capitulo 2

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Los pasillos de Aradon Prep estaban
silenciosos, casi desolados, excepto por las pisadas de una morena princesa, que no tenía prisa de ir a su destino.

Más allá de una peculiar sensación de
ser observada.

Nada nuevo para ella. Era la hija de la
Bella Durmiente, capitana de porristas y líder del grupo Acapella, ¿Más razones?.

Audrey había recibido un mensaje de
WhatsApp de Jane; hablando sobre
una cita que tendría con Carlos y de la
cual estaba completamente nerviosa.
Lo supuso, era su primera cita con
Carlos. Seguramente hasta la primera
cita que tendría en su vida.

Analizaba ese pensamiento, que por
momentos, a lo lejos pudo observar
la estatua del padre de Ben, la hacía
rememorar las reuniones en que sus
padres la vestían tan espléndidamente sólo para ir a visitar al reino de los Villeneuve.

Al igual que recordaba, con
ácidez, la forma en que sus padres,
especialmente su abuela Leah,
reprocharon muchas veces el como
había permitido que Ben la dejara y
más de una manera tan humillante,
igual de muchas pautas y consejos
sobre el como mantener prendado de
ella a Chad.

«tu madre no perdió a su príncipe ni
dormida» atentamente tu querida
abuela»

Poco a poco los pasillos, conocidos
de memnoria, ya no eran su foco de
atención y mucho menos los ojos que
supuestamente la miraban, su mente
viajaba en una retrospectiva sobre su
vida y experiencias amorosas.
Extrañamente lo hacía mucho desde
su última discusión con Jay, sonrió
sin poder evitarlo como antes había
aprendido. Llamando la atención de
uno que otro empleado o estudiante
que estaba en los pasillos.
Esa sonrisa era de una "damisela
enamorada".

Analizaba mucho las diferentes
experiencias en que había vivido antes, y las vividas con Jay. Muchos dirán que

"el pasado es el pasado, nos distrae del
presente"

Pero Audrey reconocía con
mucho trabajo que conocer sus errores era un método para aprender de ellos.

El idealizar a Ben; como el príncipe
que le daría una coronay un inmenso
castillo.
El manipular y usar a Chad; como un
Salvavidas a su estatusya su último
aliento de esperanza de un hermoso
castillo y un “poderoso" rey a su lado.
Pero también iba analizando algo más.

Ambas relaciones tenían muchas cosas similares.

A ambos los conocía desde niños, los había considerado perfectos candidatos, y a su vez en un aspecto ahora claro para Audrey: Ambas relaciones tuvieron mucho que ver con la presencia de su familia. En especial de su abuela.

Lo que tenía con Jay era totalmente
distinto, casi era por decirlo un alivio y su primera vez.

Su familia no hablaba o intervenía, el
que no estuvieran informados de su
relación influía mucho.
No se preocupaba por impresionar a
Jay, bueno... Ahora no, al principio era
distinto.
Conocía a Jay desde hace 2 años,
casi tres, pero en 13 meses había
desglosado sentimental mente al
ex ladrón, además de que había
descubierto cosas que desconocía de
ella misma. Había vivido experiencias que ella alguna vez pensó absurdas o lejanas a su realidad, pero con Jay era distinto.
Hasta lo prohibido con el se sentía tan
confortable y grato.
Como cuando tuvieron su primera cita. Se sonrojo sin evitarlo.

Muchos chicos, como Ben y Chad,
la llevarían a un restaurante
elegante (secretamente aburrido si le
quitas la emoción de la comida cara y
el privilegio), o un lugar espectacular
en Auradon (que ya seguro había
visto), pero Jay hizo algo totalmente
distinto.

¡Una princesa en apuros! (Jaudrey) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora