaba de alegría al pensar que dentro de muy poco ellos estarían así, acompañados de su hijo o hija.