Narración normal:
Shoyo reposaba su cabeza en el hombro de su marido, ambos medio adormilados. Habían tenido que levantarse temprano para ir a su revisión médica, esperaron unos minutos hasta que una enfermera tuvo que ir a despertarlos para decirles que era su turno.
Entraron con un Shoyo aún adormilado, con mucho cuidado el alfa lo guío a su asiento.
La doctora, una mujer de mediana edad con una sonrisa cálida, los recibió amablemente -Buenos días señores Kageyama ¿Cómo se sienten hoy?
-Un poco cansados, pero estamos bien- respondió Tobio mientras Shoyo asentía, aún frotándose los ojos para despejarse.
-Eso es normal, especialmente con las náuseas y el cansancio típicos del primer trimestre- dijo la doctora, revisando sus notas -Vamos a hacer una ecografía hoy para asegurarnos de que todo esté en orden. Pero primero un chequeo rápido al señor Shoyo ¿Listos?
Shoyo asintió con una mezcla de nervios y emoción. Con delicadeza y un toque de cariño la doctora examinó el cuerpo del omega, su talla y peso, que su temperatura estuviera en lo normal. Al terminar su revisión se recostó en la camilla y Tobio tomó su mano, dándole un apretón reconfortante.
La doctora aplicó el gel frío sobre el vientre de Shoyo y comenzó a mover el transductor sobre su piel -Vamos a ver a tu pequeño ahora- comentó, mientras observaba la pantalla.
De repente, el sonido rítmico de un pequeño corazón llenó la habitación. Shoyo y Tobio se quedaron quietos, con los ojos fijos en la pantalla. Allí, en blanco y negro, podían ver la pequeña figura de su bebé.
-Ahí está- dijo la doctora con una sonrisa -El latido del corazón es fuerte y todo parece estar en perfecto orden
Shoyo no pudo evitar que las lágrimas llenaran sus ojos -Es… es increíble- susurró, apretando la mano de Tobio con fuerza. Tobio, conmovido, besó la frente de Shoyo
-Todo va bien, Shoyo ¿Nuestro bebé está sano?- pregunto Tobio, con una expresión de profunda ternura.
-Se está desarrollando muy bien- la doctora continuó revisando y midiendo, explicando cada detalle con calma para que ambos padres entendieran el desarrollo del bebé -Voy a imprimirles unas fotos para que se las lleven a casa
Cuando terminó la revisión, la doctora limpió el gel del vientre de Shoyo y le ayudó a sentarse -Si tienen alguna pregunta o inquietud, no duden en llamarme. Por ahora, sigan cuidándose bien, y Shoyo, asegúrate de descansar lo suficiente
-Gracias, doctora- respondió Tobio, ayudando a Shoyo a bajar de la camilla.
Mientras salían del consultorio, Tobio sostuvo las ecografías en sus manos, mirándolas con adoración -No puedo esperar para mostrarles esto a todos
Shoyo, más despierto y radiante después de la experiencia, asintió -Sí, no puedo creer que ya podamos ver a nuestro bebé. Supongo que ellos sintieron lo mismo la primera vez que vieron a sus niños
-Vamos a ser los mejores padres- dijo Tobio, abrazando a Shoyo con cariño mientras se dirigían hacia la salida del hospital -Amor ¿Puedo llevarlas al entrenamiento? Les quiero presumir a mi hijo
-Amm... Solo cuidalas ¡Y no las pierdas!- Advirtió tierno
Tobio beso los cabellos naranjas de su pareja -¿Te llevo a casa?
-Nop, quedé de ver a Kenma. Ve a entrenar yo puedo llegar solo- Beso la mejilla del más alto -Mejor llámame cuando salgas y me pasas a recoger
-Perfecto
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ᗪᗴᗪᑭᑌᗴՏ ᗪᗴᒪ ᑭᗩᖇTIᗪO
FanficHa pasado mucho tiempo desde la primera vez que se vieron, en ese juego de secundaria donde se conocieron y se volvieron eternos rivales. El partido donde encontraron a su destinado. Pasaron la preparatoria juntos, entre esos años su relación de ami...