Adéntrate en el vibrante y peligroso mundo de "House of the Dragon" con esta colección de one shots, cada uno una ventana a la vida oculta y apasionada de sus personajes más emblemáticos. Desde intrigas palaciegas y traiciones hasta fantasías íntima...
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Folds in her gown
Lucerys Velaryon x Lectora
Mi esposo era Lord de Driftmark, nuestra boda había sido recientemente, y estábamos ansiosos por morar en nuestro nuevo hogar.
- ¿Qué te parece? - le mostré un vestido que había sido enviado como obsequio de su madre.
- Preciosa, simplemente maravillosa - me miró desde el trono de la familia Velaryon.
- Desde ahí, impone más que cualquier monarca, mi lord. - con mis manos tras la espalda subí los escasos escalones hasta llegar a él.
Me senté en sus piernas y juntos observamos todo el salón, que algún día perteneció a su abuelo.
- Podría acostumbrarme a esto.
- No hay nada en tu vida que no merezcas, mi amado Luke - bese su mejilla.
- Esto es nuestro - besó la comisura de mis labios.
- Hemos estado postergando algo que ambos queremos desde la primera vez que nos vimos. - baje la voz y bese la parte trasera de su oreja.
- Podemos solucionar eso, ahora mismo - con detenimiento apretó una de mis piernas.
- Disculpe mi lord - carraspeó un caballero - Mi lady - saludo - Lamento la interrupción. M'Lord se le requiere el en muelle, dos de los barcos han caído en una trampa de la renovada triarquia y están completamente destrozados, los navegantes ya lo esperan.
- Supongo que debemos postergarlo un poco más - me sentó sobre el trono, y besó mi frente.
Quería sorprenderlo, más tarde, puse manos a la obra y preparé nuestros aposentos con velas colocadas estratégicamente y algunas hierbas de olor que conocía eran sus favoritas.
Llego y se encontró con esta sorpresa, se tomó el tiempo de considerar los detalles. Me miró y no ocultó su emoción.
Llevaba puesto su vestido favorito, me presenté ante él, sumisa y obediente.
Nos quedamos un momento en silencio, mirándonos a los ojos. La intensidad de su mirada me hizo sentir nervios y deseo. Se acercó a mí, sus manos firmes pero tiernas tomaron mi rostro y sus labios encontraron los míos en un beso apasionado.
Sentí cómo su calor se transmitía a través de mí, y el mundo exterior desapareció. Sus manos comenzaron a explorar mi cuerpo, despojándome de mi vestido con una urgencia controlada.
Cada caricia enviaba ondas de emoción a través de mí. Su tacto era rudo, pero no falto de amor, había una fuerza en él que revelaba su deseo incontrolable, pero también un cuidado que mostraba cuánto le importaba.
- Te he deseado desde el momento en que te vi - susurró, sus labios rozando mi cuello mientras me despojaba de la última prenda. Sus palabras encendieron una chispa en mi, y mis manos comenzaron a desabrochar su ropa con la misma intensidad. Nuestros cuerpos se encontraron, piel contra piel, y sentí una conexión profunda e inmediata.
Nos dejamos caer sobre la cama, se tomó el tiempo de repasar cada centímetro de mi cuerpo con su lengua, acto que erizó mi piel, se concentró con especial atención en mis senos, los cuales mordía y succionaba con igual intensidad y la pasión se desató completamente, me tomó con fuerza, sus manos firmemente aferradas a mis caderas, su mirada recorría cada centímetro de mi cuerpo, admirando cada curva y detalle ya antes recorrido con su boca, sus ojos demostraban asombro y devoción. A pesar de la intensidad de su agarre, había una ternura en su toque que me hacía sentir adorada y deseada en igual medida.
Nuestros movimientos eran fugaces pero llenos de deseo. Luke se había vuelto un hombre fuerte, y sus manos ásperas me sostenían con seguridad, guiándome y enseñándome.
Hubo momentos en que la pasión se volvió casi salvaje, pero en cada toque, cada beso, podía sentir el amor juvenil que sentimos de pequeños.
Nos movimos juntos en un ritmo frenético, y el cuarto se llenó con el sonido de nuestras respiraciones entrecortadas y susurros de placer. Sentí cómo su fuerza me envolvía, llevándome al borde del éxtasis. Cada vez que nuestras miradas se encontraban, veía en sus ojos no solo deseo, sino también un anhelo de quedarnos juntos toda una eternidad.
Nos desplomamos sobre la cama, nuestros cuerpos entrelazados, cubiertos de sudor y satisfacción.
Mientras nuestras respiraciones se calmaban, él me abrazó, sus dedos acariciaron suavemente mi espalda. - Eres todo lo que siempre he deseado y más - murmuró en mi oído.
A la mañana siguiente tuvimos una visita inesperada que recibí con gratitud.
- ¿Cómo están llevando sus primeros días de matrimonio? - la princesa me saludó con un beso en cada mejilla.
- El cielo es un lugar en la tierra junto a él, Rhaenys, no pude escoger mejor esposo. - dije cautivada por mi hombre.
- He notado eso. Es un hombre afortunado de tenerte. Cuéntame más, ¿cómo es su vida juntos?
Sonreí, recordando los momentos felices que compartía con mi esposo. - Lucerys es muy atento y siempre se asegura de que esté cómoda y feliz. Es un hombre de gran corazón y tiene un sentido del humor que ilumina incluso los días más oscuros, nos complementamos muy bien.
- Es un placer escuchar eso. En tiempos como estos, encontrar un amor verdadero es un regalo raro y precioso, parece que han encontrado esa joya.
Antes de que pudiera responder, la puerta se abrió y Lucerys entró en la sala. Sus ojos se iluminaron al verme y una sonrisa se extendió por su rostro.
- Abuela - saludó, inclinando la cabeza. - Espero no estar interrumpiendo
- No, en absoluto, Luke - respondió Rhaenys con una sonrisa. - Hablabamos precisamente de ti y de tu encantadora esposa
Lucerys se acercó y tomó mi mano - Entonces debo unirme a la conversación para decir cuánto la admiro y amo, es una esposa increíble, su paciencia, su inteligencia y su bondad me inspiran cada día, no hay un momento en que no me sienta agradecido por tenerla a mi lado.
Sentí cómo mis mejillas se ruborizaban. Rhaenys sonrió ampliamente, observándonos con aprobación.
- Es hermoso ver tanto amor y respeto entre vosotros - dijo la abuela de mi esposo. - Espero que su matrimonio siga siendo una fuente de fortaleza y alegría para ambos.
- Lo será - respondió Lucerys con firmeza. - Porque cada día me esfuerzo por ser digno de ella, y sé que ella hace lo mismo por mí....
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Un Luke que heredó Driftmark y se volvió todo un hombre, señor de las mareas y esposo devoto, me encantaaaa <3
Algo lindo para quitar el amargo sabor q nos dejó el capítulo de ayer 😞
