Cap28

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En un día aparentemente normal, Blitz y Stolas estaban acurrucados en la sala de estar de su palacio. La calidez de sus cuerpos juntos y la sensación de paz que compartían en esos momentos era algo que ambos valoraban profundamente. Stolas estaba leyendo en voz baja un libro de poemas, mientras Blitz lo escuchaba con los ojos cerrados, disfrutando de la tranquilidad.

De repente, sus hijos aparecieron en la puerta, visiblemente nerviosos. Blitzer, Stols, Star, Blitza y Fix intercambiaron miradas antes de que Blitzy, el mayor, diera un paso adelante.

Blitzy tragó saliva y habló, su voz temblando ligeramente. "Papá, mamá... tenemos algo que deciros."

Blitz y Stolas se miraron, preocupados, antes de volverse hacia sus hijos. "¿Qué pasa, pequeños?" preguntó Stolas con suavidad.

"Bueno, es que... hemos escuchado rumores. Rumores sobre ti, papá ," dijo Blitza, con una mezcla de preocupación y curiosidad en su voz.

Blitz frunció el ceño. "¿Rumores? ¿Qué tipo de rumores?"

Star, la más reservada del grupo, dio un paso al frente y continuó. "Dicen que alguien está intentando desafiar tu posición en la empresa. Alguien muy peligroso."

El rostro de Blitz se endureció, pero antes de que pudiera responder, Fix añadió rápidamente: "No queríamos preocuparos, pero pensamos que debíais saberlo."

Stolas extendió una mano tranquilizadora hacia Blitz, apretando suavemente su brazo. "Gracias por decírnoslo, chicos. No os preocupéis, haremos todo lo posible para manejar esta situación."

Blitz suspiró, tratando de mantener la calma para no preocupar más a sus hijos. "Gracias por la información. Siempre es bueno estar al tanto de posibles problemas. Pero os prometo que lo manejaremos."

Los niños asintieron, todavía preocupados, pero un poco más tranquilos al ver la confianza de sus padres.

"Y ahora," dijo Blitz, tratando de aliviar la tensión, "¿qué os parece si todos nos relajamos un poco y vemos una película juntos? Será bueno para despejarnos un poco."

Los niños asintieron con entusiasmo, agradecidos por la distracción. Blitz y Stolas intercambiaron una mirada de complicidad, sabiendo que, pase lo que pase, enfrentarían cualquier desafío juntos, como siempre lo habían hecho.

La sala de estar se llenó de una atmósfera más ligera mientras Blitz se levantaba y buscaba una película que todos pudieran disfrutar. Stolas sonrió con ternura, observando cómo sus hijos se acomodaban en el sofá, sus preocupaciones momentáneamente aliviadas.

Blitz encontró una película de aventuras y la puso en marcha. Luego, se sentó junto a Stolas, quien inmediatamente le tomó la mano, entrelazando sus dedos en un gesto de apoyo y cariño. Los niños se acomodaron, algunos acurrucándose contra sus padres.

Mientras la película avanzaba, Blitz no podía evitar pensar en los rumores que sus hijos habían mencionado. Sabía que el mundo en el que vivían siempre estaba lleno de peligros y desafíos, pero también sabía que, con Stolas a su lado, podía enfrentar cualquier cosa.

En un momento dado, Blitz sintió la mirada de Stolas sobre él. Se volvió y vio la preocupación en los ojos de su esposo. "¿Estás bien?" susurró Stolas, tratando de no interrumpir la película.

Blitz asintió, apretando suavemente la mano de Stolas. "Sí, estoy bien. Solo pensando en lo que dijeron los niños. Pero no te preocupes, manejaremos esto."

Stolas le sonrió con calidez. "Lo sé. Siempre lo hacemos."

Blitz le devolvió la sonrisa, agradecido por el apoyo incondicional de Stolas. Se inclinó y le dio un suave beso en la frente, una promesa silenciosa de que todo estaría bien.

Este es el futuro perfecto ✨💕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora