Echo Gorge era un completo caos, habia hadas volando alrededor de los árboles tratando de apagar el fuego que se extendía a través de los árboles y no olvidemos a la gigante completamente asustada trataba de hacer reaccionar a Ordo quien se encontraba inconciente en el suelo con heridas por todo su cuerpo, por más que ella quisiera ayudarle a tratar sus heridas de aquel humano le era completamente imposible por su gran tamaño y creía que si lo tocaba aunque sea un poco solo empeoraria sus heridas, por lo que no le quedó de otra que esperar a su hermano menor y mientras tanto tratar de hacer que Ordo recuperara la conciencia.
-Abuelo- los gritos de Nasiens no se hicieron esperar.
Nasiens corría a gran velocidad para socorrer a su abuelo y en cuanto llegó se inco a su lado y le tomo el pulso con las manos temblorosas, afortunadamente lo sintió de inmediato y se tranquilizó un poco.
Su abuelo estaba vivo y eso le alegraba, pero sus heridas no se veían bien, él no dejaba de sangrar por todas partes, sin embargo por lo que pudo observar no eran mortales a corto plazo, pero si a largo plazo.
De forma inmediata empezó a tratar las heridas de Ordo cosiendolas y vendando sus pequeños cortes que tenía a lo largo del cuerpo. Nasiens no pudo evitar preguntarse ¿Quién había sido la persona que le había hecho semejante daño a Ordo y a Echo Gorge? No debían de tener enemigos en ninguna parte como para que vinieran e hicieran todo esté caos y menos su abuelo quien era el herbolario más amable del mundo.
-¿Que sucedió?- decidió preguntar Nasiens con la mirada oscurecida. Aquel que haya hecho esto lo iba a pagar muy caro. Nadie se metía con su familia
Dolores apretó sus manos con fuerza recordando lo que había pasado hace unos minutos.
-Unos caballeros llegaron pidiendo una audiencia con Ordo- comenzó a relatar -Sin embargo Ordo se negó a hablar con ellos. Así que enojados empezaron a prender fuego al Echo Gorge para amenazar a Ordo, pero este se negó a ser parte de los caballeros del reino de Camelot y lo atacaron dejándolo en ese estado-
Nasiens apretó fuertemente los puños al escuchar aquella historia, si él hubiera estado aquí hubiera defendido a su abuelo de aquellas personas. No los iba a perdonar por cometer tal acto.
-Perdoname por no haber estado abuelo- fueron sus palabras antes de soltar algunas lágrimas, se sentía completamente impotente ante aquella situación.
Nasiens amaba con toda su alma a su abuelo y más considerando que fue él quien lo acogió cuando era un bebé abandonado y jamás lo juzgo por no tener un género definido, al contrario lo acogió y crío como su nieto.
-Ayudame a llévarlo adentro- le pidió a Dolores.
En cuanto vio que su hermana acato el favor que le pidió, su mirada se dirigió al pequeño bosque del barranco que había quedado bastante destruido por culpa de aquellos caballeros sin corazón.
Todo estará bien. Le susurro al bosque y sin más con su poder empezó a sacar un un gas color morado. En cuanto aquel gas empezó a tocar a las plantas que se encontraban ya quemadas empezaron a florecer de nuevo y el olor a humo empezaba a volverse un rico olor a flores. Nasiens había salvado a todos las plantas que habían resultado afectadas.
Sintiéndose un poco mareado al usar aquel poder en aquella área decidió recostarse en el pasto y empezó a pensar en lo que haría ahora. Necesitaba resolver ese tema de los caballeros para que no volviera a suceder. Pero ¿Cómo lo resolvería? No sabía ni quienes eran ni de que reino venían. Necesitaba respuestas.
Cansado de levantó y entro a la casa en donde vivía con su abuelo. Cuando entro se sorprendió al ver qué su abuelo ya se encontraba consciente y no pudo evitar soltar lágrimas de sus ojos y correr para poder darle un gran abrazo.
-Abuelo- sollozo -Creí que te perdía- confeso.
-Aun soy muy joven para morir- le sonrió acariciando aquellos cabellos de color café de su nieto.
-Lamento no haber estado- confesó aquel chico limpiándose sus ojos llenos de lágrimas.
El mayor negó al escuchar aquellas palabras, su nieto no tenía la culpa de nada y también era un gran alivio de que esté no estuviera en dicho momento o de lo contrario pudieron lastimarlo también a él y eso no lo hubiera permitido Ordo. Nasiens era la luz de su vida.
El pequeño chico de cabello café no se separó de su abuelo aún si esté le decía que debía de ir a tomar un poco de aire fresco.
Su abuelo y hermana lo eran todo para él, sin ellos su vida carecía de sentido. Por qué eran la única familia que tenia ya que sus padres lo habían abandonado de bebé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Les dejo el primer capítulo de la historia.
Espero que les haya gustado, el segundo capítulo saldrá próximamente y prometo no tardar para publicarlo.
Además dentro de un rato publicaré una nueva historia inspirada en la película "Enredados". Esperenla.
